Las profesoras Paula Gentile y Adriana Moya reflexionaron sobre la importancia de una disciplina fundamental en el desarrollo de un país
Una alumna posa contra un mural de la Emiliano Gómez Clara para las tomas de un trabajo práctico. Se parece a una heroína de un disco de David Bowie.
Minutos antes, en una suerte de backstage dentro el aula, sus compañeras la peinaron, vistieron y maquillaron. Todo este despliegue es parte del taller de Fotografía orientado a las estudiantes de “Diseño e Indumentaria”, actividad con la que culminaron las Jornadas de Diseño 2016 en la Escuela de Bellas Artes Emiliano Gómez Clara.
“Es el cuarto año consecutivo que estamos desarrollando estas jornadas -comenta la profesora y arquitecta Adriana Moya-, sólo que este año debido a la cantidad de alumnos la hemos dividido en dos partes. La primera fue el 14 y 15 de junio con un taller de encuadernación a cargo de Cristina López. La segunda fue martes y miércoles con un taller de fotografía de moda, por Esteban Camandone. Tomamos dos profesionales locales y las actividades estuvieron dirigidas a las carreras de Diseño en Indumentaria y Diseño Gráfico”.
-¿Cómo definirían la finalidad de estos cursos?
Adriana: -El de fotografía de moda es muy importante para que las futuras diseñadoras sepan comunicarle al fotógrafo el mensaje que quieren transmitir. Con el de encuadernación queríamos que los estudiantes pudieran participar de la instancia material del diseño editorial, llevando al papel lo que bocetan en la computadora.
Paula: -Para reforzar eso que dice Adriana, todos los años hacemos una visita a EL DIARIO, ya que la idea es estar en la “cocina” de los productos, ver cómo se compagina un periódico y cómo funcionan las máquinas. Esa experiencia te mejora la visión a la hora de diseñar en la computadora.
-¿Cuál es el objetivo de estas jornadas?
Adriana: -Básicamente, ampliar la currícula en las carreras de Diseño, aunque este año también participó gente de Arte. Como desde la adacemia no podemos abarcar todos los temas, estos talleres intensivos cumplen esa finalidad.
“Una muy buena salida laboral”
-¿Hay demanda de diseñadores en Villa María?
Paula: -Como está la situación económica actual, no hay lo que se dice una “sobredemanda”, aunque sí hay trabajo. Eso se debe a que el diseño entra en el proceso productivo de lo que te puedas imaginar. Hoy el diseño atraviesa todas las áreas creativas y de desarrollo en una sociedad y un diseñador puede integrar cualquier equipo de trabajo. Si bien en la escuela hay una orientación hacia la industria gráfica, esto no descarta que los estudiantes luego se puedan especializar en diseño web, por ejemplo.
Adriana: -La gran mayoría de los estudiantes que tenemos en las carreras de Diseño son de la zona; desde Oliva y Santa Fe hasta Marcos Juárez, Pozo del Molle y Las Varillas. Y muchos quieren emprender su propia agencia en sus lugares de origen. Es una muy buena salida laboral también.
-¿Qué balance hacen de estas cuartas jornadas?
Adriana: -Han tenido muy buena aceptación, a tal punto que el cupo para los talleres se agotó el primer día. Suele ser un cupo para 20 ó 30 personas y hemos tenido que dividirlo en dos etapas.
Paula: -Además de estas jornadas, desde Bellas Artes estamos generando actividades todo el tiempo y para gente de todas las edades y niveles. En septiembre habrá unas charlas técnicas con profesionales locales para Diseño Interior y Diseño Comercial. Les pedimos que nos sigan por internet (www.facebook.com/ Bellas Artesvm), que se contacten al 0353-4533695 y que se inscriban en ofertas venideras.
La foto final capta a las profesoras Adriana y Paula junto al fotógrafo Esteban y las chicas del taller; casi una portada del “Ziggy Stardust” de Bowie made in Villa María.
Iván Wielikosielek
Especial