Está al borde de los 34 millones de pesos. Los ingresos superaron a los egresos a lo largo de gran parte del período y al concluir el semestre. Lo anunció ayer el Gobierno

De casi 34 millones fue el superávit del municipio de Villa María en el primer semestre del año, una cifra altísima y con la particularidad de que se da en un contexto de recesión económica y la inflación que golpea al país.

Los ingresos alcanzaron la cifra de $394.267.680,95; mientras que los egresos fueron de $360.502.007,59, por lo que de la diferencia surge el resultado positivo de $33.765.673,36.

Son datos oficiales, suministrados por el Gobierno de Martín Gill.

Según dicha información, los ingresos corrientes provenientes esencialmente de la recaudación propia y los ingresos por coparticipación impositiva fueron de 389,1 millones de pesos; en tanto, los egresos corrientes relacionados a la administración general y la prestación de los servicios por parte del municipio ascendieron a 294,6 millones de pesos. Esto generó un ahorro corriente de 94,5 millones de pesos.

Más de la mitad de ese ahorro (el 56%) se utilizó para la realización de obras públicas e infraestructura demandada así́ como la adquisición de bienes de capital, “tales como vehículos asignados a Seguridad Ciudadana, entre otros”. Por otra parte, un 14% se destinó a la amortización de la deuda.

Los ingresos durante la primera etapa de Gill fueron en ascenso.

Según la cartera que conduce la contadora Daniela Lucarelli, esto se debió a las medidas de política recaudatoria puestas en marcha, tales como el Régimen de Presentación Espontánea y Saneamiento de las Cuentas Tributarias, que ha concitado el interés de numerosos contribuyentes desde su primer día.

También citaron en ese aspecto las acciones conducentes a mejorar la base de datos, incluyendo la puesta en práctica del convenio de intercambio recíproco de información con el Gobierno provincial.

Los egresos totales en el período también exhiben una tendencia creciente, “pero siempre dentro de parámetros controlados”, aclaró el municipio. Junio fue el mes de mayor erogación. Lo vincularon esencialmente al crecimiento de la obra pública e infraestructura ejecutada en barrios de la ciudad. Del total de las erogaciones realizadas y devengadas en los seis meses se pagó un 93%, por lo que la administración alcanzó un muy elevado nivel de cumplimiento de las obligaciones contraídas con proveedores y prestadores de servicios”. “Manteniendo el criterio de autosustentabilidad y manejo responsable de los recursos públicos, durante todo el primer semestre del presente ejercicio puede apreciarse pleno apego al principio de equilibrio de las cuentas públicas”, sostuvo un informe oficial. En gráficos exhibidos se vio que la curva de ingresos se observa en la mayor parte del semestre por encima de la línea de egresos, sólo superponiéndose ambas al inicio del período y en el transcurso de abril y mayo.