El varietal que puso a la vitivinicultura argentina en boca de todos tiene quienes lo celebran. En la ciudad, la vinoteca mayor ofrece descuentos y una oportunidad para acercarse a conocer el mundo del vino
«El malbec fue una uva que sufrió mucho, fue muy desprestigiada, a tal punto que se la llegó a llamar como la (uva) francesa. Por lo tanto, el homenaje es muy valedero, desde allí y por todas sus virtudes y logros». De esta manera, Sebastián Valfré, titular de la vinoteca del mismo nombre, sintetiza los argumentos de la celebración de la “Semana del malbec”.
Es la primera vez que se festeja en todo el país a la uva que tiene asignado hace tiempo, desde 2011, la fecha del 17 de abril, conmemorando el día en que el entonces presidente Domingo Faustino Sarmiento (en 1853) encarga al francés Michel Aimé Pouget, un experto en suelos, la implantación de la vid de este varietal que principalmente se cultivaba en Francia, pero que a partir de esta experiencia logró su máxima jerarquía en la Argentina. Es más, tras una terrible plaga de la filoxera (el parásito más temible de la vid), los pie de viña argentinos sirvieron para restaurar los viñedos en casi toda Europa (1870).
«Hubo una época en que al malbec se lo masifica y se lo bastardea. Se trabaja sobre el volumen haciendo una elaboración sencilla y fácil, hasta entrar en un anonimato», describió Valfré esa fase de la historia. Pero luego recordó a enólogos como Michel Rolland y también Raúl de la Mota (1970), además del sacerdote salesiano de origen cordobés Francisco Oreglia, fundador en 1965 de la Facultad Don Bosco de Enología y de Industria Frutihortícola, ubicada en Rodeo del Medio (Maipú-Mendoza), quienes rescataron y mejoraron a partir de su trabajo del vino que pondría a la vitivinicultura argentina en boca del mundo.
Por eso muchos, los conocedores y Valfré, lo catalogan como «la nave insignia», un «emblema de la vitivinicultura argentina».
Los suelos
El propio Rolland confesó en un sinfín de oportunidades que se vio deslumbrado por la calidad de este varietal cosechado en el país y por el suelo.
«Más allá de la versatilidad de la vid, hoy el malbec se está plantando en China, donde los especialistas aseguran que crecerá, pero habrá que ver qué fruta da», apuntó Valfré.
En cambio, en la Argentina, «hacés buenos malbec en los Valles Calchaquíes (Salta) o en la Patagonia, además de Uco, Tupungato, en Río Negro o en Neuquén, salvo microclimas excepcionales. Ahora se estila el terroir (terruño) para mezclar entre uvas de la zona del Pedernal y Maipú o Agrelo con Agrelo Alto, pero siempre en busca de una armonía, de todo lo que querés en una sola variedad».
Para ingresar
La “Semana del malbec”, consideró, «es buena para promocionar su historia y para que quienes sientan curiosidad se acerquen al universo del vino. Porque el malbec es muy versátil y una persona puede probar vinos jóvenes frutados y otros ensamblados sutilmente tocados con madera, lo que Rolland define como «al punto de la duda», «y cuando no hay duda la madera puede eclipsar la complejidad del varietal», explicó. En ese equilibrio, el varietal puede distinguirse.
Al comparar el malbec con los demás varietales, Valfré aclaró que «hay que ser muy respetuosos, porque en realidad se va haciendo una idiosincrasia en lo que son las sensaciones, lo sensorial y el gusto, en la aceptación de la astringencia de los taninos que hay que domar en los cabernet y que no hace falta en un malbec joven… Va haciendo que la gente vaya en busca de eso, está instituido».
Pero marcó además que «como están los amantes de esos varietales, están los que prefieren un pinot noir (que tiene cero expresión de los taninos), lo que es un gusto por otro estilo de vinos».
Por regiones
Una proyección que hace el titular de la vinoteca con 93 años en la ciudad (cinco generaciones) es que “se podría encubrir detrás del terroir, porque, como marcan los especialistas como Rolland, en Pomerol (Francia) nadie pide un merlot, sino un pomerol, que es la uva varietal de la región”. En ese sentido, precisó que las regiones tienen su impronta muy particular y se puede notar la diferencia entre la parte norte de los Valles Calchaquíes y un malbec de Luján de Cuyo, ya que tiene notas de fruta cocida que distingue a los primeros sobre el mendocino o uno de Río Negro». Pero Valfré sostuvo que para ello «cada vino debe ser genuinamente elaborado, respetando las partidas de sus uvas por región, honesto».
“Propondrán la semana mundial”
“El sábado se propondrá en el Hipódromo de Palermo fijar la celebración anual de la ‘Semana del malbec’”, anticipó Sebastián Valfré a EL DIARIO. Será en el marco de los festejos que por primera vez se dan en la ciudad de Buenos Aires, más allá de la fecha del 17 de abril.
Desde el lunes y hasta el domingo 10, se desarrolla una variada agenda de actividades en este predio y diferentes centros bonaerenses relacionados, como capacitaciones y charlas de prestigiosos sommeliers y enólogos de destacadas bodegas. Esta edición sumó tiendas y restaurantes con importantes descuentos en cuanto al consumo de vinos malbec.
El “Malbec world day” es una iniciativa global que busca posicionar al malbec argentino en el mundo y celebrar el éxito de nuestra industria vitivinícola. Desde su primera edición, el 17 de abril de 2011, este homenaje mundial ha logrado alcanzar un éxito rotundo gracias al apoyo brindado por el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto y la Corporación Vitivinícola Argentina, al encontrarse enmarcado dentro del Plan Estratégico Vitivinícola Argentina 2020.
En marco de la campaña de promoción genérica “Vino Argentino”, de la Corporación Vitivinícola Argentina, a cargo del Fondo Vitivinícola Mendoza, se realiza la primera edición 2016 de la “Semana del malbec”. La acción estará coordinada por la Comisión de Marketing de Bodegas de Argentina. Para este sexto año de festejo, Wines of Argentina ha decidido destacar que el malbec se ha convertido en un clásico.