Baby futbol – Diego Bencivenga

En razón del cumpleaños 41 de la Liga de Baby en la víspera, el presidente habló de la actualidad de la entidad, las nuevas iniciativas y los trabajos que se realizan para “disminuir la competitividad” y las “malas conductas” en el marco del fútbol infantil

En la víspera, la Liga Villamariense de Baby festejó su cumpleaños número 41, tras su creación un 7 de mayo de 1977 por los pioneros de una entidad que, hoy por hoy, es la referente del fútbol infantil en la ciudad y la región.

Este nuevo aniversario, el baby lo celebra con su número máximo de participantes (24 clubes) en cuatro décadas de historia, con amplitud en la zona aledaña y organizando diferentes certámenes semestrales que reúnen a casi dos mil chicos.

Lo festeja con clubes que no descansan a través de directivos emprendedores, que trabajan denodadamente en la infraestructura de sus canchas, para brindarles lo mejor posible a sus pequeños jugadores.

Pero también inserta en una competitividad que, en ciertas oportunidades, provoca situaciones complejas y que lleva a seguir trabajando arduamente para comprender que el baby “es una etapa de aprendizaje”.

En esto y mucho más hizo hincapié el actual presidente Diego Bencivenga, quien resaltó el “ordenamiento” de la entidad y los pasos que se vienen desarrollando en razón de aggiornarse a los tiempos actuales.

Como así también hizo foco “en el trabajo de hormiga” que se viene realizando para quitarle competitividad al certamen y, esencialmente, a combatir las “malas conductas”.

“La actualidad de la Liga es buena, está ordenada en todos los ámbitos, que es algo con que ya contaba cuando asumimos, y lo que hemos intentado es acortar los tiempos en la parte burocrática”, expresó en un primer tiempo y, enseguida, reconoció que “estamos evaluando que en el Clausura los fichajes se hagan a través de Internet”.

Y sobre dicha novedad remarcó: “Estuvimos viendo un sistema de fichaje que hace la Federación de Básquetbol vía Internet que es muy interesante y queremos ver si podemos implementar algo similar, porque a nivel organizativo es el mayor problema que tenemos; este año tuvimos una semana para fichar a los casi dos mil chicos”.

A continuación, apuntó que “nos sentimos apoyados y convencidos en aceptar que los tiempos han cambiado, y si no tenemos una concientización de todos los actores del baby fútbol, la sociedad y los tiempos modernos nos pueden llevar puestos. En esto me estoy refiriendo a la mala conducta”.

Por lo que indicó que “desde el primer día que somos comisión hicimos hincapié en lo mismo: sacarle competitividad al baby. Si bien es muy difícil al baby de hoy quitarle esa competencia en sí, creo que si los más grandes, dirigentes y papás tomáramos conciencia de que los chicos están en una etapa pura de aprendizaje, el baby podría ser tranquilamente una sana competencia”.

“Pero los más grandes, que somos el mayor problema, no nos damos cuenta y llevamos esta competencia a un nivel que termina siendo feroz y, en muchos casos, haciéndoles daño a los chicos”, añadió.

“También hay que ser sinceros; hasta el momento hemos jugado casi 500 partidos y hemos tenido 10 papás o técnicos echados, por lo que acá tampoco ocurre cotidianamente, pero lo ideal sería que no ocurriera”, redondeó.

Medidas

Precisamente, el extitular de AFUCO explicó que para mermar las inconductas es “primordial la capacitación a nivel de técnicos y dirigentes. Pero esto es un trabajo de hormiga y de diálogo. Igualmente, en esto la mayoría de los papás encuentra eco en esto, pero siempre tenés al que no lo entiende; pero si estás en un grupo de 10 personas y nueve lo entienden, entonces ese solo deberá sumarse al resto. Y ese es el trabajito que hay que hacer en este ámbito y que va de la mano de la capacitación, porque la inconducta es el gran mal que tiene el baby”.

Ante esto, informó que se tomó una nueva medida al respecto y manifestó: “Este año, en la cuarta o quinta fecha, cuando vimos que tuvimos un par de incidentes y siempre buscando cómo pararlo, decidimos entregarles a los tres equipos que mejor conducta tengan por campeonato el 50% de lo recaudado por multas en relación a la inconducta. Previamente, se le brindaba al club premiado por mejor conducta que no abone una inscripción, que es un número menor a esta nueva medida, y con esto la plata vuelve a los clubes y así los mismos están incentivados en portarse bien”.

Y sobre cómo se va a aplicar está iniciativa, explicó: “Para el Apertura hemos realizado una tabla de conducta, en la cual una amarilla tiene un punto, la roja tres, cuando expulsan a un papá cinco y 10 cuando echan al técnico; por lo que, y de acuerdo a lo recaudado por las multas, se dividirá un 50%, 30% y 20% entre los tres clubes que menos puntos hayan sumado en esa tabla”.

En otro punto, ante la actualidad que se vive en el marco del fútbol infantil, con chicos cada vez de menor edad que se integran a clubes de Primera división y esto a veces lleva a que jueguen dos partidos en el mismo día, el máximo directivo de la Liga de Baby analizó: “Seguramente no le hace bien al nene que vaya y juegue un domingo a la mañana a Córdoba y después el padre venga rápidamente por la autopista para que pueda jugar acá, a las 3 o 4 de la tarde; lo bueno sería que los padres opten ante esa situación; de todos modos, creo que es un problema de la familia y no es en sí de la Liga”.

“Como expresé recién, los tiempos son otros y las cosas han cambiado, para bien o para mal, y a esto tampoco lo podés parar; antes tenías que tener suerte para llegar a un club grande y ahora hasta te lo pueden ver en un video, y a quién no le seduce cuando te vienen a decir ‘tu hijo juega bien’ y te lo llevan a Córdoba o Buenos Aires. Es todo un tema”, agregó.

Y, por último, reconoció que “no hay diálogo con la liga grande”, pero que eso no se da “por un problema especial, al contrario, simplemente no se ha dado y eso no quita que lo podamos tener mañana”.

“Lo que sí puedo decir es que la Liga de Baby ya está en pleno proceso para que en 2020 se retiren dos clases juntas y así no coincidirán más la última clase del baby y la Primera de inferiores, permitiendo así que los chicos no se vean sobrepasados de competencia y de entrenamientos, porque actualmente de este modo los chicos no tienen un día de descanso”, concluyó.