Sólo el 5% de los encontrados “in fraganti” pidió disculpas al grupo, según contó Lucas Basualdo a EL DIARIO. Vehículos de organismos oficiales también cometieron la infracción

El grupo “Los Rengos” de Villa María llegó la semana pasada a la publicación de 100 fotografías que reflejan a vehículos estacionados frente a las rampas para personas con dificultades para movilizarse, obstruyendo así la posibilidad de circular.

Los miembros del grupo comenzaron a difundir estas situaciones en 2014. “El 24 de marzo del año pasado estaba yendo al Anfiteatro, en donde había un encuentro de músicos y observo que la zona donde se encuentra la rampa de San Juan y Alem se había convertido en un improvisado estacionamiento de motos. Entonces tomé una foto”, recordó Lucas Basualdo al recibir a EL DIARIO en su casa. De esta manera empezaron a recolectar imágenes y a subirlas a Facebook. Este año se sumaron personas ajenas al grupo, que también captan estas circunstancias y se las envían a los administradores de la página.

En un principio no contactaban al infractor, algo que sí realizan en la actualidad, averiguando a través de páginas oficiales por la web la propiedad del vehículo infractor. “Con el 80% nos contactamos y sólo el 20% nos responde”, contó Lucas. Además, reveló que sólo el 5% pide disculpas. “El resto lo toma como un insulto, se enojan” por la exposición, comentó a este matutino.

“Prefieren pagar la multa a ser exhibidos en Internet”, añadió.

Basualdo indicó que desde el grupo pretenden que la Municipalidad tome cartas en el asunto ante las constantes violaciones a la norma. “Es dinero para ellos, pero miran para otro lado”, se quejó.

Cabe destacar que todas las fotos divulgadas han sido registradas en la zona céntrica de la ciudad. Y dejan en evidencia no sólo a vehículos de vecinos comunes, sino también a rodados de organismos oficiales, como “motos de la Policía, autos del municipio, de Gendarmería” o hasta casos que involucran “a un bombero o a profesoras de educación especial, lo que es el colmo”.

“Para mí ni se percatan de que hay una rampa y estacionan. Y están los que saben, pero no les importa, no quieren perder un segundo y estacionan en cualquier lado o no quieren caminar”, evaluó el entrevistado.

“Nos ha pasado que nos digan que sólo fueron cinco minutos o que tenemos las bajadas de los garajes para utilizar. Recibimos respuestas insólitas, como hacete ayudar por uno. No te queda otra que tomarlo con risa”, describió.

Dijo que la intención principal de esta exposición de imágenes vía web es reeducar. “El argentino promedio es así, somos hijos del rigor”, manifestó.