Permanecían internados ayer en el Hospital Regional Pasteur la joven madre que fue baleada por su expareja durante la tarde del sábado pasado en una vivienda de Oliva.

El panorama del estado de ambos presenta un cuadro más auspicioso en la víctima, identificada como Brenda Casas (24), quien sobrevivió y se repone paulatinamente de los disparos que le descargó su exnovio; en tanto éste, José Caruso (35), se halla en coma farmacológico y está en grave estado pero estable, a raíz de haberse baleado la boca para quitarse la vida.

Desde el mencionado nosocomio se informó que también ha evolucionado favorablemente el feto de tres meses que lleva en su vientre la joven madre.

Los disparos, como se informó en las últimas ediciones, fueron realizados con un revólver calibre 22 que la Policía secuestró al llegar al escenario del sangriento episodio.