Ayer comenzaron con la medida de fuerza en el ingreso de la planta que Nestlé tiene sobre ruta provincial 2. Aseguran que si no son escuchados en su pedido, desde el lunes el cese de actividades será del doble de tiempo por cada ciclo
Con el afán de ser escuchados en su pedido de incremento salarial, trabajadores nucleados en el Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA) comenzaron a desarrollar ayer una serie de medidas de fuerza.
Lo hicieron frente al ingreso de la planta que la firma Nestlé tiene en Villa Nueva a la vera de la ruta provincial 2, cortando la entrada y salida de camiones en el lugar durante un lapso de dos horas (de 10 a 12).
Al respecto, Fernando Páez, secretario general de STIA a nivel local, sostuvo que “desde el primer día de mayo venimos discutiendo paritarias y, al no obtener la respuesta que estimamos necesaria, a medida que ha ido pasando el tiempo se han ido profundizando las medidas de fuerza”.
“La semana pasada vencieron 20 días hábiles de una conciliación obligatoria y como primera medida concurrimos a una masiva movilización que se hizo el último miércoles en Capital Federal, mientras que desde ayer comenzamos a realizar paros de actividades de dos horas por turno”, amplió.
Al mismo tiempo valoró que “en el primer día de esta modalidad de protestas tuvimos un alto acatamiento de parte de los trabajadores, a pesar de los problemas que venimos arrastrando con amenazas de suspensiones y de despidos”.
Seguidamente Páez señaló que “la protesta se realizó en la Nestlé porque es una de las empresas más representativas del rubro”.
“Quienes discuten las paritarias nos informaron que las grandes empresas, dentro de las cuales se encuentra Nestlé, son las que más oposición están manifestando para llegar a un acuerdo de aumento para los trabajadores”, criticó.
A raíz de ello expresó también que “esa situación es lamentable, ya que esas empresas más importantes son las que fijan los precios en el mercado y las que más rentabilidad han tenido durante los últimos meses. Con la devaluación del dólar aprovecharon la oportunidad para aumentar sus precios en un nivel desorbitante”.
A continuación el dirigente sindical detalló que “nuestro pedido de aumento es del 48%, teniendo en cuenta el costo de vida y la inflación existente, y vamos a luchar al máximo para lograr el incremento más cercano a ese porcentaje”.
“Hasta el momento nos han ofrecido un 30%, distribuido en tres etapas a lo largo de todo el año, por lo que la brecha hasta el momento es bastante amplia”, opinó.
Finalmente, Páez adelantó que “si la situación sigue sin solución, la idea es aumentar la medida de fuerza a cuatro horas de paro por cada turno”.