Escribe Diego Pellegrini -h-

Empate con gusto a poco para los dos. Universitario y Alumni se tuvieron que conformar con la división de honores, tras el 2 a 2 en Arroyo Cabral. Si bien el local lo pudo igualar sobre el final, el punto le sabe amargo al conjunto de Joselito Bernadó, teniendo en cuenta que tenía que sumar de manera importante, pensando en la clasificación.

El “Fortinero”, por su parte, encuentra su segundo empate en fila, tras el 3 a 3 de entre semana ante Asociación Española, y pone en riesgo la soledad de la cima en la Zona Centro, a merced de Deportivo Argentino.

Fue un partido entretenido, con idas y vueltas en el resultado, que vio como compartieron la conducción del pleito a lo largo de los noventa minutos.

El inicio fue para Alumni, ya que se mostraba mejor con la pelota ante un rival que no terminaba de acomodarse en la cancha. El balón le corría mejor al visitante y de esa manera llegaba con profundidad al área defendida por Simón Mellano, a pesar de que no terminaba de concretar como pedía la jugada.

Una buena corrida de Juan Gaviglio que Nicolás Del Sole no pudo empujar, más una pelota de Juan Fonseca, que otra vez el “Sapito” no alcanzó a definir, a pesar de que ganó en el área chica.

Universitario sufría el partido, casi no llegaba al área de Leonel Luciani, ya que el juego no aparecía por la inconexión entre volantes y delanteros.

Pero a pesar de esta foto del partido, el 1 a 0 iba a llegar a favor de la “Uni”, cuando el reloj marcaba 33. Lucas Barengo ganó por la izquierda dentro del área y le entregó en bandeja el gol a Pratto, para que el “Gringo” se llene la boca de gol.

Al desgaste lo hacía Alumni, pero la victoria era del equipo de la casa de altos estudios.

Con ese tanto, el partido cambió de dueño, mostrando a Universitario más abierto a la hora del ataque, encontrando espacios en un “Fortinero” desordenado por el golpe de escena de Pratto y compañía.

Antes del final del primer tiempo, Pablo Picotti lo tuvo de cabeza, pero su frentazo salió por arriba para el local.

El complemento continuó con la misma tónica. Universitario seguía mejor y Alumni no encontraba el rumbo.

Picotti lo perdió increíblemente abajo del arco y también lo tuvo Pratto, pero la pelota salió cerca.

Hasta que Sánchez decidió mover el banco, mandando a la cancha a Lautaro Pauletti, para liberar en la conducción del equipo a Facundo Ñáñez y ese cambio dio vuelta el partido.

Porque el ex-Argentino se soltó, empezó a agarrar la pelota y llegaron los goles.

A los 20’, Pauletti lo buscó a Ñáñez y éste la “picó” para que Fonseca quede mano a mano contra Mellano, para definir colocando el 1 a 1.

Era el momento del visitante, que con un par de toques distintivos dio vuelta el partido.

Porque a los 24’, otra vez Ñáñez ganando la pelota pero ahora por izquierda, para habilitar a Del Sole, quien definió de primera, decretando el 2 a 1.

Universitario no entendía nada cómo el rival le daba vuelta el cotejo en cinco minutos, con una ráfaga de buen fútbol.

Lucas Barengo lo tuvo, pero el travesaño le dijo que no y parecía que al local se le iba el partido, con Emanuel Chillón definiendo también por arriba un ataque claro.

Hasta que al final llegó la jugada polémica que le daría el empate a Universitario: Barengo ingresó al área para definir y Luciani terminó despejando la pelota, pero el juez vio infracción del arquero y marcó el penal (46’). Fernández lo cambió por gol y el juego terminó 2 a 2, con el resultado que mejor le quedaba al partido.

La figura

Facundo Ñáñez

Expresó al final del partido que su posición predilecta es la de “enganche” y justamente cuando Aureliano Sánchez lo puso a jugar en esa función, Alumni dio vuelta el partido con dos asistencias del volante ex-Argentino. En Universitario el despliegue en ofensiva de Emanuel Pratto, con gol incluido, fue lo más sobresaliente, a pesar que tuvo que dejar la cancha temprano en el complemento.

El árbitro
Jorge Verón

Tuvo un partido de mayor a menor. Un gran primer tiempo con pocas amarillas y todos aciertos. En el complemento mantuvo su nivel, a pesar de algunas equivocaciones. Sobre el final, el lunar de la tarde, el penal de Luciani a Barengo, que desde afuera no se vio y el juez marcó infracción del arquero contra el delantero.