Dos floristas alemanes abrieron el lunes el primer museo de dachshund del mundo. Ninguna otra raza es tan reconocida, sostienen
Su imagen alargada hasta sirvió como mascota de unos Juegos Olímpicos (“Waldi” para Múnich 1972) y ha llamado la atención de personajes históricos como Pablo Picasso y Albert Einstein.
Su nombre oficial en alemán: dachshund o teckel. Para todo el mundo, no obstante, no es más ni menos que el perro salchicha.
Y tal vez por la mezcla entre su popularidad en todo el planeta y la profunda relación con la historia de Alemania, esta semana se abrió en la ciudad de Passau, 650 kilómetros al sur de Berlín, el primer museo dedicado exclusivamente a este divertido animal.
Más de 4.500 objetos, entre juguetes y elementos decorativos relacionados con la llamativa figura del perro, son parte de la muestra.
El dackelmuseum, como ha sido bautizado, fue creado por dos floristas, Seppi Küblbeck y Oliver Storz, que pusieron a la vista del público la colección que habían amasado sobre su perro favorito en los últimos 25 años.
El establecimiento abrió sus puertas el lunes en una casa cerca del centro de Passau. El curador del museo dijo que es la colección más grande en el mundo de objetos dedicados a esta raza canina.
“El mundo necesita un museo del perro salchicha. Ninguna otra raza en el mundo es tan reconocida, además de que es el símbolo de Baviera”, le dijo Küblbeck a la BBC.
Estampillas sobre el perro, pinturas y adornos de porcelana están entre los elementos de la exhibición.
Los alemanes crearon la raza de los perritos salchicha en la Edad Media para asustar a los zorros y tejones y evitar de ese modo que se comieran los patos y las gallinas que tenían en sus granjas.
En Argentina, el salchicha también tiene su distinción popular con el encuentro de esa raza que ya se realizó dos veces en nuestra provincia, con singular éxito.