Informe de la realidad laboral por género, en el país, la provincia y Villa María. Las mujeres ganan en promedio un 27% menos que los varones. Además, entre las personas ocupadas con salarios bajos, son mayoría. Los datos se basan en un informe preparado por el Observatorio Integral de la Región de la UNVM para EL DIARIO
Imaginemos un escenario familiar perfecto, en el que las tareas domésticas y de cuidado se comparten entre los adultos que viven en el hogar. Imaginemos que cada mañana, ella y él, después de hacer juntos el desayuno, dejar lista la ropa y llevar a los chicos en la escuela, va cada uno a su trabajo. Imaginemos que hacen la misma tarea, durante la misma cantidad de horas y cuando llega la hora de cobrar el sueldo, por 10 pesos que él gana, ella gana 7. La diferencia es mayor aún, en desventaja para las mujeres, si son pobres.
La información fue proporcionada a EL DIARIO a partir de un estudio elaborado por el Observatorio Integral de la Región (OIR), que comparó los datos a nivel nacional, provincial y los referenció con el último relevamiento procesado del conglomerado Villa María – Villa Nueva que data de 2014.
Desocupadas
La población que abarca la Encuesta Permanente de Hogares, al segundo trimestre de 2017, fue de aproximadamente 28 millones de personas.
“En valores absolutos, se destaca una mayor cantidad de ocupados y desocupados varones en relación a las mujeres”, indican desde el OIR.
La tasa de desocupación, que resulta del cociente entre los desocupados y la población económicamente activa (personas que trabajan o buscan trabajo activamente), es mayor en el caso de las mujeres con una tasa de 9,5%, mientras que la de los varones es 8,2%
Pero lo que más llama la atención es la marcada diferencia a la hora de encuadrar en la categoría de “inactivos”, que es el grupo de personas que no trabajan de manera remunerada y que tampoco buscan trabajo. Son mayoritariamente amas de casa, que ocupan la totalidad de sus horas en tareas de cuidado que no son pagas, pero que tienen valor económico (ver páginas 6 y 7).
Dime cuánto ganas…
Respecto a los ingresos percibidos, para hombres y mujeres fueron calculadas tres medidas de resumen: salarios promedio (media), salario mediano (salario ubicado al medio luego de ordenar todos los ingresos de menor a mayor) y la “moda”, que nos indica qué salario se repite más veces.
Para las tres medidas -tal como refleja el cuadro de esta página- los salarios masculinos se sitúan por encima de los que cobran las mujeres. Por ejemplo, el salario medio masculino es 14.082 pesos y el femenino 10.223 pesos, por lo que el salario femenino representa el 72,6% del salario masculino (un 27,4% menos).
Observando la mediana (medida que no es influenciable por valores extremos como sí ocurre con la media), obtenemos salarios inferiores aunque también persiste la brecha según sexo.
En este caso, la mediana masculina es $12.000 y la femenina es $8.500 (un 29,2% menos). Por último, la moda de los salarios masculina es de $15.000 mientras que la femenina es $10.000. Nuevamente, la medida es un 33,3% inferior. Es claro que la brecha aumenta a medida que baja el nivel salarial.
Esto queda reflejado palmariamente si se agrupan los salarios en rangos de $5.000. “Así se ve que los salarios femeninos se concentran en los rangos inferiores y que la distribución cae de manera lineal a medida que los ingresos aumentan”, indicaron. Es que el 75% de las mujeres cobran $15.000 mensuales o menos, mientras que los hombres por debajo de ese umbral representan el 60%.
El rango de ingresos más frecuente de los hombres es 10/15 mil (23%) y 5/10 mil (22%). Para el caso de las mujeres, los más frecuentes son menos de 5 mil (31%) y 5/10 mil (24%).
Aguinaldo, ni lo sueñes
Analizando las principales características de las relaciones laborales, los ocupados varones gozan en promedio de mejores condiciones de trabajo, tanto en relación a los ingresos percibidos como a condiciones contractuales (aguinaldo, vacaciones, obra social y días por enfermedad).
“Respecto a estas últimas, es necesario recordar que alrededor de un tercio de los trabajadores se encuentran en situación informal, independientemente del sexo”, destacan desde el OIR.
Pero al analizar las diferencias según sexo, nuevamente se destacan las peores condiciones cuando se trata de las mujeres. En promedio, las trabajadoras que no gozan de derechos contractuales como vacaciones pagas, aguinaldo, días pagos por enfermedad y obra social rondan el 34%, mientras para el caso de los varones los porcentajes están alrededor del 30%, un promedio de 4 puntos menos.
En Córdoba
Los dos aglomerados urbanos que contempla el INDEC en la provincia son Córdoba y Río Cuarto (a Villa María la tienen “olvidada” desde 2014).
En este punto, hay que señalar que los datos disponibles son relacionados a la desocupación. En este caso, hay menos mujeres desocupadas en la Capital que hombres sin empleo. En Río cuarto la situación es inversa.
Datos de Villa María y Villa Nueva: Es mayor la brecha
Según los últimos datos oficiales disponibles (2014) en el conglomerado de Villa María y Villa Nueva, las mujeres ganan un 39% menos que los hombres en lo que hace al promedio de ingresos. En “la mitad de la tabla” salarial perciben un 33% menos. Y en el ingreso calificado por la estadística como de “moda”, es decir, el salario que percibe la mayoría, la diferencia es algo menor: un 17%. Pero siempre por debajo de los varones.
Por último, el empleo femenino rondaba el 40% en el sector privado, subiendo hasta el 56% en el sector público. De esta forma, y tomando exclusivamente las mujeres ocupadas, el 84% de las mismas trabajaban en el sector privado, mientras que el 16% restante lo hacía en el sector público.
