“Me llamo Dora Giai y recibí esta carta de mi nieto. Hoy más que nunca pido justicia por él. Yo estoy sola y él siempre estuvo a mi lado, no sólo me cuidaba a mí, sino que era el jefe del hogar, conteniendo a su hijo Nemías, algo de lo cual muchos pueden dar testimonio.
Lo cuidaba y amaba día a día y personal de la guardería, la trabajadora social y referentes barriales como la coordinadora de la Biblioteca Eva Perón pueden dar testimonio.
Hoy más que nunca les pido a los fiscales y jueces que hagan justicia. Mi bisnieto y yo necesitamos a nuestro sostén libre porque se está cometiendo una enorme injusticia”.
La carta
“No aguanto más esta injusticia. No aguanto estar encerrado por algo que no cometí.
Estoy alojado en la cárcel de Villa María desde el 3 de agosto del año pasado, acusado de haber cometido un robo en el barrio Los Olmos, lugar donde viví toda mi vida. Le robaron a una familia que me conoce de toda la vida y que sabe que nunca fui un delincuente.
No sé porque estoy detenido, siendo que hay cámaras que reflejan el robo ocurrido. Tengo testigos que saben dónde estuve ese día.
Una de las víctimas dice que soy yo porque la Policía me sacó una foto cuando me detuvo.
Ese día me dirigía a tomar el colectivo en calle Lácar, cuando observé que en la casa de mi abuela estaba la Policía llevándose a mi hermano. Retorné al hogar y les pregunté por qué se lo llevaban, me preguntaron mi nombre y al identificarme, soltaron a mi hermano y me esposaron, explicando que habían recibido un llamado telefónico anónimo acusándome como el autor del robo.
Juro por mi libertad que yo no fui. No dejo de preguntarme cómo puede ser que existiendo cámaras en el lugar, me culpen de lo sucedido.
Sé que hay un Dios que es justo, que ve todo y saca todo a la luz. Pido justicia y ayuda porque tengo a mi hijo afuera, quien vivía conmigo desde que tenía 1 año, cuando me dieron la tenencia porque su mamá no lo podía tener.
La gente sabe que nunca robé y que ese día y a esa hora estaba comprando en el supermercado de los chinos del mismo barrio. Salí de allí y concurrí a la biblioteca a buscar unos bancos porque estábamos comiendo con mis viejos, mi mujer y sus tíos.
Pienso que la Policía me hace apuntar por foto o por ser moreno.
Mi hijo me necesita y los niños del barrio también porque yo estaba colaborando en el lugar donde les damos de comer a 40 chicos. A todos ellos les digo que los amo y extraño, por eso es que mando esta carta desde la cárcel para que esto salga a la luz y se haga justicia, porque no quiero estar sentado en un banco para que me condenen por ser moreno. Pido cámaras y fotos del robo o del lugar que sea porque soy inocente.
No quiero ir a juicio por algo que no hice. Jamás le robé a nadie. Llevo 10 meses callado y con mucho dolor por estar preso por algo que no hice. Sólo les pido a quienes saben que yo no fui que digan que es un error. Los dueños de la vivienda también saben que no soy capaz de hacer algo así, que no fui.
Días antes había estado en su vivienda, lugar al que siempre iba a vender como lo hacía en otras casas del barrio porque así me ganaba la vida, vendiendo ropa y de albañil.
Integré una cooperativa, pero tuve que salir porque al tener a mi niño a cargo, no podía cumplir los horarios que ellos programaban. Nunca robé, nunca lo hice ni lo haría. He peleado, incluso, para hacer entender a más de uno que el barrio se respeta, que la gente del barrio se respeta. Amo a los niños, soy un joven al que si bien le han pasado cosas en la vida, sabe muy bien cuál es el camino correcto.
Necesito mi libertad, no aguanto más estar encerrado y que mi hijo me vea detrás de las rejas.
Tengo un montón de preguntas sin respuestas. ¿Por qué la Policía me saca una foto cuando me detiene? ¿Por qué me detienen el 3 de agosto? El hecho ocurrió el 20 de julio y en ese interín fui a venderles. ¿Qué arreglo quieren hacer? ¿Por qué quieren arruinarles la vida a mi familia y a mi hijo? ¿Por qué me tienen preso, si yo no fui el que robó?
Espero de respuesta mi libertad para volver a mi vida normal, que seguramente ya no será la misma…”.
Mayco Moreno