Las Cámaras de Apelaciones de Villa María y de Córdoba rechazaron los amparos que presentaron los jubilados contra el Gobierno provincial, tras los descuentos que le aplicaron en los haberes como consecuencia de la polémica ley aprobada en diciembre en la Legislatura
Laura Rüedi, abogada de los amparistas, dio a conocer los argumentos por los que la Justicia provincial rechazó el reclamo presentado por unos 80 jubilados provinciales (40 en Villa María y otro número similar en Córdoba).
En esta ciudad, la Cámara de Apelaciones integrada por Luis Coppari y Juan Carlos Caivano, rechazó “in limine”, es decir, sin analizar la cuestión planteada, por entender que la demandada no debería ser la Provincia de Córdoba sino la Caja de Jubilaciones. “La ley es muy clara y señala sólo unas pocas razones -cinco en total- por la cual se puede rechazar in limine un amparo. El motivo de rechazo de los camaristas villamarienses no encuadra en ninguna de las razones”, dijo Rüedi a EL DIARIO.
“Nunca hubiéramos demandado directamente a la Caja, porque el organismo paga las jubilaciones según una ley sancionada por el Gobierno de Córdoba. Esa ley -dijo- tiene un artículo que es contrario a la Constitución provincial, que dice claramente en su artículo 57 que los haberes de los jubilados son irreductibles. Y la ley, propuesta por el Ejecutivo y aprobada por el Legislativo, se los redujo. Es por eso que el amparo se presenta contra el Gobierno de Córdoba y no contra la Caja”.
En Córdoba capital, los camaristas esgrimieron otro argumento para rechazar los amparos. “Allí, dicen que tenemos otra vía, que es la administrativa y agregan que el artículo de la ley, que es claramente inconstitucional, no tiene una ilegalidad manifiesta para dar lugar al amparo”, señaló la letrada.
“La vía administrativa, es decir, el mandar una carta al Gobierno pidiendo que le siga pagando el 82% del sueldo bruto de los activos, puede llevar años para que tenga una respuesta. Si esa respuesta es negativa, hay que esperar varios años más para que la Justicia resuelva. Y estamos hablando de jubilados. Es por eso que elegimos la vía del amparo, que está prevista en la legislación como una acción pronta y eficaz”, destacó.
Amparistas
Entre los 80 amparistas hay jubilados y pensionados que perciben distintos montos de haberes, según sea la actividad que hayan desempeñado en su vida laboral.
Sin embargo, lejos de lo que se cree, hay recibos con haberes muy bajos. De muestra, se puede mencionar un caso, el de la esposa de uno de los policías que falleció hace un año en un trágico accidente cuando estaban de servicio.
En este caso, como la “vía administrativa”, que “es la que sugieren los camaristas de Córdoba”, no pudo determinar aún si los agentes murieron en servicio, la pensión que percibe es la mínima: no llega a 6.000 pesos para la viuda y sus cuatro hijos.
Rüedi, quien también es jubilada provincial, lamentó la decisión de la Justicia por no abrir la demanda “y dejar que sea el Gobierno el que conteste”. “La verdad, es que todo esto me hace pensar en la tortuga de Mafalda, a la que le había puesto ‘Burocracia’ de nombre. Estamos a su merced”, agregó. Finalmente, dijo que el camino que queda es el de elevar el reclamo judicial al Tribunal Superior de Justicia.