El consultor de empresas entrevistado por EL DIARIO indicó que la devaluación ya le “comió” a Córdoba los 5.000 millones de pesos “extras” que recibirá este año por el 15% que la Nación dejará de retener de la coparticipación
El porcentaje de la deuda en de la provincia de Córdoba que se encuentra en dólares hizo que la devaluación del peso dispuesta por el nuevo Gobierno nacional licuara el dinero de más que comenzará a recibir el Gobierno de Juan Schiaretti en materia de coparticipación federal.
“Ahora que la Nación dejará de retener el 15% de la coparticipación, Córdoba va a recibir unos 5.000 millones de pesos más al año en ese concepto. Pero como la Provincia tiene una deuda en dólares de 1.052 millones, pasó a deber 5.000 millones de pesos más”, explicó el contador y consultor de empresas Darío Poncio.
El analista indicó, además, que “esos 1.052 millones de dólares corresponden solamente a la administración central, es decir que no incluyen la deuda en dólares de EPEC, que ronda los 400 millones (la que se incrementó por la devaluación en unos 2.000 millones de pesos), ni la de las siete agencias como la de Deportes y Cultura, ni la de los ocho organismos descentralizados, entre los que se cuentan Lotería de Córdoba y Bancor, por citar algunos”.
“Podemos decir que en un día se licuó la coparticipación de un año”, graficó Poncio, quien es además integrante del grupo de estudios Plan Fénix Córdoba.
El profesional indicó que “estos números son así y no hay vueltas, más allá de que después se pueda beneficiar si bajan las tasas, por ejemplo, por un eventual acuerdo con los fondos buitre”.
La devaluación
Poncio dijo que “se esperaba una corrección del tipo de cambio y disminución de las retenciones, pero no de una manera tan abrupta”.
“De todas maneras, cuando (Alfonso) Prat Gay dijo que el único tipo de cambio que interesaba era el oficial, empezamos a ver que podía pasar esto, y es por eso que algunas empresas hicieron un colchón preventivo con los aumentos de precios que sufrimos”, indicó.
Y añadió: “Ahora, cuando a semejante devaluación se le suma la eliminación de las retenciones, estamos en presencia de algo tremendo, porque el trigo y el maíz se dispararon por encima de la devaluación, en guarismos de entre 70% y 80%, siendo que son usados tanto para el alimento humano como animal”.
Villa María
Poncio sostuvo que “en Villa María y la región los que producen soja, trigo y carne, sin darle valor agregado, se verán beneficiados”.
“Pero, al tratarse de una cuenca láctea, con varias fábricas… El tambero se encontrará con que no le pueden pagar más por la leche, mientras que a él le aumenta el precio del alimento de las vacas y el alquiler del campo, que muchos pagan en base a la cotización de la soja”, comentó, para agregar que “tal vez se vuelva al cierre de tambos, aunque esperemos que eso no suceda”.
Párrafo aparte dedicó el consultor a la apertura de la economía a productos del exterior. “El control de los productos que entraban era para proteger industrias locales y sus puestos de trabajo. Si ahora vuelven los zapatos importados, los juguetes importados de países con mano de obra barata, es triste lo que puede pasar”, opinó.