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Dignos de Titanes en el ring

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Dignos de Titanes en el ring
Por abajo o por arriba, como en la foto, cada pelota tuvo una férrea disputa. Así, el juego se desarrolló lejos de los arcos y el cero en el marcador fue fiel reflejo de lo sucedido

LVF – Clausura – 8va. fecha – Zona A

Atlético Ticino y Deportivo Argentino igualaron sin goles, en un encuentro en el que reinaron las peleas y las tarjetas rojas. Los dos terminaron con nueve hombres y un suplente del Lobo también fue expulsado

 

Escribe: Federico Gazzoli

Pasó de todo en Ticino, menos aquello que se esperaba de dos equipos que son protagonistas en los puestos de vanguardia de la Zona A. Lejos del buen juego que sus dos entrenadores pregonan, Atlético Ticino y Deportivo Argentino protagonizaron un 0 a 0 que, más allá de lo mal jugado que fue, tuvo un desarrollo muy friccionado y cortado, en el que los dos terminaron jugando con nueve hombres y que también tuvo a un futbolista del banco de suplentes visitante expulsado.

Solo en el primer cuarto de hora el encuentro fue abierto y con ambos conjuntos demostrando intenciones de abrir el marcador. Al minuto de juego, Ayrton Páez estrelló un tiro libre en el travesaño, un par de minutos después Maximiliano Páez respondió con un remate alto y a los 16’ Carlos Ronco desvió hacia el córner otro tiro libre ejecutado por Ayrton Páez.

Luego el encuentro pasó a ser una reiteración permanente de infracciones, algunas de ellas muy duras, ante las que al árbitro del cotejo, Iván Reyna, le faltó carácter para penar con tarjetas rojas, como, por ejemplo, un pisotón de Matías Rojas sobre Ayrton Páez y un duro cruce de Adrián Peralta sobre Maxi Páez para interrumpir una contra del Lobo.

Pasada la media hora, tras la primera sesión de excesiva disputa y poco juego, volvió a tomar la iniciativa del dueño de casa; Delmo Becchero habilitó a Elías Acosta y éste, entrando al área por la derecha, definió de zurda una pelota que Ronco tapó contra su palo izquierdo.

Poco después, un pelotazo partió desde el fondo local, Ayrton Páez apareció libre por la derecha, en la puerta del área superó la marca de Diego Carrera y cambió al segundo palo, donde, increíblemente en soledad, Emanuel Coria le erró a la pelota en su afán de empujarla para mandarla al fondo de la red y dejó pasar una gran oportunidad de abrir el tanteador.

Poco antes del final de la etapa inicial, Agustín Moreno ejecutó desde la izquierda un tiro libre en forma de centro, por el segundo palo Gastón Molina se libró de marcas, remató de zurda y Lautaro Monje despejó el esférico sobre la línea.

Se iban los primeros 45’ y otra vez el juego se vio interrumpido por situaciones que poco tienen que ver con el fútbol. Matías Bendazzi se enojó feo con Moreno por entender que tuvo mala intención en una pelota dividida que ambos disputaron, Gonzalo Cortez (suplente del Lobo) saltó del banco visitante para increpar al delantero, el referí observó la situación y expulsó al hombre de Argentino, que al recibir la sanción volvió al campo de juego y le arrojó un cabezazo en la cara a Bendazzi. Tuvo que intervenir la fuerza policial para disipar una acalorada discusión en la que intervinieron varios protagonistas, pero el fuego quedó encendido y la temperatura se siguió elevando, para llegar a su punto de hervor en la parte complementaria.

Iban 10’ del segundo tiempo cuando Ayrton Páez intentó crear una contra, Rojas lo frenó con falta y el juez le mostró la segunda amarilla, con lo que el elenco villamariense se quedó con uno menos.

Más allá de la inferioridad numérica, con los movimientos de piezas que dispuso su DT, Mauricio Morales, Argentino se acomodó bien en la cancha y hasta pareció hacerse más fuerte.

En ese contexto, Carrera ganó por la izquierda y mandó centro al área, por el otro costado recibió Mauro Fuente, se acomodó y remató de derecha una pelota que Fabián Montiel, muy rápido para salir a “atorar” al atacante, tapó con sus piernas.

Sobre la media hora, en lo último que los dos generaron en un contexto de juego que se tornó cada vez más “áspero”, por el local Gonzalo Bertola remató elevado un tiro libre en cercanías del área y del lado visitante Fuente metió una mediavuelta que pasó cerca del poste derecho.

 

La barbarie

Desde allí hasta el final la temperatura se fue acercando al punto de ebullición y antes del cierre, en un claro reflejo del grado de violencia con el que se disputó el cotejo, se produjeron otras tres expulsiones.

Maximiliano Páez y Lautaro Monje disputaron cuerpo a cuerpo una pelota, cerca de uno de los banderines del córner el delantero visitante cayó y el defensor local le arrojó un pelotazo, lo que significó expulsión para el hombre ticinense.

Lejos de quedar allí la situación, se generó un tumulto generalizado dentro del campo de juego, entre medio de insultos, reclamos y agresiones, tras el que también vieron la roja José Demichelis en el local y Maxi Páez en la visita.

Parecía que eso era todo, pero otra vez las suposiciones fallaron. Cerca del túnel que inicia el camino a los vestuarios, Maxi Páez quiso hacer las pases con Monje y el de Ticino amagó con aceptar las disculpas, pero cuando quedaron cara a cara, con Páez extendiendo la mano para saludar al defensor, el ticinense le arrojó un descomunal puñetazo que afortunadamente no llegó a impactarlo de lleno.

Allí el clima volvió a caldearse y hasta se produjeron enfrentamientos verbales muy subidos de temperatura entre ambas parcialidades. Parecía que en cualquier momento se desataba una batalla campal, pero lentamente la calma fue retornando al estadio y, tras pedir que sean garantizadas las condiciones de seguridad, Iván Reyna reanudó la acción.

Luego de diez minutos de adición, el referí pitó el final y el rotundo cero terminó de concretarse. Así, luego de un partido que fue más hablado y peleado que jugado, Atlético Ticino y Deportivo Argentino protagonizaron un aburrido empate y desilusionaron a todos aquellos que fueron a la cancha para cumplir con la premisa de ver buen fútbol.

En ese contexto, el más favorecido fue el Lobo, porque en el contexto de la inferioridad numérica en el que jugó gran parte del segundo tiempo, mantuvo su invicto y conservó la punta de la Zona A.

 

El árbitro: Iván Reyna: mal desempeño. En el primer tiempo interrumpió excesivamente el juego y cobró mucho “a pedido”. Además, le tembló el pulso para expulsar a jugadores que cometieron infracciones muy violentas. En el complemento, mantuvo su actitud permisiva y así permitió que el partido fuera tomando temperatura, para finalizar en la acción en la que tres jugadores vieron la roja antes del final. Entre sus tantos errores, acertó en la expulsión con doble amarilla a Matías Rojas. Poco colaboraron sus asistentes para facilitarle la tarea.

 

La figura: Matías Bettiol: en un partido muy cerrado, el defensor ticinense se destacó por la seguridad que le aportó al fondo local. Muy atento y veloz a la hora de cerrar en distintas jugadas, saliendo por abajo con criterio cuando pudo hacerlo y ganando bien por arriba cuando fue exigido.