Parece ser que algunos no aprenden más. El fútbol es un deporte y debe tomarse como tal, no como una catarsis negativa para despotricarse con actos violentos cada vez que, por ejemplo, una actuación arbitral no es de su agrado.
Pero lo más doloroso es cuando los protagonistas de esa violencia son jóvenes o niños, que lo único que deberían hacer es festejar cuando se gana o solamente lamentarse ante una derrota.
Lamentablemente los actos violentos volvieron a hacerse presentes en una cancha de la Liga Villamariense, más precisamente en un encuentro de Inferiores de la quinta división en el que se enfrentaron Rivadavia y Colón, en cancha del Verde, en una nueva edición del clásico de Arroyo Cabral.
El dueño de casa había derrotado al Rojinegro por 3 a 1 y todo parecía transcurrir con normalidad, hasta que el árbitro Esteban Aguilar, del Registro Unido de Arbitro de Fútbol (RUAF), pitó el final del encuentro y se desató la barbarie.
Fue allí cuando un colaborador de las divisiones inferiores de Colón salió corriendo hacia la posición de Aguilar, aparentemente con la finalidad de increparlo; el juez también emprendió una corrida a los fines de evitar la agresión y en ese trayecto un jugador de Colón le hizo una zancadilla, provocando su caída al suelo y dejándolo indefenso ante la inaceptable reacción de (al menos) cuatro jugadores del equipo visitante, quienes durante algunos instantes le propinaron todo tipo de golpes, hasta que fueron separados por dos adultos de su parcialidad y por el intendente cabralense, Pablo Alcalino.
Así lo relató José Martínez, máximo referente de RUAF, quien telefónicamente nos informó que entrada la noche de ayer su infortunado colega se encontraba en el Hospital Regional Pasteur de Villa María realizándose los estudios de rigor para determinar la gravedad de los traumatismos que presentaba en la cabeza y en una de sus piernas.
Martínez también precisó que luego de recibir las curaciones necesarias, Aguilar se dirigiría hacia la Departamental San Martín de la Policía de la Provincia de Córdoba para realizar la denuncia correspondiente.
Así se escribió una nueva página que empaña el presente del fútbol nuestro de cada día, en el que parece que algunos no aprenden más.
Federico Gazzoli