Los ganadores de la fecha del Campeonato Argentino de Rally que concluyó ayer, y que compartió la cartelera con la prueba internacional, fueron Luis Arceluz/Querelt (Mitsubishi).
El piloto pampeano aprovechó los interminables problemas que tuvieron la mayoría de los protagonistas del torneo nacional para escalar posiciones y ubicarse en lo más alto del clasificador general, ganándole -incluso- a los autos Maxi Rally. La cantidad de abandonos sucedidos en solo 150 kilómetros de competencia desnudó la fragilidad de los autos nacionales.
Al igual que en la etapa anterior, ayer sábado los cambios estuvieron a la orden del día y se sucedieron los golpes de escena prácticamente sin respiro. Luciano Preto/Ohanessián (Chevrolet Agile MR), que parecían tener allanado el camino tras dominar el Día 1, ni siquiera llegaron a largar el primer sector de la jornada al romper el motor ni bien salieron del Parque de Servicios, elevando la cifra de cinco impulsores detonados para la estructura Tango Rally Team.
Por su parte, Marcos Ligato/García (Chevrolet Agile MR), compañero de escuadra, heredó el mando, sin embargo, también manifestaba problemas y marchaba herido, hasta que en la PE11 el impulsor dijo “basta”.
Con un tramo por disputarse, la victoria parecía quedar en bandeja para Nicolás Díaz/Allende (Ford Fiesta MR), aunque esto finalmente no se dio, ya que el bonaerense penó con el motor y se quedó con las ganas de largar el último sector cronometrado.
Nadie consiguió mantenerse tras alcanzar el mando de la prueba. Claro que, como en toda regla, siempre hay una excepción. Y allí, en el momento más indicado, surgió el nombre de Arceluz para convertirse en el primer pampeano en ganar en la general del Argentino.
Otro que tuvo motivos para celebrar fue Lucas Machado/Galindo (Peugeot 208 MR). El de San Antonio de Areco se metió segundo en la general y fue el mejor entre los protagonistas de la clase mayor, sumando su segunda victoria en el certamen nacional y, otra vez, en una fecha clásica, ya que la anterior la logró dentro de la Junior y en la tradicional Vuelta de la Manzana. Por su parte, Alejandro Menéndez completó el podio y revirtió una participación que no había comenzado de la mejor forma.
Otras clases y villamarienses
Arceluz no sólo se bañó de gloria por ganar la general, sino que además venció dentro de la RC2N, repitiendo el éxito logrado en el arranque del año en Tafí del Valle. En esta divisional, el de Macachín doblegó al barilochense Agustín Elvira/Tagle (Mitsubishi) y al catamarqueño Antonio Prevedello/Londero (Mitsubishi).
En la Junior, otro que puso replay fue Ricardo Daparte/Rozados (Ford Fiesta). El de Cruz del Eje debió trabajar hasta los últimos metros para asegurarse su segundo triunfo al hilo. La pinchadura de un neumático en el tramo final casi arruina su festejo, aunque el Chueco consiguió superar por apenas 9 s 7/10 al sanjuanino Gabriel Abarca/Varela (Ford Ka), quien casi salta del tercer al primer lugar sin escalas porque también aprovechó el retraso de Pablo Peláez/Chavarría.
El villamariense Gustavo Beccaría, navegante de Diego Miceli (VW Gol), logró sobreponerse a un fuerte golpe que rompió el tren trasero y posteriormente la rueda del mismo lado. Con ese inconveniente, casi arrastrándose, pudieron completar la carrera en el sexto lugar final.
La Clase RC5, la menor y más numerosa con 29 anotados, presentó una dura batalla entre los cordobeses Adrián Sánchez/Uez (Ford Ka) y Gabriel Cerutti/Coni (Ford Ka), hasta que este último se quedó y simplificó la tarea del representante de La Cumbre. En definitiva, Sánchez superó a Jorge Céspedes/Céspedes Ford (Ka) y a Gastón Pasten/Gandón (Ford Ka). El binomio representante de Villa María, Fernando y María Julia Clemente (Renault Clio), tuvo la gran satisfacción de sortear la tremenda exigencia y llegar al final de la carrera en la 12ma. posición.