Jesús Chirino, secretario general de la Unión de Trabajadores del Estado Municipal, reclamó por el pago de aumento adeudado a los facturantes
Desde uno de los gremios que nuclea a los trabajadores municipales (UTEM), le reclamaron formalmente al municipio porque hay facturantes que no percibieron el incremento que les correspondió a los trabajadores de planta y contratados.
“Solicitamos a la Municipalidad de Villa María que deje de seguir discriminando a los empleados que hacen figurar como facturantes. Si bien, luego de insistentes reclamos, por estos días se hace efectivo el aumento de ingresos adeudado a algunos que revisten esa condición, no se les ha otorgado ese beneficio a todos”, argumentaron.
Además, esgrimen que a la hora de pedir explicaciones, las respuestas no son claras. “En algunas reparticiones se dice que sólo se pagará el aumento -adeudado hace meses- a quienes no son profesionales, pero luego nos encontramos con que no es tan así. La realidad es que hace meses que les deben el aumento a todos los facturantes y es necesario que se les abone a todos los empleados y dejen de lados otra discriminación más a quienes ya sufren no pertenecer a la planta permanente de empleados”.
Cuestionan los gastos en seguridad
Por otra parte, desde la Unión de Trabajadores del Estado Municipal indicaron que “plata no falta” para pagar los aumentos acordados. Y dieron como ejemplo “los elevadísimos montos que paga el municipio a empresas de seguridad para que cuiden edificios, cuando son tareas que deberían estar a cargo de empleados del Estado local”.
También llamaron la atención sobre “los bajos sueldos que se les paga a quienes hacen esas tareas y las grandes cantidades que cobran las empresas” contratadas a tal fin.
“Creemos que lo razonable es que el municipio deje de tercerizar esas tareas e incorpore como empleados propios a quienes trabajan cuidando espacios municipales. Ante la proximidad de una nueva administración municipal sería interesante que esto sea tenido en cuenta, ya que por el trabajo de dos o tres empleados (que cobran unos cinco mil pesos cada uno) las empresas llegan a cobrar unos 70 mil pesos o más. Son compañeros que muchas veces vemos que les hacen trabajar 12 horas corridas, les pagan poco y las empresas se llenan los bolsillos. El municipio es responsable de las condiciones de trabajo de esos trabajadores, incluso si están registrados adecuadamente”, concluyeron desde el gremio que lidera Jesús Chirino.