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Los despedidos van por su empresa

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Los despedidos van por su empresa
Los trabajadores junto a Bertola (el tercero desde la derecha de la imagen) y Aldo Imán (el segundo), de la UOM

LAS VARILLAS – Exempleados de la firma Dachsa SA
Seis de los 12 trabajadores comenzaron a llevar adelante su propio emprendimiento, el que podría adoptar la figura cooperativa para seguir en el rubro metalúrgico. Cuentan con mucho apoyo
Una docena de trabajadores fueron despedidos de una firma metalmecánica de la ciudad. La industria de este rubro es un eslabón muy importante de Las Varillas. Uno de los cesanteados tuvo cabida en la rama comercial y otros cinco fueron absorbidos por una de las empresas de la competencia. Los otros seis ya aplican sus conocimientos y su empeño en un taller donde continuarán trabajando, probablemente en forma de cooperativa, en un galpón que alquilan.
“Ya empezaron a trabajar”, aseguró Gabriel Bertola, secretario administrativo de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) Regional San Francisco, quien ayer se encontraba justamente junto a los seis despedidos que iniciaron el nuevo taller de soldaduras y demás.

Cambio de firma

En el taller, cada uno en su tarea o “apoyando”

Bertola repasó que Dachsa SA, “no cerró, solo despidió ante una negociación por aparente cambio de titularidad”, lo que se conoce como “vaciamiento de la empresa”, haciendo que bajen los costos de producción despidiendo a empleados con lo que las patronales consideran “mucha antigüedad. Cambiaría, pero el referente sigue siendo Ariel Cerutti, vicepresidente de la empresa”, dijo el gremialista, y la historia varillense recuerda la firma con el propio apellido estampado en implementos para el agro, aunque en los últimos tiempos agregaron también chipiadoras y hasta carretillas.

Sin causa
En marzo pasado, durante medidas de protesta en el lugar de trabajo, por los “haberes de dos meses atrasados”, la patronal asistió con una escribana pública que dejaría constancia de la situación y días después llegaron los 12 telegramas por la causal “abandono de trabajo”. Entre los nominados estuvo también el delegado gremial Fabián Coyos, lo que sorprendió al grupo, ya que el empleado cuenta con inmunidad, por su representatividad, según la Ley 23.551 de Asociaciones Sindicales.
Bertola sostuvo que “esos despidos se aclararán porque los compañeros no percibían sus haberes en tiempo y forma, hablamos de salarios caídos, la empresa además adeudaba aseguradora de riesgo de trabajo (ART), no pagaba aportes de obra social ni sindicales ni los aportes jubilatorios).
Lo que resulta difícil de explicar para el sector es cómo unos despiden personal y a pocas cuadras otra empresa puede absorber empleados, tal el caso de Vialcam.

Un taller calificado
“Lo importante es que comenzaron a trabajar. El gremio ayudó con dos máquinas de su centro de capacitación (Las Varillas), también las firmas Vialcam y TBeH les prestan o alquilan maquinaria para poder realizar pedidos para terceros, para firmas como esas”, contó el sindicalista.
El sexteto se ubicó en un galpón que alquila en la calle San Lorenzo 788 y para el que el Ejecutivo municipal esta semana realizó un aporte para el pago del alquiler. Todavía no tienen nombre definido para este emprendimiento que se perfila como una cooperativa de trabajo, aunque en caso de no lograr cumplir con los requisitos que tal figura exige, no descartan integrar una SRL o SA, deslizaron.
El secretario aseguró que “es toda mano de obra calificada, trabajadores de entre 34 y 60 años, algunos hasta con 25 años de antigüedad. La industria metalúrgica sostiene buena parte de la economía en Las Varillas y la región. En esta ciudad hay muchos talleres que hacen trabajos a empresas, por lo que se va a mantener el trabajo. Así, podemos decir que hay buenas perspectivas, sobre todo si se tiene en cuenta que por la sequía (bajos rindes) las grandes fábricas no van a ampliar ni tomar más empleados, sino que van a tercerizar bastante”, arriesgó.