El intendente consideró que a pesar de las diferencias son más las cosas que los unen que las que los separan, por eso deben trabajar en la unidad del PJ en todo el país
Más de 100 personas, entre autoridades y simpatizantes, participaron de la celebración del Día del Militante que se llevó a cabo en la sede del Partido Justicialista de Villa María.
Al inicio del encuentro que encabezaron el presidente departamental del PJ, el intendente Martín Gill, y la titular del justicialismo villamariense, la legisladora Nora Bedano, se proyectó un audiovisual con imágenes históricas del 17 de noviembre de 1972, por el que se declara el Día del Militante, y del 17 de Octubre de 1945, fecha por la que se instaura el Día de la Lealtad.
Luego, Bedano, en primer lugar, y Gill, en segundo término, dirigieron unas palabras a los presentes, y finalmente se procedió a la entrega de reconocimientos a siete militantes.
“En nuestro país, todo el que se haya sentido peronista celebró el Día de la Militancia el 17 de noviembre”, afirmó Bedano al hacer uso de la palabra.
“Nosotros normalmente lo reducimos a la militancia política partidaria, al militante que enarboló las banderas del peronismo dentro del espacio del partido, y tal vez perdimos de vista a esos otros militantes que desde otros lugares del peronismo construyeron esa pared que ya tiene más de 70 años desde el 17 de Octubre de 1945”, señaló.
“Construir el peronismo tampoco tiene relación directa con venir a la sede partidaria todos los días, pero sí multiplicar el mensaje. Estamos acá para destacar al militante de otros sectores que nos ayuda a construir una ciudad como la que hoy tenemos, este año quisimos reconocer a militantes que trabajan en el territorio desde otros espacios y que construyen y se preocupan por el otro desde su lugar”, agregó.
“Como ningún otro partido político en América Latina, el peronismo tiene en su esencia un acto de participación militante, y el militante no es un maestro que da clases teóricas sobre la ideología, el peronismo y el militante, como decía Jauretche, es un acto de coherencia de vida, más que maestro, es un acto de testigo, es alguien que se conmueve por lo que le pasa al otro, que rompe la indiferencia, y por eso participa”, afirmó Gill por su parte.
“Se sabe un eslabón dentro de una construcción colectiva porque el militante sólo existe dentro de ese proceso de construcción colectiva”, remarcó.
“En época de redes, se reconfigura, pero nunca se remplaza, lo vemos en cada lugar, en la participación de principios como la defensa de los derechos de los trabajadores, lo vemos en la construcción barrial, haciendo que la justicia social se construya en cada momento y en cada espacio. Por eso el militante peronista tiene algo especial, sabe que pueden venir las tempestades y dificultades, pero sabe también que podemos tener la convicción de que aquello que nos une es tan fuerte, que la tarea sigue siendo tanta, que la lucha sigue siendo una construcción permanente, que no hay nada ni nadie que nos haga bajar los brazos”, subrayó el intendente.
“Hoy se necesita una vocación militante de todos, del que está en una mateada en un barrio, del que conduce un sindicato, del que trabaja en un espacio académico, del que ocupa un cargo público, desde el rol que le toque ocupar, a todos nos toca asumir una vocación de militancia, reconocernos que aún en las diferencias tenemos mucho más que nos une que lo que nos separa, que lo que está en juego es muy importante y por eso es hora de comenzar a trabajar la unidad del peronismo en todo el territorio nacional”, enfatizó.
Militancia desde distintos lugares
En el acto fueron distinguidos Mario García, Rubén Ruëdi, Clarisa Mathot, Pedro Martínez, Rogelio Negrini, Esther Galera de Luján y Osvaldo Damiani.
La edil de Compromiso Comunitario, Mónica Lazos, presente en el acto, explicó que entre los distinguidos hubo militantes de la tercera edad, de la juventud, de las cooperativas, porque “lo que se buscó significar es el rol de la militancia desde los distintos lugares, de distintas edades y no solo la militancia territorial”.
El Día del Militante se conmemora el 17 de noviembre, en homenaje al regreso de Juan Domingo Perón a la Argentina, en 1972, después de 18 años de proscripción tras la llamada Revolución Libertadora.
“Cuando el general volvió al país fue recibido por los militantes, el 17 de noviembre de 1972, y se declara como el Día del Militante porque fueron ellos quienes bregaron para que se produjera ese retorno, el regreso de Perón al país fue un crédito de la militancia, fue un triunfo del pueblo que lo trae de vuelta a su país después de tantos años de ausencia”, remarcó.
“Así comienza otro período en Argentina, la vuelta del general significó mucho para el peronismo, y esa militancia, al decir de (Antonio) Cafiero, lleva en su esencia que ante la adversidad, vuelve a reconstituirse y sale de nuevo en pos de los objetivos que el partido embandera”, afirmó Lazos.
Además de Gill, Bedano y Lazos, del acto participaron el presidente del Concejo Deliberante, José Carignano; Aldo Paredes; el titular de la CGT Villa María, Edgardo Garmendia; Marcelo Fita; Lucas Pagliero, dirigentes justicialistas y vecinos de diferentes barrios e instituciones de la ciudad.