El expolicía Gustavo Prellezo finalizó sus estudios universitarios en la cárcel y juró hace una semana en el Colegio de Abogados de Quilmes. La hermana del reportero gráfico asesinado en 1997 se mostró sorprendida e indignada por la noticia
Gustavo Daniel Prellezo (55), el expolicía bonaerense que fue condenado a prisión perpetua por el asesinato del fotógrafo José Luis Cabezas, ocurrido en 1997, juró como abogado en el Colegio de Abogados de Quilmes, luego de haber finalizó sus estudios universitarios en la cárcel.
El hecho generó conmoción en el seno de la familia Cabezas, cuando se conoció que Prellezo ofrece sus servicios profesionales a través de la red social Linkedin.
En diálogo con el portal de noticias Big Bang News, la hermana del reportero gráfico de la revista Noticias, Gladys Cabezas, expresó: “Esto es tremendo; no estamos en contra de que socialice y se reinserte como ciudadano, pero que cumpla la condena”.
Gladys opinó que “si matás a una persona, no sos bueno como el resto. No puede ser que tenga más derechos que el que trabaja y paga sus estudios. A este asesino le pagamos la carrera nosotros y tan fácil tuvo la matrícula”.
Prellezo realizó sus estudios en la Universidad Nacional de La Plata, durante el régimen de salidas transitorias del que venía gozando desde 2010, y prestó juramento durante una ceremonia privada realizada el pasado miércoles 22 de marzo.
El homicida de Cabezas fue anotado en el Tomo 11, folio 173, del Colegio de Quilmes. Por ende, ya es abogado matriculado y está en condiciones de ejercer. Asimismo, constituyó domicilio en esa ciudad junto a Guillermo Baquet, exabogado del Servicio Penitenciario de la Provincia de Buenos Aires, y se anotó en ese distrito.
“Este tipo mató, falsificó papeles y mintió. No cumplió la condena. Dijo que le habían robado el auto y apareció en Mar de Ajó incendiado. Fue el tipo que mantenía la comunicación de (Alfredo) Yabrán y la ‘banda de los horneros’. Planificó dos años el crimen de mi hermano”, añadió Gladys Cabezas al ser entrevistada por Big Bang News.
Libertad condicional
Cabe recordar que el 7 de enero de este año, el expolicía fue beneficiado con la “libertad condicional” por orden de la Cámara de Apelaciones y Garantías de Dolores.
Aquel fallo de los camaristas Fernando Sotelo y Susana Miriam Darling Yaltone se conoció 17 días antes de cumplirse el vigésimo aniversario del crimen del Cabezas, cometido el 25 de enero de 1997 tras una fiesta de cumpleaños en la casa del empresario postal Oscar Andreani, en la localidad balnearia de Pinamar.
Fuentes judiciales consultadas por la agencia Télam señalaron que Sotelo y Yaltone habían coincidido en que Prellezo “cumplió con todos los requisitos pautados por la ley para gozar de la libertad condicional”, aunque la condena en su contra aún no está firme.
Es que, de acuerdo a los informantes, aun está pendiente de resolución un recurso de queja interpuesto por la Defensa de Prellezo ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, luego de que en 2014 ese tribunal rechazó por “inadmisible” un pedido de libertad basado en el argumento de que la pena ya estaba cumplida por el tiempo que estuvo detenido, más la aplicación de la norma del “2×1”, vigente cuando ocurrieron los hechos.
Es por eso que los camaristas le concedieron, a fines de diciembre último, “una excarcelación en los términos de la libertad condicional”, explicó uno de los voceros consultados.
En su fallo, la Cámara de Dolores destacó la “superación personal” de Prellezo en base a sus estudios en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de La Plata, a que trabaja como gestor desde su domicilio, realiza actividad física, concurre a la Iglesia Adventista y fortaleció sus “lazos familiares y sociales en general”.
Según las fuentes, el exsubcomisario de Pinamar reside en la capital bonaerense, donde formó una nueva pareja con la que tiene un hijo.
Asesinó a Cabezas
Para la Justicia bonaerense, que condenó a los autores del crimen, Cabezas fue capturado en un operativo clandestino supervisado por los policías Aníbal Luna y Sergio Camaratta, y luego llevado hasta una cava de un camino rural de General Madariaga, donde Prellezo lo asesinó de dos disparos en la cabeza e incendió su cuerpo dentro del auto que utilizaba para la cobertura periodística de la temporada de verano.
Tras una compleja investigación criminal, el juez de Dolores que instruyó la causa, José Luis Macchi, determinó que el empresario Alfredo Yabrán fue el autor intelectual “mediato” del crimen de Cabezas y su jefe de custodia, el exsargento del Ejército, Gregorio Ríos, el “inmediato”.
Por el crimen también fueron condenados Sergio González, José Luis Auge, Horacio Braga y Héctor Retana, integrantes de la denominada “banda de los horneros”, oriunda de la localidad platense de Los Hornos, y el por entonces comisario de Pinamar, Alberto “la Liebre” Gómez.
Excepto Prellezo, los otros tres expolicías recuperaron la libertad entre 2007 y 2010, en tanto que Ríos recibió la “condicional” en 2008.
En cuanto a “los horneros”, a partir de 2003, cuando el Tribunal de Casación bonaerense redujo significativamente las condenas impuestas y gracias a la ley del “2×1”, entonces vigente, también fueron beneficiados con morigeraciones de la prisión, a excepción de Retana, quien murió de SIDA en la cárcel.
El único de los nueve condenados por el caso que hoy continúa preso es Sergio González, quien desde 2005 gozaba de la “libertad condicional”, pero en marzo de 2015 fue detenido en La Plata, acusado de integrar una banda dedicada a la elaboración y venta de éxtasis.
