Un multitudinario acto se realizó ayer en Villa María para expresar el repudio al fallo que beneficia con el “2×1” a un represor

Fueron los jóvenes y los grandes, fueron los nietos y las madres, fueron los peronistas y también los radicales. Los intendentes de ambas Villas, los concejales y los dirigentes gremiales y sociales. Y muchos, muchos ciudadanos de a pie que llenaron una cuadra y media marchando en repudio al fallo conocido como “2×1”, por el cual la Corte Suprema, con voto dividido, beneficia a un condenado por delitos de lesa humanidad.

La concentración se inició alrededor de las 18, en la esquina de Buenos Aires y General Paz, desde donde se leyeron comunicados de todas las organizaciones que participaron.

Tras la lectura del documento conjunto elaborado por los que convocaron a la marcha en Villa María, los manifestantes marcharon alrededor de la plaza para concentrarse frente a la sede del Juzgado Federal de Villa María.

Allí, dejaron plasmadas las imágenes y los nombres de los desaparecidos de esta ciudad y pañuelos blancos con la inscripción “No al 2×1”, que fueron hechos por militantes.

El acto

El documento que leyeron para cerrar el acto expresa: “Memoria, Verdad y Justicia, hasta que el último cuerpo aparezca, el último nieto sea recuperado y el último genocida tenga cárcel, recién en esas condiciones nos encontraremos para hablar de reconciliación, de reencuentro para construir una Nación que nos contenga a todos por igual. Hay que curar las heridas, pero sin dejar de mirar las cicatrices”.

Previamente, hicieron un repaso de las condiciones previas al polémico fallo, resaltando un decreto del año pasado en el que el presidente Mauricio Macri devuelve a las Fuerzas Armadas la autonomía que le había quitado en el retorno de la democracia Raúl Alfonsín.

También cuestionan la complicidad, entre otros sectores, de la cúpula de la Iglesia Católica, sin dejar de reconocer la labor de muchos sacerdotes, monjas y monjes que estuvieron y están comprometidos con los derechos humanos.

Por otra parte, se dio a conocer una declaración del Concejo Deliberante de Villa Nueva en la que repudian el 2×1 para delitos de lesa humanidad “olvidándose la perversidad cometida por la dictadura”.

El primer orador fue Fernando Mercado, quien señaló que la memoria de los desaparecidos “es algo sagrado para nosotros”. “En ningún lugar del mundo los crímenes de lesa humanidad son perdonados ni indultados”, remarcó.

Siguió Jeremías Canelo, de la Juventud Peronista, quien nombró a cada uno de los desaparecidos de Villa María diciendo que “venimos a poner el cuerpo, la voz y el alma por ellos y por los 30 mil que nos faltan”.

Siguieron Valentín Becchio y Marcos Ayesa, de la Federación Universitaria de Villa María (Fuvima), quienes destacaron que por su juventud no vivieron la dictadura, “pero la tenemos presente” y que por eso vienen “a marcar la cancha a un gobierno que quiere imponer las mismas políticas económicas de la dictadura”.

También se leyó un comunicado del Partido del Trabajo y del Pueblo en el Frente Popular, en el que además de repudiar el fallo, recuerdan que el represor que fue beneficiado con el “2×1” “se paseaba por los pasillos del hospital Posadas cargando armas, deteniendo y torturando a trabajadores y vecinos, muchos de los cuales siguen desaparecidos”.

Finalmente, los organizadores anunciaron que iniciarán una campaña de recolección de firmas para pedir el juicio político a los tres integrantes de la Corte Suprema de Justicia que rubricaron el fallo que generó la movilización popular en todo el país.

Otro de los oradores fue el intendente Martín Gill.

También hubo expresiones artísticas como la de Matías Sánchez, quien interpretó una poesía; Mauro Guzmán, que emocionó con un texto de Juan Gelman; un integrante de la Asociación Civil La Quijotada leyó una carta de Osvaldo Bayer a Gelman. También actuaron jóvenes músicos.

Mujeres

Desde el colectivo “Estamos para nosotras”, destacaron que según el informe de la Conadep, el 33% de los desaparecidos de la dictadura fueron mujeres y de ese total, el 10% estaban embarazadas.

Se trató de mujeres jóvenes que sufrieron violencia de género dentro de la violencia ejercida por el Estado: “Gran parte de las víctimas no se atrevieron a denunciar las violaciones que sufrieron en los centros de detención clandestina, frente al aparato judicial reaccionario y machista al que se han enfrentado”, remarcaron.

Martín Gill: “Sin asidero jurídico”

El intendente Martín Gill participó del acto contra el 2×1. En diálogo con EL DIARIO dijo que “el fallo no tiene asidero jurídico” porque pretende equiparar “un beneficio establecido para los delitos comunes con los delitos de lesa humanidad, que por su atrocidad tienen elementos diferenciados, como el de no prescribir”.

“Tampoco tiene sustento dentro de una política de memoria, donde todos los órganos del Estado se encontraron fuertemente comprometidos, porque el Poder Judicial fue parte de esta política de memoria. Desde el Juicio a las Juntas durante el Gobierno de Alfonsín, hasta los juicios de la Memoria con los gobiernos de Néstor y Cristina”.

Entiende que algunas opiniones recientes “de gente del poder” pueden haber sido el caldo de cultivo para este fallo, aunque prefiere en casos que tratan sobre derechos humanos propender “a la unidad del conjunto de los argentinos y no a interpretaciones partidarias”.

Nelson Mamondez: “Me dio mucha bronca”

“Soy militante de la Juventud Peronista de Villa María y la verdad que cuando conocí el fallo me dio mucha bronca”, dijo Nelson Mamondez. “Nosotros militamos por un proyecto que ha trabajado mucho por los derechos humanos y esto es un intento que pretende dar marcha atrás a esos avances”, agregó.

Miguel Olaviaga: Memoria colectiva

“Hay una memoria colectiva que garantiza nuestros derechos. La presencia de la gente y la actitud del Congreso muestra que esa memoria está en nuestro ADN”, señaló Miguel Olaviaga, ex-preso político.

Valoró “el freno” que la movilización popular y los partidos con representación en la Legislatura le impusieron a ese polémico fallo.

Olga Nieva, la mujer de los pañuelos

“El pueblo en la calle lo dice todo. Tenemos que seguir en la lucha para defender los derechos que ganamos”, dijo Olga Nieva, quien, junto a sus pares del PSol, hicieron 60 pañuelos blancos como los de las madres, con la inscripción “No al 2×1” y unos 140 pañuelos “de puño” con los restos de tela que quedaba. “Por suerte, no nos alcanzó, somos más los que nos manifestamos”, concluyó.

Una herida que no cierra

María Livia “Beba” viuda de Arias es madre de Miguel Angel, villamariense secuestrado en Córdoba cuando apenas tenía 19 años. Acompañada por un hijo y una nieta, dijo presente en el acto de ayer. “Sentí mucho dolor cuando conocí el fallo, no pueden andar libres los que nos quitaron a nuestros hijos”, dijo la mujer a EL DIARIO.