Juicio abreviado – Tres años de prisión por “abuso de arma” y “lesiones leves”

Se trata de Axel “Ekeko” Carle, quien discutió con el novio de su expareja y le disparó con una escopeta de caño recortado. Como el ataque fue desde larga distancia, la perdigonada le provocó heridas leves, aunque también alcanzó a un menor

Un joven villamariense recibió ayer una pena de tres años de prisión de ejecución condicional y pudo recuperar la libertad al finalizar la audiencia, luego de ser declarado culpable de un violento incidente que no pasó a mayores porque las heridas ocasionadas a las víctimas no revistieron gravedad.

En el marco de un juicio abreviado, Axel Denis Carle (21), alias “Ekeko”, fue hallado autor responsable de “abuso de arma” y “lesiones leves”, a raíz de un episodio delictivo registrado hace poco más de ocho meses en la exruta pesada, donde efectuó un disparo con una escopeta y lastimó al novio de su expareja y a un menor.

Carle, domiciliado en barrio Lamadrid de esta ciudad, admitió haber cometido el hecho ocurrido el 1 de diciembre de 2017 frente a una vivienda ubicada sobre avenida Intendente Maciel, producto de una discusión callejera producida momentos antes.

En efecto, cuando se conducía en una motocicleta, acompañado por su actual concubina, el iracundo trabajador de la construcción se cruzó con el otro individuo, que también iba en moto, e intercambiaron un cruce de palabras que incluyó insultos y amenazas.

A raíz de ese hecho, Carle se fue hasta su casa y volvió pocos minutos después portando una escopeta de caño recortado (nunca fue encontrada) y desde unos 30 metros efectuó un disparo cuya perdigonada alcanzó a la pareja de su exnovia en una pierna y también a un niño que se encontraba a su lado.

La víctima radicó la correspondiente denuncia policial y momentos más tarde personal de la Patrulla Preventiva detuvo al agresor, quien inicialmente fue imputado como presunto autor de “homicidio en grado de tentativa”.

Se declaró culpable

A poco de iniciada la audiencia de la víspera y tras la lectura de la pieza acusatoria por parte de la secretaria Gabriela Sanz, Carle se declaró culpable y posibilitó que el debate se abreviara, con lo cual se omitió la recepción de pruebas testimoniales en la sala del quinto piso de Tribunales.

En rigor de verdad, previo al juicio el fiscal Francisco Márquez y el defensor oficial Francisco Argañaras (asesor letrado del Segundo Turno) habían acordado solicitar en sus alegatos la pena finalmente impuesta por el camarista Félix Martínez, quien en la sentencia incluyó una serie de reglas de conducta que el condenado tendrá que cumplir a rajatabla si quiere conservar la libertad.

Al respecto, Carle deberá realizar un tratamiento psicológico para morigerar su irascible conducta y otro para recuperarse de su adicción a las drogas, además de abstenerse de mantener cualquier tipo de contacto con las víctimas del violento episodio que lo dejó 252 días entre rejas.

Señas provocadoras

Finalmente, cabe señalar que el joven albañil se mostró algo disgustado por la presencia de periodistas y fotógrafos en la sala de audiencias de la Cámara del Crimen cuando estaba por comenzar el juicio.

Si bien no ocultó su rostro (algo que suelen hacer algunos convictos cuando se sientan en el banquillo de los acusados), Carle optó por hacer algunas señas provocadoras cuando los reporteros gráficos “apuntaban” sus cámaras hacia él.