El viernes en el Favio – Se llama Lucas Estrada Lago

Empezó a escribir su historia de ciencia ficción “El comienzo del final” cuando cursaba sexto grado en la escuela José Manuel Estrada

El viernes a las 20 se presentará en el Centro Cultural Leonardo Favio (Sabattini 200), el libro “El comienzo del final”, escrito por Lucas Estrada Lago, un adolescente villamariense de apenas 14 años.

Incentivado por una maestra y por su madre, Lucas se embarcó en el maravilloso viaje de poder contar una historia que lo apasionaba. El resultado es esta flamante novela de ciencia ficción en la que habitan seres de otros mundos y seres extraños. La publicación, lanzada por El Mensú Ediciones, apunta a un público de la misma edad que el autor, al “target” adolescente.

La presentación estará a cargo de la profesora Adriana Gavotto y el editor Darío Falconi. La música que acompañará al joven escritor será de Conrado Vassia y Georgina Monti. La pintura que envuelve la portada y contraportada pertenece al artista Darío Doñate Alvarez. La entrada será libre y gratuita.

Desde su escuela

Desde la Escuela José Manuel Estrada, donde estudiara Lucas, enviaron un comunicado de invitación a la ceremonia que “llena de orgullo y felicidad a la institución”.

“El alumno Lucas Estrada Lago, egresado de la promoción 2016, con sus 14 años recién cumplidos, ha concretado un sueño: publicar su primera novela ‘El comienzo del final’. Esta historia la escribió cuando aún transitaba las aulas de la escuela primaria, en sexto grado. La compartió con sus compañeros y docentes, quienes admiraron su capacidad para narrar esta trama de ciencia ficción, de otros mundos y de seres extraños, que lleva a imaginar y a transitar múltiples y creativos escenarios, a viajar en el tiempo, un tiempo que aún es muy lejano para nosotros, con una cantidad de recursos que permiten ‘vivir’ la historia. Pero además, demuestra mucha lectura previa, conocimientos específicos acerca del espacio, del universo, poco común en un niño de la edad que él tenía cuando la escribió. Esto demuestra su inclinación hacia el género y su fascinación por hacer bien las cosas”.

Asimismo indicaron que “quienes fueron sus docentes lo recuerdan como un niño-alumno, curioso, interesado, capaz de expresar sus opiniones y pensamientos, escribiendo textos creativos y siendo capaz de captar la atención de sus compañeros con sus lecturas literarias interpretadas, que les permitían disfrutar de esos momentos”.

Por último agregaron: “Lucas, deseamos de todo corazón, que al igual que este sueño se hagan realidad muchos más”.