Las fotografías del integrante de la Policía de la Provincia de Córdoba se viralizaron a través de varios grupos de WhatsApp de la ciudad y llegaron hasta el teléfono de la mismísima titular del Tribunal de Disciplina de la fuerza
La presidenta del Tribunal de Conducta de la Policía de Córdoba, la abogada y exedil villamariense Ana Becerra, dispuso la apertura de un sumario a un cabo primero que presta servicio en la Departamental San Martín de la fuerza, al tomar conocimiento de una serie de imágenes de exhibicionismo obsceno que se hicieron públicas a través de grupos de WhatsApp.
Se trata de fotografías tomadas a manera de selfie por el ahora investigado, a quien ayer ya se le habría comunicado su pase a situación pasiva hasta que la División Investigaciones resuelva el caso y lo eleve al citado Tribunal, con el fin de que se adopte una resolución en el ámbito interno de la Policía.
Al parecer, el cabo primero Fernando P., envió las fotos a una joven, pero de alguna manera llegaron a estar a la vista del padre de la chica, quien a modo de venganza las repartió a cuanto grupo de WhatsApp pudo, generalmente todos “con asiento” en esta ciudad.
Más allá de que F. P. sea dueño de su vida privada, lo que le jugó absolutamente en contra ante los integrantes de la Policía que visualizaron alguna de las cuatro imágenes que circulan, es el haber llevado a cabo la acción con el uniforme policial. Fue precisamente esa la base de la queja que elevaron ante la presidenta del Tribunal de Conducta.
Antecedente
Según las fuentes que revelaron el caso al periodista de EL DIARIO, en el legajo del cabo primero figuran algunos antecedentes por hechos distintos, pero uno con ribetes similares al que abordará ahora el Tribunal de Conducta. Data de hace un tiempo y está relacionado con el pedido de los directivos de una entidad bancaria en la que prestaba servicios adicionales.
En esa oportunidad, también vestido de uniforme, el efectivo fue captado por una cámara de seguridad mientras se masturbaba.
Otro caso
Hace poco más de un año, el domingo 11 de septiembre de 2016, este medio informaba que “las imágenes de un cabo primero de la Policía de Córdoba luciendo el uniforme de la fuerza mientras realizaba una práctica de autosatisfacción sexual llegaron al Tribunal de Conducta de la fuerza”. En aquella oportunidad, se trataba de un video y el involucrado era Gonzalo L.
La primera medida, como ahora, fue disponer su pase a situación pasiva mientras se analizaba el tema. G.L. intentó en aquella oportunidad anteponer una coartada, a través de una denuncia en el sentido de que su celular había sido “hackeado”. Pero la indignación de Ana Becerra fue tal, que le demandó apenas unas semanas apurar toda la investigación para conseguir luego que el gobernador firmara el decreto de exoneración.
Habrá que ver cómo se resuelve ahora este nuevo caso de exhibicionismo “privado” que termina ante los ojos de “medio Villa María” (y alrededores).