La Defensa podrá oponerse a la medida en el Juzgado de Control
Se trata del contador público Gustavo Maroni y de su hermano Javier, abogado del foro local, quienes están imputados de “amenazas reiteradas” y “hurto simple” en perjuicio del comerciante villamariense Iván Falvo
La fiscal de Instrucción del Primer Turno, Silvia Maldonado, confirmó la elevación a juicio de la causa penal que se les sigue a dos conocidos profesionales de Villa María, acusados de haber amenazado a un comerciante local, a quien incluso le sustrajeron una cámara fotográfica digital.
El caso involucra al contador público Gustavo Maroni (41) y a su hermano, el abogado Javier Maroni (33), quienes están imputados como presuntos coautores de los delitos de “amenazas reiteradas” (tres hechos) y “hurto simple” en perjuicio del técnico electrónico Iván Oscar Falvo (50).
En su decreto, Maldonado mantuvo el criterio que había expuesto en el requerimiento de citación a juicio dictado el 14 de diciembre de 2017, por lo que dispuso remitir el expediente al Juzgado de Control.
Ocurre que el 29 de diciembre pasado, la Defensa de los Maroni, ejercida por el abogado Víctor Daghero, se opuso a la medida adoptada por la funcionaria judicial y pidió que sus clientes fueran sobreseídos luego de sostener que la resolución era “inmotivada” y que la prueba colectada había sido “parcial e incorrectamente valorada”.
Ahora, en su nuevo dictamen, la fiscal no solo rechazó el pedido de sobreseimiento, sino que tampoco hizo lugar a un planteo de nulidad ni a un reclamo de cambio de calificación legal también solicitados por Daghero en aquella oposición.
Al Juzgado de Control
Ahora, el defensor de los Maroni podrá oponerse a todo lo dispuesto por ante la jueza de Control de los Tribunales villamarienses, Edith Lezama de Pereyra, para que resuelva el diferendo.
Como se trata de una causa en la que no hay detenidos (los ilícitos que se les atribuyen a los hermanos son excarcelables y, además, ambos carecen de antecedentes), el fallo de la magistrada podría demorarse entre 30 y 45 días, por lo que habría una definición entre fines de abril y mediados de mayo.
La causa se inició el 16 de septiembre de 2016, cuando Falvo, quien se dedica a la instalación de alarmas y cámaras de seguridad, denunció a los Maroni por una serie de hechos ocurridos el día anterior en su negocio.
Con el patrocinio del abogado Luis Caronni, el comerciante relató que los hechos se produjeron el día anterior cuando Gustavo Maroni le envió un mensaje de texto en el que le decía “sos un deshonesto de mierda, ya te la vas a ver conmigo, caradura”.
La intimidación había tenido como prólogo una conversación telefónica entre ambos, en la cual -según Falvo- el contador le pidió que programara el monitoreo de una alarma que le había instalado en su campo, a lo que el comerciante le respondió: “Ponete al día con la deuda y no tengo problema en hacerte el trabajo”.
En mayo de 2015, el comerciante colocó una alarma perimetral en un predio rural que los hermanos poseen sobre la prolongación de la calle Buenos Aires, pasando la autopista.
“Al principio no hubo problemas y pagaron el monitoreo, pero después dejaron de abonar y en noviembre decidí cortarles el servicio”, explicó el denunciante cuando hizo público el hecho ante EL DIARIO.
Entre noviembre de 2015 y el 15 de septiembre de 2016, Falvo y los hermanos no volvieron a verse. Pero ese día, a las 9.30 de la mañana, el contador lo llamó para que le programara la alarma, y cuando Falvo le dijo que primero le pagara lo que le estaba debiendo, Gustavo Maroni le reclamó: “No, Iván, haceme el trabajo y te pago todo junto”.
“Prefiero perder 6.000 pesos y no 6.500”, le contestó irónicamente. Hubo un intercambio de palabras (“te voy a recagar a trompadas, ya vas a ver quién soy yo”, le habría dicho Maroni) y el instalador cortó la comunicación.
El contador volvió a llamarlo, pero como Falvo no lo atendió, le envió el mensaje de texto descripto al comienzo (“sos un deshonesto de mierda…”).
Se llevaron la cámara
Sin embargo, el incidente no quedó allí: “Ese mismo día, a eso de la 1 de la tarde, los dos fueron a mi casa (Mitre 874, donde también funciona su negocio) y me reclamaron lo mismo. La conversación fue subiendo de tono hasta que Gustavo me dijo… ‘sos un cagador, ya te voy a encontrar en la calle’; ahí nomás se acercó hasta el escritorio, agarró una cámara fotográfica digital Canon de mi propiedad y se la llevó”.
Caso Milla Tejada: López sigue detenido en la Alcaidía
Julián López (45), el hombre que está detenido por la muerte de la adolescente Milla Tejada (17) a raíz de un choque ocurrido el pasado martes en la esquina de bulevar Cárcano y Buenos Aires, permanece alojado en la Alcaidía policial de barrio San Justo, designó como defensora a la asesora letrada Silvina Muñoz y será indagado el martes o el miércoles por el fiscal René Bosio. Por el momento, López está imputado como presunto autor de “homicidio culposo”, aunque su situación procesal podría agravarse ya que, tras la violenta colisión (registrada poco después de las 9 de la noche), se dio a la fuga sin asistir a la motociclista, escondió el vehículo (un Toyota Etios de la empresa Alem Motors) y se presentó en la Comisaría de Distrito a las 3 de la madrugada.