Joel Levi recibió una pena unificada en dos años y 10 meses de prisión y Jorge Nuevo fue absuelto por el “beneficio de la duda”. Ambos sujetos, con antecedentes penales, participaron de dos frustrados atracos en sendas panaderías de Villa María
El camarista Félix Martínez condenó a un delincuente rosarino y absolvió a otro que protagonizaron dos intentos de robo en sendas panaderías de la ciudad hace poco más de nueve meses, mientras que sus cómplices, una mujer y su hijo, pidieron la suspensión de juicio a prueba (“probation”) y evitaron sentarse en el banquillo de los acusados.
A requerimiento de la Fiscalía y con el acuerdo de la Defensa, el magistrado le impuso una pena de 10 meses de prisión efectiva a Joel David Levi (34), luego de hallarlo autor responsable de “robo en flagrancia, en grado de tentativa”, y lo declaró reincidente porque registra una condena anterior, dictada por la Justicia santafesina.
Por esa razón, debieron unificarse las dos sentencias y Levi recibió una sanción de dos años y 10 meses de prisión.
En tanto, el presidente del tribunal absolvió a Jorge Ezequiel Nuevo (32) por el “beneficio de la duda” y dispuso su inmediata libertad.
Dos hechos calcados
Ambos sujetos, domiciliados en la ciudad de Rosario, fueron detenidos a primera hora de la mañana del pasado 8 de febrero junto a una mujer y su hijo, María Iannuzzi (51) y Juan Alvarez (20), luego que protagonizaran dos frustrados asaltos en panaderías ubicadas sobre bulevar Sarmiento.
Luego de una serie de averiguaciones y como consecuencia de los antecedentes que registraban, Levi y Nuevo quedaron entre rejas mientras que Iannuzzi y Alvarez recuperaron la libertad, aunque continuaron procesados.
Sin embargo, días antes del juicio la mujer y su hijo (domiciliados en Villa María) solicitaron la “probation” y zafaron de tener que comparecer en la audiencia de debate junto a los rosarinos.
Panaderías locales
Los hechos delictivos tuvieron como escenarios las panaderías Santa Rita y Bariloche, situadas en bulevar Sarmiento 1268 y 2153, respectivamente.
Levi ingresó al primero de los locales con un control remoto de televisor oculto en la cintura, simulando que se trataba de un arma de fuego, y al grito de “esto es un asalto” pretendió intimidar a las personas que había en la Santa Rita. Sin embargo, la reacción de los clientes impidió que se concretara el asalto y el rosarino tuvo que escapar raudamente del lugar.
No conformes con eso, los miembros de la banda (quienes circulaban en un automóvil Chevrolt Aveo de color beige, conducido por Iannuzzi) continuaron viaje por bulevar Sarmiento y se detuvieron en la panadería Bariloche.
Allí nuevamente se bajó Levi y con el mismo ardid intentó apoderarse del dinero que había en la caja registradora y de un teléfono celular, luego de intimidar a la mujer que estaba atendiendo. Pero esta vez un empleado del local, más robusto y decidido, se trabó en lucha con el ladrón y logró reducirlo. De inmediato se dio aviso a la Policía y rápidamente llegaron al lugar varios efectivos de la Patrulla Preventiva, que esposaron y detuvieron al sospechoso.
Segundos después, los uniformados divisaron el Chevrolet Aveo con tres ocupantes en su interior, quienes al percatarse de la presencia policial se dieron a la fuga por bulevar Sarmiento hacia avenida Porfirio Seppey.
La acción evasiva de los sospechosos originó una persecución que finalizó momentos más tarde en la esquina de Remedios de Escalada y Viamonte, en barrio San Justo, donde se logró interceptar al rodado.
Juez y partes
Además del camarista Martínez, participaron de la audiencia de debate el fiscal Francisco Márquez, el abogado defensor Rodrigo Hayas (asistió a los dos rosarinos) y el secretario Guillermo Picco.
Los elementos de prueba complicaron la situación procesal de Levi, mientras que sus cómplices, quienes estaban acusados como presuntos “partícipes necesarios” del mismo delito, lograron zafar de una pena de prisión efectiva.
En el caso de Jorge Nuevo, llegó a juicio entre rejas porque registraba una condena de poco más de siete años de prisión impuesta por la Justicia rosarina, también por un asalto. De esa sanción, cumplió cuatro años y medio y quedó “debiendo” dos años y nueve meses, ya que se le otorgó la “libertad condicional”.
En tanto, por tratarse de un convicto reincidente, Joel Levi tendrá que completar los dos años y 10 meses en prisión (hasta el 8 de diciembre de 2019), aunque puede ocurrir que se le concedan el beneficio de la “libertad asistida” y salga seis meses antes.
