La nueva sala contó con la presencia del artista internacional que fue reconocido en escena por el intendente y el vicegobernador
La jornada inaugural de Mundo Rojo Multiespacio contó con una serie de condimentos necesarios para una digna noche de apertura.
En principio, la flamante sala ubicada en avenida Presidente Perón 1576 abrió su programación con un artista internacional en plena gira por Argentina y con nuevo disco bajo el brazo (“Dalma”).
En segundo término, las amplias instalaciones -con capacidad máxima para 1.100 personas sentadas, con un escenario de 14 metros de largo por 8 metros de profundidad y una ambientación adecuada- estuvieron a la altura de las circunstancias a pesar de que se ajustaron detalles hasta último momento.
Por si faltara poco, la velada contó con la presencia del intendente Martín Gill acompañado por el vicegobernador Martín Llaryora, quienes le entregaron en escena una placa recordatoria por haber dado el puntapié inicial al espacio. Gill, astuto, aprovechó para deslizar que “se cumpla el pedido de las chicas”, de que el cantante español regrese al Festival de Peñas.
Minutos antes, Roberto “Tato” Bertorello, uno de los impulsores de la sala junto a Alexis Alassia, confesó ante el público que “el espacio se iba a llamar Mundo por vos y se iba a inaugurar mucho después, pero cuando nos enteramos de tu gira, aceleramos todo para que vos fueras quien lo inaugurara”.
El show
En rigor, el show sobrevoló por diferentes etapas. Sergio Dalma arrancó, junto a su banda de guitarristas, bajista, tecladista, baterista y la coreuta y multinstrumentista Alicia Araque, con temas como “Eres”, “Imaginando”, “Nada igual a ti” y “Se empieza nuevamente” del último álbum, siguió con “El jardín prohibido” y la coreada “El mundo” para adentrarse en “las canciones italianas de las que tanto se enamoraron mis padres”, como “Te amo”, “El italiano” y “Gloria”, que provocó el primer estallido de la platea compuesta obviamente por mujeres.
Tras un intervalo y un cambio de vestuario (del traje formal a un look más canchero), usó una rocola de utilería para “recuperar temas, pero de un modo más intimista”.
Sonaron, entre otros, “Esta chica es mía” (su primer hit de 1989),“Si te vas”, “La historia entre tus dedos” y “Sólo para ti”, cantada bien al filo del escenario, para el deleite de las fans que trataban de abrazarlo, besarlo, apretujarlo y ofrendarle regalos varios. Ya en el tramo final se desató la euforia con “Yo no te pido la luna” y en los bises la infaltable “Bailar pegados”, la nueva “La buena suerte” y “Galilea”.
En varios pasajes de la noche, Dalma agradeció el cariño local: “Nos han hecho sentir como en casa”. Las seguidoras, posiblemente, querrán que el español vuelva a “esta morada” en tiempos festivaleros.
Juan Ramón Seia
