Una familia tipo de cuatro personas debe gastar al menos 2.790 pesos en una noche, quizá la más importante para algunos estudiantes. Un panorama general sobre el precio de las tarjetas de las fiestas, los viajes de estudios y cuánto cuesta vestirse de gala

La foto en Bariloche con el perro San Bernardo, con una mejor amiga en la aerosilla, la primera vez de vestir un traje, las caras pintadas con los colores del colegio el último día de clases… Todos, momentos que seguramente terminarán grabados en la memoria de los egresados que cada año vivencian estas experiencias.

Pero la realidad indica que para que esto suceda se deben generar ciertos gastos que cada año, además de aumentar, se hacen más difíciles de solventar.

Similar a lo que ocurre con las fiestas de 15 de las adolescentes, son pasajes espontáneos en la vida de los jóvenes pero que cargan fuertes expectativas para la mayoría, ya que es el cierre de una etapa escolar luego de varios años de estudio y se presenta la posibilidad de viajar junto a las personas con las que se atravesó esa parte de la vida.

Con el agregado de que todo transcurre en el, al mismo tiempo ansiado e intenso, mes de diciembre. Donde los hábitos culturales indican que hay que reservar dinero también para las fiestas de fin de año, los regalos de Navidad, las vacaciones; lo cierto es que administrar el dinero se vuelve todo un desafío.

Como así también lo es evitar la angustia o la decepción de quienes no pueden acceder a vivir estas experiencias que, si bien ya son tradicionales, no tienen mucho que ver con lo académico específicamente.

Tanto la fiesta final como el viaje de estudios son organizados por comisiones de padres, mientras que cada institución propone el acto de cierre con entrega de certificados y, en algunos casos, se ofrece una misa para los estudiantes que finalizan el último ciclo lectivo dentro de la escuela media.

Mañana comienza diciembre y en las primeras semanas de este mes, egresados de distintas instituciones tendrán su cena de fin de ciclo, como así también emprenderán su viaje de estudios en algunos casos, ya que en otros han decidido no hacerlo.

En líneas generales, el costo de las tarjetas para las cenas van de $400 a $500 y los viajes a Bariloche entre $15.200 y $18.000, según cada institución.

Pero los gastos no se agotan en una noche, en el caso del festejo, ni en 10 días de estadía en la ciudad del sur, sino que durante el año y en la previa a estos acontecimientos se generan costos secundarios que significan salidas de dinero de un bolsillo que resiste en, quizás, el más complicado de los meses del año.

Vestidos y trajes, para los jóvenes y para la familia, alquiler de salones, algún cotillón para encender un momento de la noche, el dinero que se llevarán al viaje, las despedidas, etcétera.

EL DIARIO consultó en algunas instituciones de la ciudad y comercios para conocer, aproximadamente, cuánto cuesta afrontar esta época del año.

Fiestas y viajes

Según pudo conocer este medio, la tarjeta más accesible de una fiesta de egresados es la que proponen los alumnos del colegio Trinitarios, a través de la comisión de padres. El valor es de $400 y será el próximo 9 de diciembre en el playón de la Escuela Superior Integral de Lechería (ESIL), donde se montará una carpa para más de 800 personas.

Para lograr ese número, los estudiantes orgnizaron tres eventos a lo largo del año, donde ofrecían pollos y empanadas para recaudar fondos y poder mantener el precio del pase relativamente accesible .

Asimismo, existe la posibilidad de asisitir sólo al brindis, después de la cena, abonando $200, el mismo monto que, además, los jóvenes de la promoción 2016 debían aportar por mes para un fondo común.

Del total de 220 egresados, unos 20 decidieron evitar el viaje, por distintos motivos. El paquete turístico que eligieron costó $16.800, que se pagaron en 11 cuotas de $1.500, según pudo averiguar un cronista de EL DIARIO.

La noche del 7 del mismo mes será la oportunidad para que los estudiantes del Instituto del Rosario celebren en el salón de fiestas de la Estancia Villa Fiusa. Quienes participen de la misma abonarán $500.

La lista de egresados la integran 83 personas, de las cuáles la gran mayoría viajará también al destino. En este caso, el importe que tuvieron que afrontar para llegar a la ciudad sureña fue de $17.500.

Del Instituto Secundario Bernardino Rivadavia egresan este año unos 240 estudiantes, que tendrán su celebración en las flamantes instalaciones del Salón Bomarraca.

Pese a que en algún momento se habló de cobrar una tarjeta de hasta $700, finalmente el costo será de $550 para invitados y $350 para los protagonistas de las noche: los estudiantes.

En el caso de esta promoción, viajaron entre el 5 y el 13 de noviembre a Bariloche, para lo que fue necesario reunir unos $19.200, al menos para pagar a la empresa de turismo. De todos los consultados, es éste el más costoso y la variación surge de acuerdo a las distintas firmas comerciales que elijen los jóvenes para concretar la aventura.

El 10 de diciembre, en el Salón Greystone, tendrán su noche festiva los egresados del Instituto Secundario Manuel Belgrano de Villa María.

El valor de la cena es de $530, mientras que el viaje al típico destino del sur es de $15.200, del que participarán 85 de los 90 que integran la nómina de estudiantes egresados.

Por otra parte, el IPET Nº 49 (ex-Escuela del Trabajo), cuenta con 75 jóvenes que finalizan sus estudios este año, de los cuales la mitad viajará a Bariloche con sus compañeros el próximo 9 de diciembre.

Un día antes tendrá lugar la fiesta en el salón de la Estancia Villa Fiusa. Los costos para el viaje y para la cena son de $18.000 y $500 por persona, respectivamente.

Una de las promociones que decidió evitar el viaje de estudios fue la del IPET Nº 56 Abraham Juárez de nuestra ciudad. No obstante, sí es una realidad la programación del festejo del que participarán los 32 egresados junto a sus allegados, el 7 de diciembre en el salón de fiestas de la Sociedad Rural.

Hasta acá, un panorama general de los costos específicos que implican estos eventos tan importantes para los adolescentes como costosos para quienes tienen que solventar los mismos.

Si bien en muchos casos son los padres, hay quienes deciden realizar ciertos emprendimientos, al menos momentáneos, para recaudar los fondos necesarios o alivianar las cuotas en las que suelen dividirse estos gastos.

Hay que tener en cuenta que el viaje implica también juntar dinero del que disponer durante la estadía en el destino, mientras que respecto a la fiesta suele implicar un gasto extra la cuestión de la vestimenta para esa noche especial (ver recuadro).

En promedio

Si bien hay que tener en cuenta los gustos personales, la cantidad de integrantes de cada familia y si se trata de alquiler o compra de las prendas de vestir, se puede hacer un promedio estimativo de lo que gastaría una familia tipo para una fiesta de egresados.

Tomando como ejemplo un caso de cuatro personas -incluyendo al egresado- que asistan a una celebración de este tipo y tomando como promedio una tarjeta de $500, a lo que se le suma el alquier de un ambo clásico en $790 y suponiendo que el resto de la familia no genere ningún otro gasto para la ocasión, deberán contar con aproximadamente $2.790 para una sola noche.

Y en el caso de sustituir ese alquiler por la confección de un vestido calculado en $3.000, en el caso de las egresadas, el promedio ascendería a $6.000.

¿Necesario? Tal vez no, pero sigue siendo la opción que más disfrutan los adolescentes para cerrar una etapa que marca la vida de las personas.

¿Cuánto cuesta vestirse de gala?: Entre alquilar y comprar

“Las madres no van a gastar en comprar un traje que se usa un rato con todos los gastos que ya tienen entre viaje de estudios, cena, etcétera”, resumió Blanca Carranza, de 23 años de trayectoria en el rubro indumentaria de alta costura y propietaria de la casa Azarel, que ahora se encuentra en la esquina de San Juan y Chile.

La especialista remarcó que los hombres elijen alquilar, ya no el traje completo, sino únicamente el saco, ya que en el 50% de los casos “se adaptan a la moda del pantalón tipo chupín, que es algo que se instaló entre los jóvenes”, señaló.

Los precios varían entre $490 y $690 sólo para el saco, mientras que el ambo clásico va desde $790 hasta $990.

En el caso de las mujeres, sigue predominando la confección de la prenda de vestir para estos tipos de eventos y “muy eventualmente alquilan”, según comentó la modista.

Realizar una prenda de este estilo a medida, si bien varía según la cantidad y calidad de las telas, el precio final va desde $2.900 hasta $9.900, con varias opciones intermedias”