Juicio abreviado – Tres años de prisión de cumplimiento efectivo. Se trata de Micaela Díaz, quien fue detenida en septiembre de 2016 y desde noviembre del mismo año está con prisión domiciliaria en Villa Nueva, en la casa de sus suegros. Fue interceptada dos veces, cuando le llevaba marihuana y cocaína a su esposo

Una joven madre, que además está embarazada de ocho meses, fue condenada ayer en la Cámara del Crimen de Villa María luego que admitiera haber querido ingresar marihuana y cocaína a la cárcel de barrio Belgrano para entregársela a su marido, un presidiario reincidente que es adicto a las drogas.

Al cabo de un juicio abreviado, Micaela Beatriz Díaz (21), alias “Flaca”, fue declarada autora penalmente responsable del delito de “suministro de estupefacientes a título gratuito, en grado de tentativa y reiterado (dos hechos), agravado por ser en un establecimiento carcelario”, y se le impuso una pena de tres años de prisión de cumplimiento efectivo.

Sin embargo, Díaz continuará con prisión domiciliaria, estado procesal en el que se encuentra desde noviembre de 2016, luego de una gestión realizada por su defensor, el abogado local Daniel Volpe.

A poco de comenzada la audiencia, la joven confesó los hechos que la privaron de la libertad a mediados de septiembre de aquel año.

El primero de los ilícitos lo cometió el 27 de diciembre de 2015, alrededor de las 9.15, cuando quiso ingresar 60,8 gramos de marihuana compactada que ocultaba en la media del pie derecho. Fue detenida, pero como no tenía antecedentes, la excarcelaron pocos días después.

En tanto, el 18 septiembre de 2016, a las 9.45, fue interceptada por personal femenino del Servicio Penitenciario cuando llevaba en el corpiño 56,1 gramos de marihuana y 77,7 gramos de cocaína. Volvieron a detenerla y ya no recuperó la libertad, aunque un par de meses más tarde le otorgaron la prisión domiciliaria.

Como la de ayer es su primera sanción penal, Díaz podría obtener la “libertad condicional” dentro de los próximos 30 días, en vísperas de dar a luz a su segundo hijo.

Convicto reincidente

Micaela, quien se casó con Miguel Armando Castellano, se encuentra viviendo en cortada Corrientes 35 de Villa Nueva, en la casa de sus suegros.

La joven contrajo enlace con Castellano cuando él se encontraba cumpliendo una condena en el Establecimiento Penitenciario Nº 5. El convicto obtuvo la libertad, pero volvió a ser detenido hace un mes, ahora acusado de cometer un robo.

Finalmente, cabe señalar que la audiencia fue presidida por el juez René Gandarillas y contó con la participación del fiscal Francisco Márquez, del mencionado abogado local y de la secretaria Gabriela Sanz.