Algunas estimaciones indicaron que la plaga de langostas que se hace sentir en el norte argentino ya afectó unas 120 mil hectáreas en Córdoba. Estrategias sugeridas por los organismos de control

Las langostas no son una plaga del pasado. Así lo puede confirmar el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), que emitió un comunicado en el que informó sobre el monitoreo y control de 38 focos de la plaga en todo el país, de los cuales 10 pertenecen a Córdoba. “Si bien no hay un cálculo oficial, la superficie ya afectada por langostas en la provincia alcanzaría entre 120 y 130 mil hectáreas”, según reveló el tesorero de la Sociedad Rural del Oeste de Córdoba, Mario Chiappero, al sitio Agritotal.

Preocupados por la situación, el 20 de enero se realizó una reunión en Villa Dolores, por ser la zona de Traslasierra la más afectada con la plaga.

Participaron técnicos del Senasa, del Ministerio de Agricultura y Ganadería de la provincia, el Ministerio de Agua, Ambiente y Servicios Públicos; y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria.

Según Chiappero, en un primer momento se detectaron cinco focos con el insecto a 50 kilómetros al norte de Villa Dolores, que fueron controlados, pero luego aparecieron algunos focos más que están siendo monitoreados por el Senasa. “Se está esperando que pueda aparecer algún foco más. Calculamos que el área de dispersión de los focos está entre 120 y 130 mil hectáreas. Por eso es que, por ahora, se pueden controlar sólo con los métodos que están usando de mochilas”, señaló el dirigente de la rural villadolorense.

“En todos los casos, los daños provocados por la plaga no se registraron en cultivos, sino sobre pasturas y campo natural”, informó el Senasa y Chiappero lo confirmó. “De todos modos, no deja de ser un problema porque se están comiendo el pasto con el que se alimentan los animales en invierno”, señaló.

En la reunión, un ingeniero de la Universidad Católica de Córdoba precisó algunas características de las langostas. Entre ellas, que comen por día el equivalente a su peso, que en general ronda los dos gramos. Aunque parezca poco, multiplicado por un foco que tenga dos millones de insectos, significa cuatro mil kilos menos de pasto por día.

Los técnicos destacaron que, al menos por el momento, no es conveniente la realización de fumigaciones aéreas para combatir la plaga. Según Chiappero, el objetivo no es eliminar a los insectos, sino controlarlos para que no aumente más la población y se muevan de la zona en la que ya están. Esto además lleva tranquilidad a los apicultores, que temían que aplicaciones por aire pudieran afectar también a las poblaciones de abejas.

En el mismo sentido que la reunión de Traslasierra se realizó otra similar en Frías, dado que Santiago del Estero es una de las provincias más afectadas.

Durante el encuentro se revisaron las acciones desarrolladas por el Senasa con el aporte de las provincias desde julio del año pasado, cuando se registraron y reportaron ataques de las primeras mangas de langostas (Schistocerca cancellata) en los alrededores de la capital de Santiago del Estero y sudeste de la provincia de Tucumán. Rafael Rodríguez Prado, coordinador temático de la región NOA Sur del Senasa, presentó el estado de situación con un reporte del número de focos que se han aplicado hasta el momento y la zona que abarca esta problemática. Para lo cual consideró que “es importante el monitoreo y aviso de la presencia de la plaga de parte de productores, asesores y trabajadores rurales a los organismos correspondientes”.

Avisar para controlar

Desde el Senasa llamaron a productores y población en general a que denuncien la presencia de langostas ante la oficina del organismo o en la sede comunal más cercana.

Para tal fin dispusieron de una línea telefónica gratuita, 0800-999-2386, y de un correo electrónico: acridios@senasa.gov.ar.