La madre confió que todo comenzó hace un mes atrás, cuando el estudiante decidió teñirse de rubio. Dice que las autoridades de la institución solo argumentan que “no tiene buena presencia”
“Me teñí de rubio con un aerosol para un campamento, me gustó y decidí teñirme definitivamente. Desde ese momento la directora empezó a decirme que así no me iba a dejar entrar al colegio, y lo intentaron hacer. Tampoco quisieron dejarme ir a los campamentos y me prohibieron pasar a izar la Bandera. Me hacen sentir mal diciendo que perdí la personalidad. Todo porque a la directora y a la representante legal no le gusta mi color de pelo, nada más”.
El relato pertenece a un alumno de la escuela El Caminante que tiene 17 años y está cursando los últimos días de sexto año. Su madre, Norma Elizagaray, quien sabe que en el colegio todos lo van a identificar, prefirió no dar su nombre para mermar la exposición.
Quizás podrían haber “aguantado” 10 días más, cuando las clases culminan, para que también termine lo que el joven está sufriendo, pero Norma decidió contarlo porque “lo están discriminando, hostigando, torturando desde hace un mes”.
“Alrededor del 20 de octubre se tiñó. Sabía que no lo iban a dejar a entrar a la escuela porque eso le había dicho la directora, entonces presenté la primera nota”, contó. Desde ahí hasta hoy, no solo volvió a presentar notas (que mostró en la Redacción) en la escuela, pidiendo que se revea la actitud hacia su hijo, sino que también acudió a la Dirección de Institutos Privados de Enseñanza (DIPE) y a la Inspección, pero sin recibir alguna respuesta concreta.
“La directora solamente argumenta que no tiene buena presencia así”, afirmó y sentenció: “Me sorprende lo cerrado del pensamiento”.
“Lo sacan de la fila y lo sientan en una silla para ridiculizarlo al frente de todos. Lo agarraban en el pasillo, la directora o la representante legal, y le dicen que si no se cambiaba el pelo no le iban a dar tal premio, o lo amenazaban con que no lo iban a dejar ir de campamento. El día del campamento fui y estuve una hora discutiendo con la directora. Le pedí que me diera por escrito que no podía tener el pelo así, y me dijo que no podía. El se siente discriminado en la escuela por la misma escuela. Como cualquier adolescente se le dio por teñirse. No creo que lo que haya hecho sea terrible”, consideró.
Incluso, cree que hay una especie de ensañamiento en contra de su hijo, que acude a la institución desde el jardín de 3. “Hay muchos chicos y chicas, incluso en su curso, que están teñidos también”, aseguró.
“Pasan todos, en forma individual, a izar la Bandera. A él lo dejaron para el último, y cuando ya no quedaba más nadie para pasar que, hicieron que pase todo el curso y no él solo”, manifestó sobre la situación que se dio el pasado viernes.
“No puede ser que tenga que ir a pelear todos los días para que lo dejen entrar”, apuntó sobre la actitud de los directivos de El Caminante, que está encabezado por Ingrid Becco.
Norma, angustiada, dijo: “Defendí a mi hijo por las vías normales, como hablar con la Dirección primero, ir a la Inspección después, pero no sé qué más hacer para que lo dejen de discriminar, de hostigar. Lo exponen delante de todo el colegio. En cambio, el colegio nunca fue por las vías normales, nunca me llamaron para decirme que no podía estar así, directamente lo empezaron a hostigar”.
A su vez, agregó que “lo peor es que mi hija fue abanderada de esta escuela y estaba teñida más rubia que él” y “de hecho, en su curso mismo hay chicas teñidas, parece que la directora se la agarró con él directamente”.
Norma mostró las reglas y pautas de convivencia del colegio, donde dice “buena presencia” y que es lo único que argumenta la directora. “Hace 14 años que asiste y jamás tuvo un problema y tiene buenas notas”, agregó.
“Yo decidí apoyarlo. El siempre fue de perfil bajo y no hizo nada más que teñirse de rubio. Yo no quiero que ahora sea peor lo que le hagan, pero como madre creo que tenía que apoyarlo y defenderlo por lo que está sufriendo”, cerró.