Este año se sumaron nuevas propuestas, y en distintos puntos de la ciudad, por lo que esperan superar la respuesta de los vecinos que tuvieron el año pasado, cuando asistieron unos 750 villanovenses

Durante todo 2016, más de 750 personas participaron de algunos de los talleres culturales que ofreció la Municipalidad de Villa Nueva. Para este año, teniendo en cuenta que se han sumado nuevas propuestas y en puntos de la ciudad donde antes no llegaban, esperan que, por lo menos, sean mil los villanovenses que participen de alguna alternativa educativa.

Desde el lunes ya se comienzan a receptar inscripciones y consultas en la Casa de la Cultura (Deán Funes 1259), de 8 a 16, y las clases comienzan la primera semana de abril.

“La verdad es que estamos preparados para recibir mucha gente, hemos ampliado mucho la oferta de talleres porque recibimos muchas propuestas y muy interesantes, a punto tal que se nos hizo muy difícil poder evaluar y elegir”, confirmó Marcela Unzueta, secretaria de Cultura del municipio.

En ese sentido, calculó que “deben haber unos 60 talleres, cada uno con su día y horario”, pero aclaró que “no quiere decir que haya 60 disciplinas distintas, sino que se repiten; por ejemplo, hay cinco talleres de folclore dispersados en distintos barrios”.

Esto “fue por pedido de la gente”, porque “el año pasado pasaba que por ahí se dictaba el taller en barrio Los Olmos, entonces a mucha gente le quedaba muy lejos”.

“Contamos con varios profesores más este año. Hay talleres nuevos, que se suman a los que había el año pasado, muchos pedidos por la gente. La idea es que sea lo más accesible posible en cuanto a distancias”, explicó.

Algunos de los nuevos son: taller de periodismo, taller literario, taller de amigurumis (muñecos tejidos al croché), taller de artes visuales, arte para niños y adolescentes, reiki, coro para niños y adolescentes (el año pasado fue sólo para adultos), kun fu, entre otros.

Cabe destacar que los talleres no son gratuitos. “Tienen un costo mínimo, ya que en muchos casos si vas a hacer alguna de estas disciplinas, como el taller de amigurumis, en el ámbito privado, quizás te cueste $500 pesos por mes, y éste cuesta $150”, sostuvo la funcionaria.

“El año pasado fueron más de 750 personas que participaron, por lo que este año aspiramos a alcanzar los mil. Sobre todo porque se han abierto en muchos lugares donde antes no teníamos y la gente pedía. Si lo solicitaban es porque hay interés en lo cultural”, ponderó.

Fueron tantas las propuestas de nuevos talleres que receptaron, que no descartó que a mitad de año se abran nuevas disciplinas. “Han quedado algunas sin lugar por el solo hecho de no tener espacio físico para poder llevarlas a cabo, como el taller de herrería, que se va a empezar a dictar cuando terminemos de acondicionar el lugar”, reveló e insistió: “Nos faltan espacios, es lo fundamental. Hemos buscado en instituciones, a las que hay que agradecerles porque nos han abierto las puertas, así que nos estamos terminando de acomodar”.