La llegada de la Navidad también es un acontecimiento para nuestros gatos. En casa el ambiente cambia y nuestro gato va a tener que adaptarse a la llegada del árbol de Navidad, de los adornos, de los belenes, etcétera.
Nuestro reto para que nuestros pequeños no toquen todo lo que se encuentren es conseguir que se familiaricen con estos inusuales adornos y eso es precisamente lo que trataremos de ver en el siguiente artículo.
Los árboles, las guirnaldas, las bolas, las velas, las cintas… Navidad trae consigo una gran cantidad de adornos llenos de colorido que perturbarán la atención de nuestras mascotas. Son muchos los juguetes o las distracciones para nuestros pequeños felinos y te vamos a dar una serie de consejos para que estas diversiones no se tornen en una pesadilla para ti.
La base del éxito es hacer partícipe a nuestro gato de la decoración y “sacrificar” para ello algunas de las decoraciones de Navidad. Pero estos pequeños “daños colaterales” harán que el conjunto sea todo un éxito.
¿Con esto qué queremos decir? Pues que tenemos que dejar que nuestro gato juegue con ciertas decoraciones para que las haga suyas y sienta que le pertenecen. Esto lo debemos hacer, por ejemplo, con una bola del árbol de Navidad. Lo mismo con una tira de guirnalda del árbol, que la dejaremos a ras de suelo para que pueda jugar con ella.
Respecto al papel de regalo, haz una bola con papel de regalo y juega con tu mascota y con la bola. De esta manera se olvidará de los regalos para su familia y no querrá “abrirlos” antes que nosotros.
De todas formas, el gato se moverá entre los adornos de navidad que tenga a mano para colocar en ellos sus feromonas y hacerlos de su propiedad. No te agobies por ello, porque recuerda que los gatos son ágiles y no romperán ninguna de ellas.
Y ya que antes hablábamos de regalos, aconsejaros que en una época tan especial como es la Navidad en la que todos tienen regalos, lo mejor es que nuestros pequeños también tengan. Un juguete nuevo, un accesorios, algo para su camita, etcétera. En las tiendas especializadas encontrarás algún detallito que hará que el gato no se sienta desplazado en estas fiestas.
Y es que, aunque no te lo creas, muchos de los problemas que dan a veces los gatos son provocados por “celos”. No son celos como tal, pero sí que los gatos se sienten desplazados de un ambiente festivo y llaman la atención para sentirse parte de éste. Teniendo un detalle con él nos evitaremos problemas en la mañana de Navidad.
Ante los ruidos
Los gatos no solo se pueden alterar por los destellos de los fuegos artificiales, sino que también les afecta mucho el ruido.
Un ruido excesivo o fuerte puede crear lo que se conoce como estrés acústico, que afecta a los felinos en particular, ya que éstos pueden oír los tonos muy altos, alrededor de 1,6 octava más que los seres humanos y una octava por encima de los perros.
Por eso conviene asegurarse de que el gato esté adentro de la casa mucho antes de que comiencen las celebraciones y mantenerlo en un lugar donde no sea posible que los visitantes lo dejen salir sin darse cuenta.
En todos los casos la compañía del dueño es importante. No haciendo mimos y caricias, sino con su presencia, para tranquilizar al animal.