
RESERVA – Primera final
Escribe Pablo Luna Broggi
Los juveniles de Ausonia derrotaron de visitante 2 a 0 a los pibes de Universitario con goles de Giorgis y están a 90 minutos de hacer historia
Un buen marco de público animaba una final de reserva atractiva: el horario, el frío y el viento no impedían que la gente se haga presente en el Campus Universitario para ver a un local que se presentaba en su casa como gran favorito, ya que tras eliminar a San Lorenzo de Las Perdices en tierras fortineras, llegaba a la final como invicto.
Del otro lado, un viejo conocido: Juventud River Plate de Ausonia, su escolta en la Zona C de la fase clasificatoria. Un durísimo rival que no había que subestimar, porque venía de dejar en el camino nada más ni nada menos que a Colón.
El partido comenzó con una gran intensidad y el que fue con la idea de ver una gran final comenzó a estar satisfecho desde el primer minuto, ya que los chicos no se guardaron nada y desde el pitazo inicial jugaron un partido muy dinámico y muy emocionante.
Sin embargo, el gran protagonista del partido fue el viento que, en el primer tiempo, favoreció el ataque Universitario y en el segundo, a Juventud River Plate. El resultado final refleja fielmente quién supo aprovechar esta ventaja climática.
La primer ocasión llegó a los 11 minutos y fue para el visitante: una pelota filtrada por el medio de los centrales puso mano a mano al arquero local frente al delantero albirrojo, pero el duelo fue ganado por el guardametas. Sin embargo, sería un aviso de lo que vendría luego.
Luego de la tapada de Martínez, la U reaccionó y comenzó a manejar más el balón y a crear chances claras de gol. La primera llegó 2 minutos después cuando Acosta desperdició un mano a mano frente a García. Luego, el propio Acosta ejecutó un gran tiro libre que “sobró” al uno local y, obviamente ayudado por el viento, casi se abre el marcador de la final.
Todo era del local y Juventud solo apostaba a cortar reiteradamente en mitad de cancha, con pequeños foules que entorpecieran el circuito de juego visitante, y a salir de contra. Sin embargo, la U no lastimaba y esto le podía costar caro. Para colmo, la Juve llevaba peligro al arco de Martínez con intervenciones ofensivas esporádicas que alertaban al banco local. En una de esas, casi abre el marcador de pelota parada tras un centro de Cabaglia que Giorgis remató demasiado alto.
Los primeros 45 minutos se fueron con un local que ilusionaba con la pelota en los pies, pero que no concretaba y un rival que esperaba y preocupaba de a ratos. En el segundo tiempo vendrían las emociones más intensas.
Al inicio del complemento no pasaba mucho: Universitario se trataba de acomodar al cambio de viento mientras no encontraba el juego que había mostrado en la parte inicial. A Juventud se lo veía agazapado y más confiado porque tenía un nuevo aliado que lo podía favorecer en las contras. Sí, adivinó: el viento.
Y así fue como este ayudó para que a los 19 minutos del segundo tiempo, tras un error en la salida universitaria, Giorgis remató desde mitad de cancha y el balón salió disparado como un misil que se estrelló en el travesaño y luego en la espalda de Martínez que había volado para intentar despejar un remate que finalmente terminó metiendo.
Los nervios de los pibes locales acrecentaron las dudas del comienzo e inmediatamente Juventud volvió a convertir: una contra comandada excelentemente por Masilla culminó en una gran definición de Giorgis para decretar el 2 a 0 final y desatar la algarabía de todo un pueblo que ya se prepara para ver a su equipo campeón en casa. En Ausonia están más ilusionados que nunca, el humilde Juventud se llevó un gran resultado y sueña con hacer historia. Universitario una vez más deberá “remarla” desde atrás, jugarán una segunda final muy complicada, pero saben que no es imposible la remontada. Nos espera un gran partido en Ausonia.
Kevin Giorgis
Inquietó a la defensa rival permanentemente y anotó los dos goles del triunfo de Juventud. El primero fue un verdadero golazo: una bomba desde 45 metros que hizo inútil la volada del arquero Martínez.
Federico Nieto
Excelente. No tuvo fisuras su arbitraje. Sí, pequeños errores, pero casi imperceptibles. Estuvo a la altura de la final.