Rojas, incidentes y reparto de puntos. Unión Social y Rivadavia igualaron 1 a 1 en Alto Alegre en un partido de altas tensiones y cuatro expulsados, todos en el primer tiempo, inclusive el DT del Verde, Marcelo Santoni
Escribe Juan Pablo Morre
En un trámite marcado por los hechos acaecidos en el amanecer del juego, Unión Social y Rivadavia empataron 1 a 1 en una reparto de puntos que, por el desarrollo general del partido y porque el gol del Verde llegó en el cierre del juego, cayó mejor en el ánimo de los cabralenses, por más que desaprovecho una nueva oportunidad de alcanzar la cima de la Zona Sur.
En el duelo Interzonal envuelto en un ambiente caliente, por lo que sucedió a los 10 minutos, el anfitrión abrió el marcador estando en superioridad numérica, pero después no supo usufructuar las señales positivas que le brindó el partido para finiquitar la victoria. Ante esto, se evidenció el descontento por el resultado final, que le impidió retornar al segundo puesto de la Zona Norte, además de descontarle unidades a su rival de turno, en un posible tercera plaza.
Dentro de un trámite que recién empezaba a armarse, en una jugada en campo rival Nicolás Gayoso dejó sus dos pies sobre la humanidad del defensor Jonathan Clemente, en una acción de expulsión que originó un agrupamiento de jugadores que, si bien parecía no pasar a mayores, se descontroló por la aparición de Marcelo Santoni. El DT del Verde, posiblemente por ver a su hijo Franco en el suelo (ante una aparente agresión de un rival), cruzó toda la cancha y cuando llegó al lugar en que se desarrollaba la incidencia, le propinó un golpe de puño a un jugador rival, lo que magnificó el tumulto.
Por suerte, ante la rápida intervención policial y la correcta predisposición de la mayoría de los futbolistas y auxiliares, se apaciguaron los ánimos dentro del campo de juego y aunque casi se extendió a las tribunas, todo quedó finalmente en cruces verbales.
Después de un breve parate y ya con el técnico visitante en las tribunas, el referí expulsó a Gayoso en primer momento y, posteriormente, a Franco Santoni y Sebastián Godoy.
A jugar
Así las cosas, el local con diez y la visita con nueve, la reanudación del trámite mostró a Unión Social más incisivo, imponiendo la diferencia numérica por el muy buen trabajo que realizaron el trío Casale, Verón y Heredia, en esa primera media hora del partido.
Por lo tanto, después que Manuel Cuello avisará con un tiro de larga distancia apenas elevado, los dirigidos por Marcelo Zabala abrieron el marcador. A los 25’, después de una falta sobre el incisivo Casale, el local jugó rápido, habilitó a Heredia, quien cedió a Verón y éste, tras hacerse el lugar frente a una defensa que no le achicó los espacios, sacó un disparo y la pelota, tras un desvió en un defensor Verde que descolocó a Berardo, ingresó al fondo de la red: 1 a 0.
Sin embargo, en una acción clave para el desarrollo posterior del juego, Joel Zabala agredió infantilmente a Andrés Vincenti a los 30 minutos y el referí Ibáñez le mostró correctamente la roja.
A partir de allí, y otra vez en igualdad numérica, la visita levantó, vio que podía y fue insistentemente sobre el arco rival; para ello, estuvo bien apuntalado por Brian Guerrero desde la zona media (le ganó la pulseada a Federico Godoy, quien con los volantes externos muy abiertos, se quedó sin apoyo en ese sector), el empuje de Gudiño, Rojas y Vincenti, y el desequilibrio de Javier Demarchi y Richard Echegaray.
De igual modo, careció de la precisión que le generará profundidad, por lo que se repitió en aproximaciones, sin generar una chance nítida de gol sobre el arco defendido por Emanuel Giordano.
El Mono Zabala, en el entretiempo, corrigió ciertas falencias de su equipo, para recuperar o, al menos, dividir la posesión de la pelota; por lo que, en el complemento, su equipo cerró mejor los costados y controló la búsqueda del rival, sumado a que Heredia hizo un mejor papel “aguantando” el esférico y se asoció con mayor continuidad con Verón, por el sector derecho.
Ante esto, y el desgaste físico considerable de los que quedaron en cancha, Unión Social tenía controlado el triunfo parcial, pero se quedó en la mínima ventaja, desaprovechó algunas réplicas muy claras y ello le costó en demasía.
Es que el Verde tuvo un premio a la insistencia. Ya en la parte final, sobre los 41’, Gudiño, con voz de mando y aliento constante desde el fondo, agarró la lanza y, tras una hermosa pared (esa acción siempre vital y determinante en el fútbol) con Echegaray en el borde del área grande rival, desarmó toda la estructura defensiva rival y el defensor, tras quedar mano a mano con Giordano, definió rasante: 1 a 1 y final.
La figura: Pablo Gudiño
Realizó un descomunal esfuerzo físico (en todas las acciones del segundo tiempo fue de área a área, defendiendo y acompañando los ataques) y realizó un par de gritos para que su equipo no claudicará. Semejante esfuerzo, fue premiado con el gol del empate. En el local, Brian Verón tuvo un papel constante y desequilibrante, además del gol. Buen primer período de Casale.
El árbitro: Matías Ibáñez
Muy buen arbitraje del joven referí cordobés; aplomo e inteligencia para sobrellevar el conflicto inicial que tuvo el trámite y después plena seguridad en su fallos en el resto del partido; nada que objetar en las expulsiones.