Diversas investigaciones llevan a cabo los estudiantes de la carrera de Medicina de la Universidad Nacional de Villa María.
Según detalló la decana del Instituto de Ciencias Humanas, Gloria Vadori, “en la actualidad se investiga en perfil nutricional y cardiovascular, enfermedades crónicas y prevalentes en la región, terapia antimicrobiana, Bioética, entre otras”.
Medicina incorporó este año a la tercera cohorte, y organiza para las próximas semanas actividades tales como las Primeras Jornadas Nacionales de Inmunología, las Jornadas de Salud Pública, así como las Jornadas de Prevención y Tratamiento de Adicciones.
Vadori resaltó que del total de estudiantes de la carrera de Medicina, solo el 40% provienen de nuestra ciudad, y que los aspirantes a alumnos suman unos 360 cada año.
El cupo de 60 ingresantes por año, recordó, “está relacionado con la capacidad de la infraestructura hospitalaria de nuestro medio”.
En cuanto a los docentes, destacó que “todos provienen de universidades reconocidas, y encuentran en nuestras aulas un clima muy productivo, con una completa libertad de cátedra. Evidentemente, hay diferencias sustantivas entre dar clase frente a 500 alumnos, que frente a 60”.
En materia de instrumental, Medicina incorporó 16 microscopios de avanzado diseño.
La decana manifestó también que “nuestra carrera de Medicina transcurre su tercer año, y en sus logros da cuenta de la importancia del quehacer de la universidad pública, democrática, participativa, inclusiva, gratuita y con compromiso social”.
“El propósito -remarcó- es posibilitar la formación de profesionales médicos con excelente base científica y valores humanistas. Ciencia, la más avanzada, con conciencia de humanidad”.
Vadori abogó por “un médico comprometido con la sociedad y particularmente con la comunidad y la región a la que pertenece. Involucrado en la solución de los problemas del ámbito de la salud y la enfermedad en forma integral, atendiendo a la promoción, protección, recuperación y rehabilitación de la salud individual, familiar y comunitaria. Esto no es solo deseable sino que es imprescindible. Es lo que la sociedad necesita, espera y reclama”.
Por otra parte, manifestó que “siendo la salud una de las dimensiones de la persona humana, el enfoque para su abordaje integral no puede ser otro que el antropológico-ético. El humanismo no es nada nuevo en la Medicina, forma parte de la ética del arte de curar. Pero es nueva la necesidad social que tenemos hoy de poner en visibilidad este humanismo, que la Medicina moderna ha ido acotando por el imperio de distintas razones”.
En cuanto a su opinión sobre la situación de la salud pública argentina, la funcionaria dijo que “encuentra hoy encrucijadas: la cantidad porcentual de médicos por cada mil habitantes es de 3,9%, lo que ubica a la Argentina entre los países con mayor cantidad de médicos por habitante, pero concentrados en zonas de alta densidad poblacional, en contraste con poblaciones pequeñas sin médicos. Esta problemática exige estrategias de políticas públicas nacionales, con la atención primaria con eje central, pero también las universidades nos encontramos particularmente comprometidas”.