Germán Ruiz, director del Conservatorio Superior Felipe Boero, habló de los conciertos de primerísimo nivel que la institución está ofreciendo a la comunidad al precio de un bono contribución, lo que la convierte en uno de los principales animadores culturales de Villa María

Escribe: Iván Wielikosielek Especial para ELDIARIO

Es impresionante constatar la cantidad y sobre todo la calidad de los conciertos que viene realizando el Conservatorio en lo que va del año; números que serían principales en cualquier ciudad del mundo. Estos van desde la presentación de la pianista villamariense Andrea Arese (radicada en los Estados Unidos) con su esposo, el violinista salvadoreño Carlos Elías, al dúo rosarino Gíntoli-Panizza, además de las últimas y fabulosas presentaciones en septiembre, con Fabricio Valvasori y Liliana Camana (músicos locales con formación europea), que llenaron la sala con Las Cuatro Estaciones. O las sonatas para piano y violín de Brahms y Beethoven que el pasado viernes estuvieron a cargo de los cordobeses Eduardo Gramaglia y Pablo López. Esta seguidilla no es una mera casualidad, sino producto de una exhaustiva programación. Y de este modo la explica el director del Conservatorio, el pianista Germán Ruiz.

“Nuestro desafío es traer músicos de primer nivel a costo cero o con un caché que podamos absorber con los 30 pesos del bono contribución. Si hemos podido contratar números de tanta calidad, se debe no a la escasa recaudación que podamos hacer, sino a los convenios con distintas entidades que nos posibilitan esas contrataciones, como la Fundación Pro Arte de Córdoba, la Embajada de Portugal, el Instituto Italiano de Cultura o la propia Municipalidad, que este año trajo a Andrea Arese para el 25 de Mayo”.

Si hay un segundo “secreto” que no tiene que ver con el dinero, es el que Ruiz revela a continuación. “Muchos de estos músicos pueden venir a Villa María porque no son la vedette del momento. Y al no tener representantes ni estar comprometidos con algún sello discográfico, uno puede hablar directamente con ellos y pedirles por favor que vengan a tocar a una escuela. Generalmente acceden de muy buen grado cuando entienden la importancia pedagógica que para nosotros representan”.

Entre el seleccionado de músicos que no cotizan en el hall de la fama y que han pasado por el escenario del “Felipe Boero” en los últimos dos años, Ruiz señala a “Elio Coria, un pianista que se está formando en Europa y que fue elogiado por Marta Argerich. También a Diego Fedeli, oriundo de Ordóñez que está tocando en Europa desde hace años. Y por último Antonio Formaro, uno de los pianistas argentinos de mayor renombre”. Pero tampoco se olvida de “dos números internacionales de fabuloso nivel, como el pianista japonés Kotaro Fukuma y la soprano portuguesa Carla Caramujo”.

Profes, alumnos y egresados al escenario: el orgullo mayor

En cuanto al hilo conductor de los conciertos 2015, Ruiz indica que “están enmarcados en el Ciclo del Cincuentenario, ya que el año que viene cumplimos las Bodas de Oro. Por eso es tan importante la vuelta de músicos egresados de acá, como Andrea Arese o Liliana Camana. Ellos son un fabuloso ejemplo de superación para los alumnos”.

Respecto a este último punto, Ruiz agrega que “los conciertos están precedidos por la actuación de estudiantes en un proyecto que denominamos Nuestros Teloneros, cuya intención es foguear a los jóvenes en escenarios importantes”.

En cuanto a la gran respuesta del público a todas estas propuestas, el director del Conservatorio subraya que “por suerte tenemos un promedio de más de la mitad de la sala por cada presentación, es decir, más de 150 butacas sobre las 250 de la sala mayor. El último concierto de Fabricio y Liliana, por ejemplo, fue un récord absoluto ya que hubo que poner sillas para más de 300 personas. Para nosotros es todo un logro no sólo porque estamos alejados del centro, sino porque hacemos difusión a pulmón. Y éste es un gran mérito de los profesores, que hacen una gran movida publicitaria con pega de afiches, invitaciones por Facebook y el infaltable boca en boca. Es todo muy artesanal pero da sus resultados”.

Sobre los espectáculos que se vienen en el Felipe Boero, ya está confirmado un concierto para el viernes 2 de octubre donde el propio Ruiz tocará a cuatro manos con el enterriano Sebastián Amarillo, abordando un repertorio de música argentina. Y está por confirmarse la llegada de un guitarrista italiano en noviembre. “Es muy importante para nosotros traer referentes nacionales e internacionales, pero sobre todo mostrar el nivel alcanzado por los ex alumnos y profesores de nuestra casa. Ese es nuestro mayor orgullo”, concluyó Ruiz.

Premio para Los Zabequi

El grupo folclórico local Los Zabequi este año también recibirá el Premio Arco de Córdoba 2015, que se entregará en Córdoba en noviembre.

Según destacó Ricardo Quiñonez, líder del grupo, “es un honor para nosotros, ya que también lo recibirán Facundo Toro y Daniel Altamirano, entre otros”.

Los premios Arco de Córdoba son organizados por la empresa OBC producciones a cargo del manager Benito Correa.