Se trata de Rolando “Ojudo” Barrera, quien admitió haber sustraído mercadería y herramientas de un negocio de bulevar Alvear al 300 y comprado muebles adquiridos por otros sujetos con cheques robados. Podría obtener la libertad en pocos días

Un comerciante villamariense fue condenado ayer a dos años de prisión de cumplimiento efectivo luego de confesar que cometió un robo en una carnicería de la ciudad y recibió varios muebles que habían sido comprados con un cheque que tenía pedido de secuestro.

La pena recayó en Rolando Gabriel Barrera (43), alias “Ojudo”, quien fue declarado autor responsable de “robo simple” y “encubrimiento” al cabo de un juicio oral y público de trámite abreviado.

Sin embargo, como ya pasó poco más de un año entre rejas, quedó a un paso de obtener la “libertad condicional”, trámite procesal que posiblemente se concrete a mediados de la semana venidera, una vez que el Juzgado de Ejecución Penal analice el pedido formulado en la víspera por la defensa del condenado.

Barrera, nacido el 25 de julio de 1974 y domiciliado en Tucumán y Gorriti, no sólo se declaró culpable de los delitos que se le atribuían sino que además pidió disculpas por el daño económico causado, sobre todo al propietario de la carnicería donde perpetró el robo a mediados de agosto de 2014.

Aquel hecho, por el que estuvo detenido alrededor de 45 días, se produjo en el local comercial denominado Carnes Santa Rita, ubicado en bulevar Marcelo T. de Alvear 332, de donde sustrajo una media res y herramientas propias de la actividad, como una picadora de carne y algunos cuchillos.

Buena parte de ese “botín” fue vendido por Barrera a un exbufetero del Club Alumni, circunstancia que no sólo posibilitó a la Policía recuperar las herramientas en cuestión sino también identificar al sospechoso y detenerlo, aunque obtuvo la libertad un mes y medio más tarde.

Otro procesamiento

La causa por el robo en la carnicería quedó pendiente y se anexó a un nuevo procesamiento contra Barrera, cuando efectivos policiales volvieron a arrestarlo, a fines de octubre de 2016, luego de secuestrar en su domicilio varios muebles que habían sido adquiridos por terceras personas con cheques malhabidos.

En efecto, en la vivienda de barrio San Martín los investigadores encontraron un juego de comedor, dos camas y un sommier que habían sido adquiridos unos días antes en la mueblería La Gioconda de calle Buenos Aires por dos sujetos que dijeron llamarse Ricardo Maldonado y Marcelo Diez.

De acuerdo con la acusación, los clientes pagaron los muebles con sendos cheques que habían sido denunciados como robados en la ciudad de Oliva.

Cuando los propietarios del comercio céntrico se percataron de la maniobra delictiva, radicaron la denuncia y la investigación policial permitió establecer que Barrera habría adquirido los muebles a Maldonado y Diez. Sin embargo, a no poder probar dicha compra, fue acusado como supuesto autor del delito de “encubrimiento”. Y como tenía abierto aquel proceso por el robo en Carnes Santa Rita, la Justicia ordenó su detención.

Al momento de ser detenido, Barrera de dedicaba a la compra y venta de vehículos usados (autos y motos). Además, es padre de 10 hijos, aunque con cuatro mujeres diferentes.

Juez y partes

Finalmente, cabe señalar que la audiencia de la víspera fue presidida por el camarista Félix Martínez y contó con la participación del fiscal Francisco Márquez, del abogado defensor Eduardo Rodríguez y del secretario Guillermo Picco.

Tiene un antecedente por una causa ocurrida en 2008

Rolando Barrera registra una condena de dos años de prisión de ejecución condicional, dictada por la Cámara del Crimen local en febrero de 2009, luego de declararlo coautor responsable de “portación ilegítima de arma de fuego de uso civil”, “abuso de arma de fuego” y “resistencia a la autoridad”, por un hecho ocurrido en octubre de 2008. Sin embargo, como aquella sanción fue en suspenso, desde el punto de vista procesal aún conserva la posibilidad de obtener la “libertad condicional”. Por esa razón, es muy probable que la Justicia disponga su excarcelación en breve.