Encontraron ayer el cuerpo de Tamara Córdoba, la joven intensamente buscada desde que la familia denunció su desaparición. Por el homicidio está detenido Alan Barrios, el joven que fue con ella al boliche el sábado y que decía “no recordar” lo que pasó
En un descampado del barrio Sarmiento de Villa Nueva, terminaron todas las esperanzas de encontrar con vida a Tamara Córdoba, la joven que había desaparecido el sábado último.
Es que su cuerpo desnudo y con signos de haber sufrido quemaduras, fue encontrado ayer a la tarde en un baldío ubicado sobre la calle Tucumán, a pocos metros de la avenida Carranza y muy cerca del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de la vecina ciudad, el lugar donde había sido asistida el sábado a la madrugada.
Por el hecho, está detenido Alan Barrios, el joven que se había criado con Tamara como “hermano” y que, según los primeros elementos, sería el supuesto autor del homicidio.
Jornada agitada
Desde muy temprano, en Tribunales, los padres de Tamara se reunieron con el fiscal René Bosio, quien fue el encargado de la investigación desde que se radicó formalmente la denuncia de la desaparición de la joven, es decir, el domingo 23 de abril.
Con los datos obtenidos desde esa fecha hasta ayer, el funcionario judicial comenzó a diseñar el operativo de búsqueda.
Primero comenzaron los allanamientos: en el barrio Los Olmos, donde detuvieron al joven ahora acusado por el femicidio y en el barrio Industrial, donde tanto Tamara como él vivían con su familia.
En lo que hace al rastrillaje, el primer operativo se hizo en el barrio Barrancas del Río. Allí, una dotación de Bomberos Voluntarios junto a efectivos policiales comandados por el comisario Mauricio Rantica, con el apoyo técnico de Policía Judicial, comenzaron a buscar algún elemento que les permitiera encontrar a Tamara.
Algunos lo hacían embarcados, para poder ver desde ambas orillas; y otros desde la costanera villamariense que, a esa altura, tiene un tupido follaje espinoso, lo que la hace casi inaccesible.
La tarea se hizo contra cauce desde la altura del puente ubicado sobre la ruta 2, hasta el ingreso al barrio Barrancas del Río.
Transcurridas dos horas, el único hallazgo fue el de prendas de vestir: un pantalón y una remera blanca.
De pronto, se reunieron todos a la vera del río para redireccionar la tarea. Los Bomberos abandonaron la tarea y los policías se dirigieron hacia el barrio Sarmiento de Villa Nueva. Eran, aproximadamente, las 17, cuando había llegado la noticia del peor final.
“Hasta hoy mismo -por ayer- teníamos esperanzas de encontrarla con vida, éste era el final que no queríamos”, dijo el fiscal a EL DIARIO, desde el lugar del hallazgo. “Igual, sabíamos que no había desaparecido por su cuenta, porque no era habitual que se ausentara y dejara a su hijita”, agregó Bosio.
“Ahora estamos preservando el lugar para que la Policía Científica examine todo y busque pruebas y luego, se realizará la autopsia que determinará la causa de la muerte. Por el momento, no puedo decir si fue abusada sexualmente o no; ni tampoco de qué murió. Hay que esperar los informes médicos”, señaló.
Lo único que pudo adelantar es que por las huellas que presenta el cuerpo de Tamara “fue un hecho muy violento. No puedo dar muchas precisiones, lo único que le digo que es lamentable”.
Sobre el detenido, solo dijo que por los testimonios recabados ayer, “se comenzaron a reunir pruebas importantes que lo incriminan” y por eso, poco antes del hallazgo del cuerpo, se ordenó su detención. “Todavía no lo hemos indagado”, aclaró.
Hipótesis
Entre los datos que EL DIARIO pudo recoger en el lugar está el que refiere al estado del cuerpo, que tenía signos de haber sufrido quemaduras.
Una de las hipótesis sobre las que trabaja la Fiscalía es que el que perpetró el femicidio, volvió el domingo a la escena del crimen para intentar quemarlo y así borrar las huellas.
La segunda hipótesis es que el fuego lo haya originado en el mismo momento del hecho.
Sobre la causa de la muerte, si bien no está confirmado nada oficialmente, los signos externos hacen suponer que sufrió una fuerte golpiza, lo que ocasionó su deceso.
Fueron muchas horas de búsqueda que terminaron con el peor final para esta joven de 20 años, para su pequeña hija de 2 y para toda la familia que albergaba la esperanza de encontrarla con vida.