Después de una serie de estudios y experimentos, investigadores japoneses llegaron a la conclusión que los perros también generan un vínculo con las personas que, a priori, solo podían tener los humanos
La relación emocional que se crea entre padres e hijos o, de forma general, entre personas, en parte se produce por la secreción de la hormona oxitocina, también llamada “hormona del amor”, y humanos y perros han establecido un mecanismo instintivo similar al lazo de unión biológico.
Esta sustancia química, que también actúa como neurotransmisor en el cerebro de los seres vivos porque funciona en el núcleo accumbens -al que se le atribuye una función importante en el placer, como la recompensa- no solo genera estrechos vínculos afectivos entre miembros de una misma especie, sino también entre los de especies diferentes. Así ocurre con humanos y perros.
Para demostrarlo, investigadores japoneses realizaron varios experimentos con 30 perros (15 hembras y 15 machos) de diferentes razas y edades, y sus dueños (24 mujeres y 6 hombres). Los resultados revelan que perros y humanos refuerzan sus vínculos biológicos en un circuito neuronal de retroalimentación impulsado por la oxitocina y todo gracias a una simple mirada mutua.
“Cuando perro y dueño se miran, ambos muestran un aumento de la oxitocina”, afirma Takefumi Kikusui, investigador en el Departamento de Ciencia Animal y Biotecnología de la Universidad Azabu (Japón) y autor principal del estudio que fue publicado en la revista Science.
De acuerdo con los investigadores, el contacto visual prolongado entre las mascotas y sus dueños propició un aumento de oxitocina en los cerebros de ambas especies.
Según el estudio, los dueños que mantuvieron más contacto visual con sus perros experimentaron el mayor cambio en los niveles de la hormona después de interactuar con sus compañeros. Pero no solo eso, estos últimos experimentaron un aumento de oxitocina similar.
Solo ellos
Para entender la creación biológica de este vínculo afectivo entre perros y humanos y demostrar su origen evolutivo, el equipo nipón realizó los mismos experimentos con lobos domesticados. Pero contrariamente a los perros, los lobos no buscaron la mirada de los humanos, incluso habiendo sido criados por ellos.
“El uso de este contacto visual hacia el dueño es diferente entre los perros y los lobos”, dice Kikusui.
“Los lobos que tienen una relación muy estrecha con sus criadores no pueden estimular la oxitocina en ellos, posiblemente debido a la falta de contacto visual”, indica el científico. Para Kikusui, “el uso de este contacto visual hacia el dueño es diferente entre los perros y los lobos, y esta es la razón por la que los lobos no tienen este tipo de vínculo con los humanos”.
Por ello, los expertos sugieren que este mecanismo de unión social específico coevolucionó tanto en perros como en humanos durante el transcurso de la domesticación del mejor amigo del hombre, y sus implicaciones sociales son “trascendentales”.
Protección a medias
Una verdadera polémica surgió en España con diferentes organizaciones y proteccionistas, en torno a la nueva Ley de Bienestar, Protección y Defensa de los animales que encabeza el Gobierno de Castilla y que margina a los perros de caza.
Es que se pretende aprobar un proyecto que excluye de su ámbito de aplicación a los animales que participen en actividades cinegéticas, durante su participación en las mismas. Esto supone una clara justificación para que a perros o cualquier otro animal se les pueda maltratar, agredir, causar la muerte, matar, abandonar, disparar, dañar con cualquier tipo de arma, etcétera, dado que ninguna de las obligaciones y prohibiciones de la presente ley les sería de aplicación.
Actualmente apenas se actúa y se imponen sanciones frente a hechos tan crueles.
Proteccionistas apuntan a la impunidad, ya que con esta nueva ley hasta permite, incluso, el suministro de sustancias que les causen sufrimiento, que se les entrene atados a vehículos, entre otras cosas, atentando contra su vida y su integridad física y psicológica.
Como medida de presión se inició una campaña internacional con el lanzamiento de un video en español, inglés, francés y alemán donde se describe la terrible situación de los perros de caza en Castilla la Mancha, un video que dará la vuelta al mundo mostrando la dramática situación de los perros de caza y las intenciones de la Consejería de Agricultura de esta Comunidad Autónoma de dejarlos desamparados.
La sociedad tiene cada vez una mayor sensibilidad contra el maltrato animal, lo demuestran las más de 90 mil personas que han firmado ya en la Plataforma Change.org contra esta iniciativa.