La mayoría de los compradores había entregado entre un 60% y un 80% del valor de las aberturas y algunos ya habían abonado la totalidad. Listos para organizarse y reclamar lo que les corresponde, comenzaron a ponerse en contacto y a diagramar la estrategia a seguir
Más de una treintena de clientes damnificados por el repentino cierre de Planeta Aberturas se concentraron frente al edificio de la fábrica para reclamar lo que les pertenece, pues todos han pagado gran parte, cuando no la totalidad, de las aberturas que adquirieron.
“La idea es no quedarse de brazos cruzados y reclamar por lo que es nuestro. Estamos empezando a conocernos y con el correr de las horas se van sumando más y más perjudicados, y no todos son de Villa María, también hay, por ejemplo, de General Deheza y de Arroyo Algodón, hasta donde yo sé. Pero no descartamos que aparezcan más en los próximos días”, dijo Rodrigo Nieraad (uno de los damnificados) en diálogo con EL DIARIO.
“Ayer, en las horas que estuvimos, armamos un grupo de WhatsApp para mantenernos comunicados e ir pasándonos la información que vayamos recogiendo y estamos evaluando ir ante el defensor del Pueblo, como una primera medida”, explicó Nieraad.
Vale mencionar que la mayoría de los clientes ahora sienten peligrar su patrimonio por la posible quiebra. Todos son trabajadores y muchos están cumpliendo el sueño de la casa propia mediante el Procrear.
Un gran número de ellos ya había entregado el 80% del costo final de las aberturas; otros, el 60% y hay quienes ya habían abonado la totalidad del costo de puertas y ventanas.
Por tomar sólo un ejemplo, las aberturas completas de la vivienda de Nieraad costaban 67 mil pesos, de los cuales el hombre ya había entregado 40 mil. El resto iba a abonarlo contra entrega final.
El sistema utilizado por Planeta Aberturas, la empresa cuyos titulares son Pablo Martín Roggia, el abogado local Walter Oscar Bosio y el empresario Javier Adrián Romero, era el siguiente: el cliente debía terminar la casa, con dinteles, muchetas, pisos y techos, entonces la empresa tomaba las medidas y entregaba las aberturas ad hoc.
Pero ahora, temen que ya no haya entrega de tales aberturas y mucho menos, devolución del dinero abonado.
“Cuando hay quiebra, es difícil. Primero cobran los organismos estatales, AFIP, Municipalidad; luego los empleados, los proveedores y al final los clientes; los clientes vamos a la cola”, se lamentó Nieraad.
El hombre señaló, por otra parte, que los damnificados concurrieron ayer a la puerta de Planeta Aberturas porque “nos habían dicho que iba a ir un oficial de Justicia o alguien de Tribunales para hablar con nosotros, pero no fue nadie. Sí concurrió la Policía. Nos tomaron los números de teléfono, pero nos dijeron que ellos estaban ahí para cuidar que no le pasara nada al edificio, que no se rompiera nada. Entendemos el trabajo de la Policía, pero nosotros no íbamos a romper nada, íbamos a reclamar por lo que es nuestro; nada más”, explicó el damnificado, quien no dudó en dejar su número de contacto por si aún faltan perjudicados que no se sumaron al grupo con su reclamo. El celular es 0353-155082093.
Audiencia en Trabajo
Por otra parte, en el plano que compete a los 12 trabajadores de Planeta Aberturas que quedaron en la calle, Osmar Carreras, titular de la Unión Obrero Metalúrgica (UOM) de Villa María, confirmó que hoy al mediodía se concretará una audiencia en el Ministerio de Trabajo y reveló que, efectivamente, fue presentado por parte de la empresa un pedido de quiebra que obra ya en poder de la Justicia.
Asimismo, Carreras adelantó que ayer a la tarde mantuvieron una reunión con los 12 obreros virtualmente cesanteados para definir la estrategia a seguir.
“No va a ser nada fácil porque no hemos visto voluntad por parte de los empresarios de solucionar esto”, dijo Carreras.
