Antonio, de 87 años, va de la radio al teléfono esperando noticias de su hijo. Dialogó con EL DIARIO desde Córdoba, donde reside. Andrés, su hijo submarinista, vive en Mar del Plata con la esposa y dos hijas y es uno de los 44 tripulantes del ARA San Juan
“Me siento muy mal, todavía no almorcé. Hace de la semana pasada que no voy ni al supermercado. Estoy prendido a la radio todo el día”.
Son las palabras de Antonio Maroli (87), papá de Víctor Andrés Maroli, uno de los 44 tripulantes del ARA San Juan, del cual no se sabe nada hace una semana.
El submarinista nació y se crió en Villa María, donde residió hasta su adolescencia cuando partió hacia Córdoba junto a parte de su familia. Precisamente desde la capital provincial, su padre Antonio atendió durante la siesta de ayer la requisitoria de EL DIARIO.
En ese diálogo contó que Andrés, uno de sus tres hijos, dejó esta localidad en 1994, cuando tenía 14 años.
Antonio, que fue docente de la Escuela del Trabajo y se jubiló en las aulas, se radicó en Córdoba una década después, en 2005. Allí vive con su esposa y una hermana. Tiene siete nietos, dos de ellos en Alemania. Hoy toda la familia está pendiente de las noticias.
“Ruego que vuelva, estoy prendido a la radio, pensando todo el día. El teléfono no para de sonar”, señaló el hombre, que pese al doloroso cuadro, atendió a este medio con mucha amabilidad.
Describió que Andrés cursó la primaria en la Escuela Mariano Moreno, de Villa María; continuó la secundaria en el mismo establecimiento (Manuel Belgrano) y por la mudanza hacia Córdoba finalizó el Nivel Medio en el Comercial Jerónimo Luis de Cabrera.
“Se quedó a vivir en Mar del Plata cuando lo nombraron submarinista”, explicó.
Allí, en la costa atlántica, el villamariense reside junto a su esposa. Laura Albanese, con quien están juntos al menos desde 2010 y con la que fueron padres de mellizas en 2015.
El domingo pasado su compañera subió a su muro de Facebook una fotografía familiar en la que está con Andrés y sus nenas, junto a la leyenda “Fuerzas, Ara San Juan. El mundo está con ustedes”. Naturalmente, la imagen tiene numerosas muestras de afecto y de apoyo ante la dolorosa incertidumbre.
Buscando información sobre Andrés, EL DIARIO estuvo previo al contacto con su papá en inmediaciones de la casa familiar en la que habitó, en Piedras y avenida Presidente Perón.
“Se fueron hace más de 20 años, pero conozco a Andrés desde siempre. Estoy muy triste, muy afligida por esta noticia”, confesó la vecina que atendió a este matutino durante la siesta.