Nació en Bell Ville el 16 de marzo de 1983. Casado, un hijo y otro en camino con nacimiento previsto para febrero. Comenzó su militancia en las filas del justicialismo siendo un adolescente y llegó a presidir la Juventud Peronista de su localidad y del Departamento. De la mano de Martín Llaryora, su amigo, fue titular de la Secretaría de Desarrollo Regional durante el último Gobierno de José Manuel de la Sota. El 10 de diciembre, Juan Schiaretti lo convocó para que se hiciera cargo de la Subsecretaría de Cooperativas y Mutuales de la Provincia. Fue concejal de su ciudad y en dos oportunidades candidato a intendente. A los 33 años ya recorrió un camino interesante
Escribe Nancy Musa
De nuestra Redacción
“Soy un hijo de la democracia”, fueron sus primeras palabras cuando nos encontramos en su despacho de General Paz 120 en Córdoba capital. Tiene un equipaje lleno de ideales, desborda optimismo y a pesar de estar con fiebre nos recibe con la mejor de sus sonrisas y habla con entusiasmo de su trabajo, de su familia, de sus sueños y del peronismo. Es un ferviente admirador del gobernador Juan Schiaretti, un amante incondicional de su ciudad, Bell Ville, un apasionado de la política y de los caballos.
Abraham Galo es un joven que tuvo el coraje para enfrentar el poder estructural, un convencido de que el diálogo es la puerta para el entendimiento, un dirigente que apuesta a la economía social y trabaja para difundir los logros del cooperativismo y el mutualismo.
Es parte del presente y del futuro, un convencido de que los sueños pueden hacerse realidad.
–¿Qué sintió cuando el gobernador Juan Schiaretti lo convocó para hacerse cargo del área de cooperativas y mutuales?
-Me puso muy contento porque es un área que realmente quiero, es una forma de trabajar el sector cooperativo y el sector mutualista que me gusta y destaco a diario, cuando las cosas van mal hay empresas que cierran sus puertas y ahí el sector cooperativo está conteniendo la cuestión social, y otra cosa que debemos remarcar del sector cooperativo es que son solidarios entre ellos.
Por lo tanto cuando me convocaron fue una verdadera alegría y una gran responsabilidad teniendo en cuenta que Córdoba es la tercera provincia en materia de cooperativismo y mutualismo.
–Es una provincia con fuerte impulso cooperativo.
-Sí. Tenemos mil doscientas cooperativas activas y quinientas mutuales que no es un número menor, primero está Buenos Aires, segundo Santa Fe y tercero Córdoba.
Las cooperativas de servicios públicos brindan servicios en más de 207 localidades, hay cooperativas exitosas como EL DIARIO de ustedes, que realmente nosotros cada vez que hablamos de cooperativismo lo usamos como ejemplo porque ha nacido y ha florecido en una crisis y sus trabajadores fueron valientes y han salido adelante con el esfuerzo propio y de sus familias.
Y hoy es una empresa exitosa de la economía social y me consta que han sido solidarios con un montón de entidades en similares condiciones, ustedes acompañaron y transmitieron su experiencia.
–¿Cuál es la tarea qué están realizando desde la Subsecretaría a su cargo?
-Desde la provincia tratamos de hacer más dinámica el área, tratando de estar presentes en todo el territorio, hemos recorrido casi todos los departamentos en este primer año, poniendo a disposición los técnicos para regularizar la situación de aquellas cooperativas que todavía no han cumplido con las normas.
–Al llegar al territorio ¿cuáles son las principales cuestiones que le plantean los cooperativistas?
-Mirá, es muy diverso el espectro cooperativo en nuestra provincia, tenemos cooperativas agrícolas inmensas, de servicios muy grandes y de trabajo muy pequeñas. Por lo tanto los planteos son diversos.
Por lo tanto, la mayor preocupación que plantean las cooperativas pequeñas es encontrarse al día con el cumplimiento de sus obligaciones, la presentación de balances, las asambleas y ahí estamos colaborando, generando capacitaciones y les pedimos que nos digan en qué se quieren capacitar y nosotros las bancamos.
No hay que salir con programas enlatados porque la realidad de Traslasierra no es la misma que la del Departamento General San Martín. Cada uno tiene sus planteos y vamos trabajando sobre necesidades puntuales.
Hemos tratado de ser más dinámicos en la atención para los trámites, hemos vuelto a General Paz 120 en pleno centro, ya tenemos la custodia del archivo, estamos avanzando en la digitalización de ese archivo, estamos trabajando en el cooperativismo escolar que es difundir el cooperativismo en los chicos, este año hicimos una prueba piloto con las primeras olimpíadas del cooperativismo escolar con la participación de más de mil jóvenes en simultáneo en catorce sedes.
Nos llenó de alegría y emoción ver cómo se habían preparado los jóvenes con sus proyectos.
Eso nos hace muy felices.
Hace quince días participamos del Consejo Federal, con representantes de todas las provincias y las autoridades del INAES y nos dimos cuenta de que Córdoba está avanzada en un montón de temas.
–Si tuviera que mencionar las fortalezas del sector, ¿qué mencionaría?
-Las fortalezas de nuestra provincia es la capacidad administrativa que tiene, el recurso humano con el que cuenta, el recurso financiero que nos permite desarrollar todas las actividades. Nosotros hemos asistido a todas las asambleas en que han pedido veedores, hemos realizado inspecciones en las cooperativas de servicios, hemos desarrollado un trabajo territorial muy importante y somos pioneros en materia de cooperativismo y mutualismo educacional.
Somos los únicos que tienen un trabajo tan prolijo con la constitución de más de 170 cooperativas y mutuales escolares, hoy nos encontramos con aproximadamente 30 mil jóvenes en el sistema de la economía social, con la proyección de un 50% más para el año que viene, por eso queremos redoblar esfuerzos y dejé planteado en el Consejo Federal la posibilidad de que Córdoba sea sede de una gran muestra a nivel nacional.
Al presidente del INAES le interesó la propuesta y eso nos permite a nosotros mostrar la dimensión del movimiento que muchas veces los vecinos no tienen, no ven la magnitud de los puestos de trabajo, la capacidad de desarrollo que generan en una comunidad y creo que el gran desafío que tienen es poder dar visibilidad a todo lo que hacen.
Toda esa gran labor debe difundirse.
–¿Hay fondos para apoyar a la economía social?
-El Estado nacional tiene, el Estado provincial ha tomado la decisión de incorporarlos a la promoción industrial y a otros programas. Hoy necesitamos que los programas del INAES lleguen a los territorios y a cada uno de los integrantes del sector.
–Nos vamos para otro ángulo de su vida ¿a qué edad comenzó la militancia?
-Empecé a los 15 años a militar en la Juventud Peronista, a los dos años estaba a cargo de la vicepresidencia del circuito Bell Ville, luego fui presidente del circuito y del Departamento. Después me vine a Córdoba y comencé con la militancia universitaria.
La verdad es que me apasiona la política, creo que es la herramienta para producir los cambios, si nos quedamos criticando en casa es muy poco lo que podemos cambiar. Si nos quedamos haciendo críticas agresivas por las redes es muy poco lo que podemos cambiar. El aporte se hace trabajando, sabiendo que es una profesión ingrata, en la cual vos das todo y te equivocaste una vez y sos el peor. Pero más allá de eso yo creo que uno ha venido a la política para hacer algo por el otro.
–¿Por qué eligió el peronismo para su militancia?
-Porque creo en la justicia social, en la soberanía política y en la independencia económica. Es fundamental para que cualquier país se pueda desarrollar.
Y los valores que tiene el justicialismo de estar en el barro, en el barrio, estar a la par de quien más necesita eso no tiene precio, se me pone la piel de gallina.
Para mí en el justicialismo se vive y se palpa la sensibilidad social y cada vez más jóvenes se suman a nuestro movimiento.
–¿En su familia se hablaba de política?
-Mi madre es una gran militante social, una persona a la que le duele el dolor ajeno y trabaja en los barrios y eso te motiva y me siento orgulloso de la gran labor que realiza mi madre y muchos de mis logros políticos se deben al reconocimiento que la gente le hizo a ella.
–¿De niño cómo era?
-Soy un pibe de barrio que me encanta el barrio, los caballos, las agrupaciones gauchas, participo de eso, me encantan los eventos ecuestres, los juegos de rienda, el entrevero de tropillas entabladas y de hecho estoy tratando de armar una y quiero transmitirle eso a mi hijo. Soy un pibe de barrio que fue muy feliz, tuve una infancia muy linda y elijo todos los días mi ciudad.
–Cuando eligió ser un militante, ¿qué otras cosas lo motivaron además de las banderas del peronismo?
-Poder cambiar las cosas desde adentro. Cuando tuve la posibilidad de ser concejal fui el que más proyectos presentó, presenté el proyecto del banco de tierras porque es fundamental para cualquier familia tener su propia casa. Mi familia hasta hoy no tiene casa y he pasado por diez mudanzas y sé lo que sufre un niño con eso.
También, presenté el de registro de proveedores municipales para que exista transparencia, doble turno en la atención de los dispensarios. Creo que las cosas se cambian participando y todos los que tienen una idea deben hacer sentir su voz dentro de un partido, el que sea o de una institución, es la única forma de transformar todo.
–¿Se sintió contenido por el peronismo de Bell Ville?
-No, yo fui por fuera del peronismo con diferencias en las formas y concepción de muchos temas. Para mí es prioridad el desarrollo, la vivienda y otros temas que para algunos dirigentes no fueron prioridad.
Pero el debate había que darlo, la pelea había que hacerla, peleamos y nos reconoció la gente más que los dirigentes y eso me dio el poder suficiente para poder estar sentado donde estoy hoy.
Y trabajo todos los días para mis vecinos, para que vivan mejor, para que tengan posibilidades de encontrar soluciones a sus problemas.
Me caracterizo por eso, por tener convicciones claras e ir al frente. De nada sirve que nos enredemos en debate fundamentalista, tenemos que trabajar para cambiar las cosas, por eso hago política.
Lo más importante es no mentirle a la gente, decirle cuáles son tus prioridades y si podemos coincidir en un proyecto con los mismos valores vamos para adelante.
–¿Desde niño soñaba con ser político o con qué soñaba?
-Cuando era niño quería ser cura, más de uno se va a reír, pero sí quería ser cura (se ríe).Yo era chico y en el único lugar que me portaba bien era en la iglesia, me llamo Abraham y mi papá me decía ahí te están nombrando y me quedaba quietito (risas).
Después por la pasión por los animales quería estudiar veterinaria, de hecho me recibí en una escuela agrotécnica y luego mi pasión por la política me atrapó.
–Y vino a Córdoba a estudiar…
-Sí, a estudiar Derecho que no la finalicé. Luego en la Universidad Nacional de Villa María hice la Diplomatura en gestión municipal y desarrollo regional que me permitió tener un abanico de conocimientos importantes y debo agradecer a la Universidad de Villa María que es muy importante y junto con varios intendentes cursamos la Diplomatura que a mí me sirvió muchísimo para la función, para la vida y para un montón de aspectos.
–¿Quienes fueron los principales dirigentes con los que se conectó a nivel provincial?
-A nivel provincial empecé a militar en la Juventud y uno de mis amigos que surge en ese momento es Martín Llaryora que hoy tiene la suerte de ser vicegobernador, pero más que suerte es por la decisión, por la tenacidad, por el trabajo y por lo buena persona que es.
Con Martín compartimos militancia desde muy jóvenes y posteriormente seguimos con diálogo fluido y fue un consejero y un guía.
Y hoy me siento totalmente identificado con la labor que realiza nuestro gobernador Juan Schiaretti, porque veo un hombre con una lucidez tremenda y una agilidad política impensada, está antes que los problemas, de hecho ha sido la primera provincia que lanzó la tarjeta social, que lanzó el programa Vida Digna por el cual hemos llegado hasta la fecha a más 24 mil familias que tienen la posibilidad de ampliar sus viviendas.
El programa Lo Tengo de acceso a los terrenos, la gran magnitud de obra pública que va a lanzar para generar trabajo, va a ser la provincia que más obra pública va a tener, y eso nos motiva a seguir trabajando y ojalá podamos estar a la altura de la gestión desde el lugar que nos toca.
–¿Qué visión tiene sobre la situación de la provincia en el contexto de la economía nacional?
-A la provincia la veo más firme que otras, porque tenemos un gran administrador, un dirigente que sabe las prioridades de la provincia y hacia dónde vamos y lo ha demostrado en momentos de crisis peores que ésta.
Hoy el gobernador está acompañando, está trabajando porque es lo que la gente quiere. Hoy necesitamos hacer que la provincia esté acorde al momento y no parar el progreso de Córdoba. En ese sentido el gobernador está encaminado, con total prudencia está avanzando en el progreso de la provincia.
–¿Cuál es su análisis sobre el peronismo cordobés?
-Creo que es un gran movimiento que ha crecido y que ha tenido la madurez de permitirle a muchos compañeros que por diversos factores han participado de otro espacio, se incorporen porque el peronismo es amplitud, trabajo y todo aquel que tenga vocación, como decía el General, no importa de dónde vienen sino hacia dónde vamos.
Y todo aquel que quiera desarrollo, progreso tiene que estar dentro del peronismo de Córdoba, por eso militamos acá, por eso lo defendemos con tanta pasión, por eso nos sentimos representados por nuestro gobernador y ese es el camino.
–¿Qué rol supone que va a jugar el peronismo el año que viene?
-No me atrevo a decirlo, eso lo definirán quienes conducen y nosotros vamos a estar respetando esa decisión.
Nuestro movimiento es muy amplio, es el que ha transformado Córdoba y lo va a seguir haciendo, por lo tanto veremos cuáles son las decisiones de nuestros compañeros.
–Usted, como joven, con todos los ideales, cuando ve estos supuestos hechos de corrupción que salieron a la luz ¿qué sentimientos le generan?
-Uno en esto tiene que ser muy cauto y dejar que actúe la Justicia. Yo no soy juez para juzgar a nadie y creo en el sistema de Justicia de nuestro país si no no me sentiría incluido.
No me quiero meter en esos temas porque no son gratos para nadie, espero que la Justicia actúe y que se esclarezcan para bien o para mal pero que salgan los resultados a la luz que es lo que queremos todos los argentinos.
–Todos los desafíos dejan algún aprendizaje, ¿qué le dejó haber encarado una candidatura a intendente contra el aparato de poder?
-Me dejó un equipo consolidado de compañeros, me dejó el apoyo tremendo de los sectores más humildes de mi ciudad, me dejó el poder haberme afianzado con mi familia de una manera irrompible para toda mi vida, me dejó el sabor de que puedo pelear con quien sea y me dejó el aprendizaje de que realmente se puede. Porque me tocó pelear contra el aparato y perdí por siete puntos contra el mejor candidato en la historia de Bell Ville, un intendente que se había ido con 80 puntos de imagen positiva. No peleamos con ningún improvisado.
Por lo tanto me permitió prepararme el doble, conocer las necesidades de mis vecinos, elaborar los mejores proyectos, armar mi estrategia de campaña con muy pocos recursos por lo que creo que puedo hacerle la campaña a cualquiera (se ríe).
Me permitió tener ingenio, me tocó hacer todo (risas).
–¿Y sería nuevamente candidato a intendente?
-Yo quiero a mi ciudad y el contacto más cercano con el vecino lo tiene el intendente, cuando tengamos las posibilidades y los vecinos crean que es nuestro momento ahí estaremos.
Quiero estar cerca de los vecinos y ser el primero en estar para ayudar a resolver sus conflictos.
–¿En qué situación está hoy su relación con el peronismo de Bell Ville?
-Excelente, estoy formando parte de la conducción y estoy muy bien con todos los compañeros. Realizamos un brindis de fin de año con todos los compañeros y nos permite demostrar que estamos vivos, trabajando y a pesar de un traspié electoral seguimos preocupándonos por el problema de nuestros vecinos y acercando soluciones desde el Concejo Deliberante.
Tenemos dos concejales proactivos, en el Tribunal de Cuentas tenemos una persona muy seria , técnicamente brillante y desde el Consejo de Unidades Básicas tratando de articular la política barrial y aquellos que somos funcionarios trabajando para que las políticas lleguen a nuestra ciudad.
–¿De qué manera logra compatibilizar el trabajo en Córdoba, con la familia?
-Ves que estoy enfermo hoy (se ríe) porque el desgaste físico es mucho porque quiero ser buen padre, quiero ser buen esposo, quiero estar con mi hobby, quiero ser buen funcionario y buen conductor del PJ local (se ríe). El tiempo no alcanza, pero gracias a Dios tengo un buen equipo, tengo una gran esposa que es una gran madre y una gran profesional que me alienta a seguir porque sin ella no lo podría hacer.
Tengo una gran madre que con su trabajo social me permite conocer las necesidades inminentes de mis vecinos y que a través de los brazos articuladores que tenemos en los barrios podemos aportar soluciones.
Me lo permite el equipo, me lo permite la familia y el esfuerzo físico y mental que hacemos.
–En algún momento cuándo se sentó con Llaryora en la Secretaría de Desarrollo ¿sintió que los más grandes lo miraban pensando “este chico qué puede decir”?
-Aún ahora siento que los más grandes me miran así, pero uno viene demostrando que realmente se preparó, que quiere dejar lo mejor de sí en la función más allá que uno a veces tenga aciertos o errores, pero damos lo mejor de sí.
Por suerte tengo un gran ministro que es Roberto Avalle que me permite hacer, jamás me puso un cuestionamiento a las decisiones, me acompañó en todas y me insta a que redoble esfuerzos.
Por eso me siento feliz de ser parte de este Gobierno y acompañar a un gran gobernador que seguramente quedará en la historia como el que más obra pública realizó en la provincia.
–Usted estuvo en el Gobierno de De la Sota y hoy en el de Schiaretti, ¿qué diferencias ves entre ellos?
-Son dos cuestiones distintas e ingresé en dos momentos distintos. Con José ingresé en sus últimos dos años de gestión, por lo tanto no conozco en profundidad su desarrollo.
Con Juan ingresé desde el principio y voy viendo el desarrollo o sea que a esto lo siento un poquito más mío porque empecé de cero. No puedo comparar, los dos son proactivos, la gente los apoyó en las urnas, los dos fueron grandes gobernadores.
–Siendo tan fuerte el peronismo en Córdoba ¿qué explicación tiene para el triunfo de Macri en la provincia?
-Primero, en las PASO ganó De la Sota, o sea el peronismo de Córdoba. Posteriormente la gente eligió una opción y la gente está demostrando que votó una cosa en la Intendencia, otra en la Provincia y otra en la Nación.
Por lo tanto debemos respetar la voluntad popular, y los que estamos en política y trabajamos por la democracia debemos respetar el voto del soberano.
Tenemos una democracia joven como yo (se ríe) y debemos consolidarla, que crezca. Que sea más fuerte y más madura. La gente eligió y debemos trabajar juntos, el gobernador lo está demostrando y realizando un plan de obras inmenso trabajando y articulando con el presidente.
Eso es lo que le interesa a la gente, no quiere que nos peleemos, quiere que podamos tener un plan de Vida Digna, un Primer Paso, un programa Córdoba con Ellas, programas que contengan a los vecinos.
–¿Qué dirigentes potables para el futuro del peronismo observa?
-Uno no puede hablar objetivamente porque mi gran amigo es Martín Llaryora. Pero hay muchos dirigentes, el peronismo tiene muchos dirigentes de la talla del intendente de Río Cuarto, de Facu Torres de Alta Gracia, Claudio Farías de Cruz del Eje, tiene dirigentes de la talla de Martín Gill.
Y tiene la suerte de tener a Juan Schiaretti que nos permite hacer nuestras armas dentro del espacio.
Tiene un gran futuro el peronismo. Es un mix imbatible.
–¿Le preocupa que todavía no se haya podido solucionar la problemática de la pobreza, siendo que el peronismo estuvo años en el poder?
-Sí y por eso veo a nuestro gobernador buscando en forma permanente alternativas. Muchas de las soluciones son de la macro política y se toman en el plano nacional pero nosotros estamos haciendo un esfuerzo enorme (enumeró diversos programas).
Es una tarea pendiente que tenemos todos los políticos, es el deber de todos los dirigentes bajar los índices de pobreza.
–A sus 33 años ¿qué país sueña?
-Sueño con un país de inclusión, con un país donde los jóvenes puedan estudiar, que los que salen a buscar trabajo lo encuentren, ese es el país que sueño.
Sueño que si mi hijo por algún motivo no puede estudiar, tenga la posibilidad de ingresar a una fábrica con un trabajo digno.
Un país con un activo ambiental importante.
–¿Le preocupa la economía o tiene expectativas de mejoras para el año que viene?
-Tengo expectativas, por lo menos Córdoba está haciendo todos los esfuerzos, soy optimista, hoy necesitamos gente optimista, no personas que pongan palos en la rueda porque el país debe salir adelante con el esfuerzo de todos.
–Un mensaje para los jóvenes…
-Que sueñen, que no se pongan techo en la vida, vos decís hasta dónde llegás, cada uno de nosotros tiene las mismas posibilidades y nació en el mismo suelo.
Les digo que se animen a soñar, yo cuando empecé a militar soñaba que el gobernador por lo menos sepa mi nombre y hoy formo parte de su Gabinete.
No hay que ponerse techo en la vida.
–Las adicciones hoy es una problemática importante.
-Sí, ese es un gran desafío de todos los argentinos, debemos trabajar mucho en materia de prevención, hay políticas claras que se están implementando pero se tienen que involucrar todas las instituciones.
En Córdoba se está trabajando, el gobernador tiene un desvelo por eso, en cada oportunidad habla del tema, la inversión más fuerte que hizo el Estado provincial fue en materia de seguridad.
Es un desafío de todos.
–¿Ha tenido decepciones en su militancia?
-No sé si decepciones o quizás hemos tenido la expectativa más alta. Soy muy resiliente, no soy una persona que se encasille cuando algo sale mal, yo voy de frente.
–Es una época de traiciones en la política, ¿las vivió?
-Yo no le llamaría traiciones, creo en la estrategia, eso de amigo enemigo es de otra época, creo que cada uno define sus proyectos, sus ideales y trata de ver la manera de concretarlo. Creo en el diálogo y cualquier diferencia con un café de por medio y comentando lo que quiere y hacia dónde va se acaba la traición.
–La última, ¿qué sueños tiene en lo personal?
-Ser un buen padre y poder llegar a ser abuelo. Pienso si Dios me dará vida para ver felices a mis hijos.
Y en la política no sé cuál sería el máximo sueño, me gustaría en algún momento ser un buen hacedor de leyes, no sé en dónde, pero ser un hacedor de leyes.
Opiniones
Mauricio Macri
El presidente de los argentinos, lo respeto y deseo que Dios lo ilumine para tomar las mejores decisiones porque es lo que necesitamos todos los argentinos. Más allá de la elección, creo que hoy le deseo de todo corazón que Dios lo ilumine.
Juan Schiaretti
Un gran estadista, un gran gobernador y yo lo considero un amigo porque cuando he necesitado una consulta, un asesoramiento él siempre ha estado. La verdad que me saco el sombrero.
Martín Gill
Un compañero, joven, de una generación que está demostrando que está a la altura de las circunstancias y pueden seguir transformando nuestra provincia.
Me gusta
Los caballos, el asado de los domingos con mis viejos es sagrado, compartir con mis amigos, la Naturaleza me puede, levantarme y ver una planta me da una gran alegría.
Me encanta
Compartir con mi familia, con mis viejos, me encanta.
Me divierte
La sonrisa de mi hijo, la verdad que uno no toma dimensión lo que es ser padre. Y le puedo garantizar a cualquiera que mi hijo es la persona que más besos le dí en mi vida, lo torturo, me dice basta papá basta. Lo extraño cuando estoy acá en Córdoba pero verlo sonreír es hermoso y ojalá pueda ver sonreír a todos los niños de mi país.
Me entristece
Un abuelo en la calle pidiendo.