Hay 1.002 inscriptos en el programa municipal de terminalidad educativa para adultos
Sirve tanto para culminar el Nivel Primario como el Nivel Medio. Fuerte presencia de mujeres. Los Olmos es el barrio con la mayor cantidad de estudiantes
En el inicio del segundo año en que está en marcha (el tercero si se tiene en cuenta que en 2016 se realizó una experiencia piloto) el programa de terminalidad educativa del municipio tiene 1.002 personas inscriptas, lo que representa un notable crecimiento de la matrícula.
Es que en la prueba piloto se habían anotado 110 ciudadanos para cursar el Nivel Medio y 20 para el Nivel Primario; el año pasado la cifra saltó a 300 habitantes y ya este año se disparó a un total de 1.002 inscriptos.
Los números fueron brindados por la directora de Educación para Adultos del Gobierno local, Marieta Lorenzatti, en un encuentro con los medios que encabezó junto al intendente Martín Gill y la secretaria de Educación Margarita Schweizer.
Y detrás de esos números hay un montón de historias de vida, sobre todo de mujeres (ver recuadro), que de esta forma pueden culminar los estudios que por una diversidad de causas y situaciones en su momento no pudieron completar.
Lo que reflejan las estadísticas
Los funcionarios destacaron el crecimiento de esta iniciativa oficial dirigida a adultos que abandonaron en su momento la escuela o directamente no iniciaron el cursado.
“Se busca casa por casa, incorporando la propuesta en los centros vecinales, sindicatos, clubes, centros de salud”, remarcó el intendente, quien comentó que el año pasado se invirtieron 3,5 millones de pesos en este plan, en el que el municipio tiene dos aliados: el Estado provincial para lo que es la primaria, y la Universidad Tecnológica Nacional.
Lorenzatti dio un dato que refleja el índice de permanencia dentro del programa. Cuando especificó la cantidad de inscriptos, dijo que en 2017 (año con 300 anotados) hubo 139 estudiantes que rindieron el primer parcial, 139 que rindieron el segundo parcial y ahora 139 están cursando el segundo año.
Algo que también se conoció en la conferencia -efectuada en el Salón Oval, ubicado en el primer piso del Palacio Municipal- es que en base al último censo nacional y a una proyección de la población, se presume que los 1.002 alumnos inscriptos representan el 1,15% de la población total de Villa María.
Cuando se les consultó a los funcionarios si tienen alguna estimación del porcentaje que significa la incorporación de todas estas personas al programa en relación a la cantidad total de habitantes de la localidad que no terminaron la primaria o la secundaria, dijeron que no tienen ese dato, pero que surgirá en el marco de los relevamientos que se están realizando con la puesta en marcha del centro estadístico municipal. Y Gill anticipó que es uno de los indicadores en los que hubo las mayores mejoras.
De todas maneras, ante otra pregunta periodística similar, el intendente reveló que “en algunos sectores costaba encontrar a alguien que haya terminado la secundaria”, lo que da cuenta de la situación de escolaridad general. No obstante, apuntó que la ciudad está mejor que la provincia y que el país en este punto.
Ya hay 14 egresados: La franja etaria de más estudiantes es la de 20 a 30
El rango de edad comprendido entre los 20 y 30 años compone la mayor concentración de estudiantes que buscan terminar la escuela. Luego le sigue la franja etaria que va de los 30 a los 40 años.
Por su parte, el barrio Los Olmos es el sector en el que concurren más alumnos del plan. En esa zona hay dos centros, uno que funciona en el MuniCerca 6 y el otro en la Biblioteca Eva Perón.
Siguiendo con los datos que se conocieron en la víspera, a los centros maternales acuden 149 niños, lo que da cuenta del impacto de la iniciativa, ya que a los mismos van los hijos de quienes cursan.
Los funcionarios del Ejecutivo apuntaron que allí se les da de comer a la noche, tienen apoyo escolar y hay 51 personas trabajando. Reciben desde bebés de 45 días hasta chicos de 12 años.
Respecto al género de quienes cursan, se destaca fuertemente el hecho de que el 76,1 % son mujeres.
El programa tiene hasta el momento 14 egresados.
“El primer graduado fue un empleado municipal, del lavadero, que tras esto se inscribió en el profesorado de Historia y continúa allí”, valoró Gill. “La propuesta está en la calle. Este año la gente viene a preguntar, ya viene sola a la Secretaría, sabe de la misma”, recalcó Lorenzatti.
Lo oficial se sumó a las opciones del CENMA y CENPA que tiene la provincia, y a los tres centros del PIT existentes -los que apuntan a quienes tienen sobreedad- dos de los cuales fueron abiertos en la gestión actual.