Arturo Ferreyra consideró que si bien “hay muchos presos” en la carcel de barrio Belgrano, tanto ahí como en los hospitales psiquiátricos de Oliva y Bell Ville las condiciones son buenas. Destacó las obras que se llevan adelante para mejorar las condiciones de vida de los condenados e internados
Para el juez de Ejecución Penal, Arturo Ferreyra, las condiciones de quienes están alojados en el penal del barrio Belgrano, como la de los pacientes de los hospitales psiquiátricos de Oliva y Bell Ville son muy buenas.
El encargado de controlar el cumplimiento de las condenas y de velar porque desde el Estado se cumpla con el rol de darle a los condenados o pacientes lo que les corresponde, estuvo en Villa María y, en diálogo con EL DIARIO, afirmó que “en general, en la zona, estamos bastante bien”.
De todas formas, opinó que la “cuestión política” es la que “enturbia el tratamiento y el cuidado de los enfermos mentales”.
Una cárcel más grande
Con respecto a la cárcel de barrio Belgrano sostuvo que “gracias a Dios no hay presentaciones de hábeas corpus ni ninguna situación de alguna problemática grave”.
Ferreyra, quien habitualmente asiste al penal todos los miércoles, al igual que la asesora letrada, insistió con que “no hay mayormente problemas” para los internos, pero sí reconoció que “hay muchos presos”.
“Eso es una problemática de hace bastante”, recordó, aunque aclaró que no puede definir la situación como “sobrepoblada” ya que él mismo se encarga, pedidos mediante, “de que cada interno tenga su colchón, su cama, su comida y su lugar para estar, pero son muchos, la verdad es que podría ser más grande”.
En ese sentido dijo que en el lugar se está trabajando para dotar de mejor calidad de vida a quienes están privados de la libertad.
“Se están haciendo obras para ampliar la capacidad del penal y para ampliar los lugares donde puedan hacer tareas y actividades”, dijo Ferreyra. La idea, según explicó, “es que tengan más espacios para la cuestión de la educación, aulas, para tener las visitas y los talleres”. Incluso, adelantó que “hay alguna obra que se está por inaugurar en breve”.
Salud mental politizada
Cuando se lo consultó sobre el estado del lugar y de quienes están internados en el Hospital Psiquiátrico Emilio Vidal Abal de Oliva, lo primero que el juez de Ejecución Penal respondió es que “está muy politizada la cosa”.
“Lamentablemente hay una cuestión de política en el medio que enturbia el tratamiento y el cuidado de los enfermos mentales”, lamentó, y agregó que “estuve en el Hospital y te puedo decir que están terminando la Villa 8, remodelaron la sala de guardia que ahora es un geriátrico y es mejor porque están mucho más cerca los pacientes”.
Además, aseguró que “recorriendo un complejo que era de agudos varones y agudos mujeres, que tenía capacidad para unas 100 personas, veo que lo están remodelando todo, desde baños para subsanar humedades hasta cambiando techos porque era una queja de que se llovía adentro” por lo que “me he venido muy contento del Hospital”.
“En su momento Fortuna (Francisco, ministro de Salud de la Provincia) cuando le hice estos reclamos me dijo que se estaban concretando los llamados a licitaciones, que es lo más engorroso porque eso lleva mucho tiempo, pero se están haciendo las obras y eso es muy bueno”, subrayó el funcionario de la Justicia.
Por otra parte, en relación al pabellón psiquiátrico del Hospital José A. Ceballos de Bell Ville, del cual en el año 2013 se conocieron imágenes que daban cuenta de las horroríficas condiciones de abandono en el que estaban más de 250 pacientes, Ferreyra solo aclaró que “desde aquella denuncia se han hecho muchas obras y se siguen manteniendo, en general en la zona estamos bastante bien”.