FEDERAL C
Otra vez, pese al cielo gris y la tarde lluviosa, el público villanovense dijo presente. Autos particulares, colectivos o cualquier vía de transporte, todo sirvió para recorrer los 150 kilómetros, bajo el agua, para volver a decir presente en donde jugara el León.
Desde temprano, los simpatizantes del club tricolor se agruparon en los alrededores del Estadio General Paz Juniors; y allí, entre los rostros conocidos o cualquier referencia a Alem, servía para ir juntándose, a metros de la entrada a la tribuna Poetas del Césped.
Casi una hora de que empezará el cotejo ya se escuchaban los redoblantes y bombos de Los Borrachos del Tablón; y, media hora previo al cotejo, cuando se abrió la puerta, ingresó el público visitante.
Entre los hinchas que se identificaban con sus banderas, como barrio San Antonio, Los Olmos o Villa Latita, uno de los primeros que entró fue el intendente Natalio Graglia, junto al extitular del Ejecutivo villanovense, Marcelo Frossasco, y el presidente Gustavo Lloret.
Párrafo aparte para el actual funcionario provincial, que en la previa fue determinante para concretar la concentración en la Docta y se acercó a los vestuarios, para brindar su acompañamiento, posterior a la caída.
Envueltos en una notable expectativa se ubicaban las más de 250 personas que se llegaron hasta la capital provincial y ser parte de una histórica tarde de su amado club. Y así lo demostró, con cánticos y aplaudiendo a sus jugadores cuando ingresaron al campo de juego; y ni el gol a los segundos apagó la pasión, porque se escuchó el ¡vamos, vamos, Alem! para “levantar al equipo”, ante el comienzo adverso.
De igual modo, el silencio cada vez se fue ampliando, por más que Los Borrachos del Tablón, ubicados en una esquina, fueron continuos con sus cantos, “batallando” con la orquesta de bombos, platillos y trompetas de la hinchada anfitriona.
Ya con el 3 a 0 la tristeza se hizo sentir, algunos poquitos se fueron tras el tanto del penal, con desazón y también producto de la garúa que no frenó y así retomar rápido el viaje de vuelta, pero la inmensa mayoría se quedó hasta el silbatazo final, y a realizar el habitual saludo a sus jugadores, consumida la caída.
Esta vez, el final no fue festivo, sino que fue triste, pero dejó en claro que, adonde vaya Alem, allá irá su gente, con su color, su corazón y esencialmente, con su pasión.
En Morteros
Victoria celeste
En la otra semifinal, 9 de Julio de Morteros superó 4 a 2 de local a Corralense en un partidazo y sacó ventaja de cara a la revancha, que se jugará en Corral de Bustos.
Santiago “Mono” Sánchez, en dos oportunidades, Gustavo Yozwaik y Nicolás Gaido anotaron los goles del Celeste, que empezó perdiendo y además su arquero, Leonardo Torres, le atajó un penal a los siete minutos del primer tiempo al goleador de la visita, Stefano Martorana.
En la visita, mientras tanto, descontaron Francisco García y Herrera.
