Así mencionó el juez Federal, Miguel Hugo Vaca Narvaja, la existencia de la caja de seguridad con 290 mil dólares a nombre de Fernando Boldú y “en la que estaría autorizado Accastello”. Confirmó la existencia del dinero pero advirtió que todavía “por esta plata no hay investigación”
El juez federal Nº3 Miguel Hugo Vaca Narvaja (foto), a cargo de la causa en la que se investiga a la financiera ilegal CBI Cordubensis SA, confirmó la existencia de los 290 mil dólares que «estaban en una caja de seguridad a nombre de Fernando Boldú y sobre la que estaría autorizado Eduardo Accastello».
El funcionario judicial se excusó de brindar más apreciaciones y marcó que están «en la tarea de recolección de pruebas para ver y evaluar la situación de los 37 imputados que tiene hasta ahora la causa CBI Cordubensis». Sostuvo que esta información referida a la caja y que trascendió a partir de una nota publicada el domingo en un diario capitalino, que «es más de tinte administrativo». «La existencia de los dólares la confirmo porque los tuve en la mano y mandé a depositarlos al Banco para no tenerlos en una caja fuerte de mi despacho, donde estaban antes», indicó en referencia al juez federal apartado de esta causa, Ricardo Bustos Fierro, quien así los guardaba.
Sobre si no resultó llamativo que se tratara de 29 fajos de 10 mil dólares cada uno de numeración correlativa, Vaca Narvaja prefirió no aportar comentarios y apuntó que sobre esos valores «todavía no existe constancia ni reclamo». «Por esta plata no hay una investigación», subrayó.
¿Coincidencias?
Respecto a la trascendencia del contenido del cofre y la relación que aparece entre el titular Boldú y Accastello, deslizó que «desde el punto de vista periodístico se pueden encontrar ciertas coincidencias» pero fue contundente a la hora de desvincularse de esas apreciaciones.
Y se manifestó de la misma manera en cuanto a que la persona relacionada era nada menos que Boldú, justamente quien aparece desde el primer día en la investigación, ya que se halló un presunto recibo en la camioneta donde apareció muerto el vicepresidente de la financiera Cordubensis CBI, entre otras coincidencias, indicó que «son hipótesis que analizan los periodistas».
En el sentido, describió que “en la metodología para continuar trabajando en la causa hemos tomado ese orden determinado que tenía cuando estaba a cargo de Bustos Fierro, que como mi antecesor creía que correspondía, y lo estamos fraccionando, seccionando y desmenuzando para comenzar a resolver cada una de las puntas”. Y así puso un plazo para esas definiciones: «Estamos abocados a que antes de la próxima Feria Judicial haya resultados», lo que derivarán en el juicio que se presume será oral y público. En declaraciones anteriores adelantó que trabajaría en que no se arme una megacausa.
«Que haya gente de la política o empresarios involucrados no cambia. Nosotros nos regimos por el artículo 16 de la Constitución Nacional, por el que todos somos iguales ante la Ley. No aparecen diferencias ni implica un freno en el avance de la investigación», aseveró el magistrado.
CBI Villa María
El juez Vaca Narvaja confirmó además la existencia de una causa vulgarmente conocida como “CBI Villa María”, la que si bien apareció como relacionada en un principio, como un desprendimiento, luego se habría desvinculado y operaba con autonomía, a pesar que algunos nombres habían tenido coincidencias con la cordobesa.
Las vinculaciones de Boldú: Un maratonista en causas
Las explicaciones del origen del dinero y la propiedad, si es de Fernando Boldú o de Eduardo Accastello, si bien todavía no son materia de investigación de la causa, son muy poco claras. Y las declaraciones del exintendente de Laguna Larga, aportan poco. En la nota publicada el domingo en La Voz, Boldú desliza que se trata de un dinero de ambos y luego esgrime que “proceden en su mayoría de una sucesión” (del padre) y de ahorros.
Cabe decir que Roberto Boldú falleció hace más de 10 años, según pudo conocer este diario. La madre del excandidato a legislador por Córdoba Podemos (lista encabezada por Accastello como aspirante a gobernador en 2015), “Monona”, vive.
Fernando tiene dos hermanos: José y Soledad. La familia, por entonces con Roberto al frente, era (y continuaría siendo) propietaria de la Clínica Boldú, en sociedad con Omar García. Cuando el padre de Fernando murió, García se asoció con otro profesional del rubro salud (Arnaldo De María, quien estuvo un tiempo a cargo del PAMI Córdoba). El hermano de Fernando, José Boldú, quien se desempeñaba como médico en el Hospital Clínicas de la ciudad de Córdoba se hizo cargo de la empresa familiar.
Pero no concluye: Boldú, durante su gobierno en la Intendencia de Laguna Larga (1999-2011), denominó al Hospital Municipal “Roberto Boldú”, el nombre de su padre.
Sin embargo, la maratón de menciones del exfuncionario provincial justicialista, ya que estuvo al frente de Asuntos Municipales, no acaba allí: una investigación periodística del programa ADN lo vinculó con una financiera (denominada CBI) que habría operado en las localidades de Laguna Larga, Oncativo y Oliva (todas sobre la ruta nacional 9), que aparecían, según los testimonios, a nombre de Fabricio Libra, acusado además por venta de dólares falsos, hecho que también salpica a Fernando Boldú, relacionado en una cuenta con Accastello.
Volanteada: Trabajadores de La Mañana apuntan a Accastello
Los trabajadores y trabajadoras de la empresa periodística La Mañana de Córdoba, junto al Círculo Sindical de la Prensa y la Comunicación (Cispren), realizaron ayer una volanteada frente al medio para denunciar la falta de pago de salarios y en defensa de los puestos de trabajo. Denuncian el vaciamiento de la empresa y la falta de responsabilidad y de respuestas por parte de los accionistas de Medios del Interior SA, Gerardo Varetto y Marcelo Roca.
A través de un comunicado, expusieron la estrecha relación de estos empresarios con Eduardo Accastello. “Tanto Varetto y Roca reconocieron estrechos vínculos políticos y económicos con el exintendente de Villa María», expresaron, y apuntaron que el accionar de ambos “representa un acto de absoluta irresponsabilidad empresaria porque manifiestan que sólo abonarán lo adeudado una vez que cobren pautas oficiales del Gobierno de la Provincia y de la Nación”.
“Exigimos que cumplan con sus obligaciones, tal como lo hacemos nosotros viniendo a trabajar todos los días, con sentido ético y profesional. Nuestros derechos laborales están por encima de las coyunturas políticas y económicas”, marcaron.
La volanteada hizo visible el conflicto de los trabajadores y la irresponsabilidad empresaria, justo frente al diario (calle Maipú 51), a metros de donde funcionó hasta hace pocos días la «Casa de Villa María» en la capital provincial.