
El villanovense se sumó ayer al Montes Claros, uno de los clubes de la Súper Liga Brasileña, donde será uno de los refuerzos para la temporada 2017/18. Previo a viajar dialogó con EL DIARIO

Lisandro “Lechuga” Zanotti fue presentado ayer oficialmente en el Montes Claros Vôlei de Brasil, equipo en el que será uno de los dos jugadores extranjeros contratados para jugar la temporada 2017/2018 de la Súper Liga Brasileña, una de las más poderosas del mundo.
La presentación del villanovense se realizó en una de las salas del Hotel Dubai Suites, según informó la web del nuevo club de Zanotti. El otro extranjero es el central Isbel Mesa, cubano, de 28 años y 2,04 metros de talla, también integrante del seleccionado cubano en los últimos Juegos Panamericanos.
El punta-receptor, poco antes de viajar a Brasil, dialogó con EL DIARIO, donde hizo un repaso de su trayectoria por la Liga Argentina y por el seleccionado de nuestro país.
-Uno repasa tus últimos años y es increíble tu crecimiento. ¿Lo sentís así?
-Sí, por suerte es así. Los últimos años fueron en crecimiento. Ahora me llega, en mi mejor momento, irme a jugar afuera. Tengo 26 años, creo que es una edad que uno ya sabe cómo manejar el físico, cómo manejarte adentro de la cancha. Seguramente los años que vengan van a ser los mejores. Me llega en un momento muy bueno de mi carrera.
-¿Llegás y te sumás a la pretemporada?
-Ellos ya hace dos o tres semanas que empezaron a entrenar. Como estaba con el seleccionado argentino me retrasé, me sumaré ahora a la pretemporada. El contrato es de un año, hasta abril o mayo de 2018, que es cuando finaliza la Liga, luego se verá si renovamos o no. Y si no, veremos para dónde partimos. Ojalá que sea con el salto de calidad que uno necesita para despegar y que sea una realidad por mucho tiempo.
-Si sumamos todos los deportes por equipos, sos el primer jugador de la región que jugará en una Liga Brasileña.
-No lo sabía. Llego a esta liga en un momento que Brasil es el campeón olímpico y todo el plantel campeón, excepto el armador, está jugando la liga de ese país. Es una liga muy fuerte y vamos a tratar de aprovechar al máximo eso y seguir creciendo. El equipo está en el centro del país, en Minas Gerais.
-Como villanovense has tenido un abuelo que fue un ícono de la ciudad (NdeR: Carlos Zanotti, conocido político radical).
-Ha sido intendente. Me tocó hace unos días ir al Club Alem, que hace poco empezaron con el vóley, me invitaron y no lo dudé. Fue aportar un poco de lo mío, me trae muchos recuerdos de mi infancia y de mi abuelo. Ellos vivían a la vuelta del club, yo me crié ahí, iba a jugar siempre a la pelota. La verdad que el club haya empezado a hacer vóley me pone muy contento. Lo hablábamos con los dirigentes y me contaban que no querían que el club fuera solo de fútbol. Que hayan empezado con vóley y handball me pone muy contento. Les prometí ayudarlos, desde donde pueda.
-Has trabajado con muchos entrenadores, pero ¿hacerlo con Julio Velasco fue algo diferente al resto?
-La verdad que es un entrenador con muchísima experiencia, que ha estado trabajando en distintas partes del mundo. Obviamente, yo lo he tenido los últimos tres años y siempre tratando de sacarle lo máximo porque no sabés cuándo te puede volver a tocar un entrenador así. Entonces hay que aprovecharlo en cada entrenamiento al máximo y tratar de agarrar cada uno de sus conceptos que son muy claros. En cómo te da una indicación hace su diferencia, para decirte un concepto que otros dan muchas vueltas, él te lo dice muy claro y con palabras que al jugador les llega, y que son fáciles de entender y poder expresar.
-A Juan Manuel Cichello lo tuviste en un seleccionado juvenil y en el VM Vóley. ¿Fue una bisagra en tu carrera?
-Yo siempre digo que Juan es uno de los técnicos que me marcó, me enseñó mucho. Yo era chico y era la etapa de máximo aprendizaje mío, me ha enseñado muchísimo, la verdad que es uno de los técnicos que más me marcó, lo digo siempre. Después estuvo con Velasco en Irán, por algo lo eligió Julio. Juan fue un técnico al que le saqué mucho jugo. En el primer año que estuve en Villa María Vóley no tenía mucho lugar y al final terminé jugando bastante, por eso porque Juan trataba igual al jugador número 1 como al 16. Y quería que aprendieran de igual manera, sin marcar esa diferencia de quien era mejor o peor. Lo pude aprovechar y gracias a eso me toda estar adonde estoy. Inclusive hubo partidos que fui figura. Recuerdo un titular de EL DIARIO, “Con huevo, corazón y Lechuga”, cuando le ganamos a Gigantes del Sur, de Neuquén. Con Juan, cuando uno estaba bien, jugaba. Si me veía que estaba bien, no importaba a quién tenía que sacar y me ponía. Eso habla de un técnico cuando es bueno, porque sacaba a una figura para poner a un chico, él no hacía diferencia.
-¿Seguís de cerca las novedades del vóley de Trinitarios?
-Siempre estoy al tanto de lo que pasa. Antes de volver a Buenos Aires, para viajar a Brasil, pasé a saludarlos. Salí de ahí y le debo todo a Trinitarios. Estuve hablando con Pepa Coria y los chicos. Voy poco y cuando estoy en Villa Nueva comparto mi tiempo con mi familia y con amigos. Siempre, cuando puedo, hago un lugar para pasar a saludar y entrenar. Siempre los tengo presentes.
-Después de ser subcampeón Sudamericano, y jugar la clasificación Preolímpico y la de la Copa del Mundo, te llegó la oportunidad de jugar en la Liga Mundial.
-Por suerte este año pude jugar la Liga Mundial, en la etapa que jugamos en Córdoba. Fue algo increíble. Hoy todo el mundo dice que le ganamos a Brasil, pero el día anterior perdimos 3 a 2 con Serbia, estuvimos ahí nomás y le ganamos 3 a 1 a Bulgaria. En la retina de todos, obviamente, queda el triunfo ante Brasil, porque fue algo histórico que hacía como 20 años que no se le ganaba en Córdoba. Yo era el único cordobés del plantel, el estadio estaba lleno, miraba la tribuna y estaba toda la gente de Trinitarios, mi familia, muchos amigos. Fue un fin de semana que lo disfruté minuto a minuto. Serbia era el último campeón de la Liga Mundial y nosotros jugamos muy bien, se sintió la localía. No se dio ese partido, pero al día siguiente le ganamos a Brasil. Fue una locura, la verdad que muy lindo.
Sus datos
Lisandro Zanotti
Nació el: 4 de octubre de 1990, en Villa Nueva.
Altura: 1,95 metro.
Peso: 89 kilos.
Apodo: Lechuga.
Sus inicios: comenzó a jugar al vóley en los equipos de Trinitarios de esta ciudad.
Otros clubes: Vélez Sarsfield (2008), luego dos temporadas en Villa María Vóley (2010/11 y 11/12), Puerto San Martín (2012/13), Ciudad (Buenos Aires, 2013/2014), Lomas Vóley (en las tres últimas temporadas desde 2014/15 hasta 2016/17).
Con Lomas fue campeón de la Copa ACLAV (2016/2017) y tercero en el Sudamericano de Clubes 2016. Con Lomas fue tres veces campeón del Torneo Metropolitano.
Con la selección: fue integrante de un preseleccionado juvenil. En Mayores fue subcampeón del Campeonato Sudamericano, integró el plantel que logró la clasificación en el Torneo Preolímpico y en el Torneo Clasificatorio para la Copa del Mundo. Hace pocas semanas debutó en la Liga Mundial, en el weekend jugado en Córdoba, donde Argentina derrotó a Brasil y perdió ajustadamente ante Serbia.