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Mercado: “Vienen más despidos y no van a parar hasta el cierre”

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Mercado: “Vienen más despidos y no van a parar hasta el cierre”
Frente al acceso principal de la FMPEVM los trabajadores hicieron sentir su repudio a los ajustes y despidos

Fábrica Militar de Pólvoras y Explosivos – El secretario general de ATE aseguró que serán en septiembre

Los dirigentes conocieron la novedad y convocaron a una asamblea de urgencia. Se movilizaron en caravana hasta el predio villamariense para reclamar, ya que adentro se encontraba el director de Gestión de Personas, uno de quienes define el futuro de los trabajadores

En la asamblea que se realizó en el salón de ATE, en calle Santa Fe 1559, los trabajadores escucharon distintas mociones y se decidió la caravana inmediata hasta la Fábrica Militar de Pólvoras y Explosivos de Villa María, a donde llegaron por un camino alternativo, tratando de sortear los retenes de Gendarmería Nacional y de la Policía de la Provincia de Córdoba. Con los primeros debieron acordar para llegar hasta la puerta del predio, donde se mantuvieron hasta alrededor de las 14.

Sábado. Los trabajadores de la Fábrica Militar de Pólvoras y Explosivos Villa María (FMPEVM) se declararon en asamblea permanente, porque “habrá más despidos y no van a parar hasta el cierre”, por lo que llevarán a cabo medidas de acción directa toda la semana próxima para defender sus puestos de trabajo.

Así lo definieron los nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), quienes en gran número asistieron ayer a una asamblea convocada de urgencia durante las últimas horas del viernes, cuando algunos de sus dirigentes, que se encontraban en Buenos Aires, conocieron la más que preocupante noticia: habrá más despidos a partir del 1 de septiembre.

En el mismo marco, definieron manifestarse frente al predio del polvorín villamariense, donde indicaron se encontraba parte de la cúpula que toma las decisiones de su futuro, entre ellos Fernando Esperanza, director de Gestión de Personas de Fabricaciones Militares.

Precisamente el lunes, Esperanza y el subinterventor de esta dependencia del Ministerio de Defensa, Ricardo Casal, serán parte de un encuentro en sede del Gobierno central en Buenos Aires, y que mantendrá en vilo a los trabajadores, por lo que definieron congregarse a partir de las 10 en asamblea, probablemente hasta el final de esa reunión.

El cónclave, del que participarán además el directores de las plantas de Fabricaciones Militares  del país, está apuntando en la agenda de Estado como definitoria para evaluar cuestiones productivas y del personal (sobre el que se aplicaría el ajuste, según trascendió).

Vienen por todo

Fernando Mercado, secretario general del sindicato en Villa María, marcó que “los trabajadores están esperando esa reunión del lunes, con mucha incertidumbre, por lo que es necesario plantarse en pie de lucha, todos unidos”. Además de las medidas que se tomen en la semana, entre mediados de mes y el 20 de agosto, estarán viajando desde todas las dependencias de Fabricaciones a Buenos Aires, para una gran manifestación. “Nos dan a entender que vienen por todo”, dijo, ya que entiende “habrá más despidos y no van a parar hasta el cierre”.

Nunca se hizo

Mercado señaló que “más allá del reconocimiento del Gobierno y el Ejército a Larrabure, en un nuevo aniversario del copamiento de la Fábrica Militar de Villa María, que nunca se había hecho, justo larga esta información (la de los próximos despidos)”, lo que justifica la presencia de autoridades en el predio.

El coronel Argentino del Valle Larrabure fue subdirector de la Fábrica Militar de Villa María. En la noche del 10 de agosto de 1974, el ERP (Ejército Revolucionario del Pueblo) llevó adelante el copamiento en la dependencia local, secuestró al jefe castrense y esto derivó en su muerte.

Hacer negocios

“Los militares solo están preocupados en hacer negocio y para eso se ponen a disposición de Oscar Aguad (ministro de Defensa de la Nación). Es claro que cuando un Gobierno desoye a los trabajadores, pasan estas cosas y alguien está haciendo su negocio”, lanzó además el dirigente, quien apuntó que la FM “es una empresa que no es rentable, si la política es comprar afuera. Hasta los chalecos antibalas se compran a privados”.

Puntualmente sobre la situación productiva actual, mercado señaló que “no ha caído, debido al cierre de la Fábrica de Azul (lo que dejó 500 trabajadores en la calle), pero poco interesa a este Gobierno, porque si mañana tienen que cerrar, no se fijarán quién queda sin trabajo o cómo afecta a un ciudad como Villa María este cierre”.

Y en cuanto cómo la sociedad villamariense percibe esta crisis en una de las mayores industrias locales, sostuvo que “cuesta hacer entender la gravedad de la situación, porque le han metido en la cabeza que los trabajadores públicos no trabajan, que son vagos, cuando René Favaloro y los médicos que te atienden en los centros de salud locales, son recibidos en universidades públicas, por ejemplo. Debemos reflexionar sobre esto”.

La frase

“No están dadas las condiciones para ganar, pero vamos a pelear, pelear, pelear”, dijo Walter Secondino, de ATE, durante la asamblea.

“La realidad de la Fábrica nos hace mal cada día”, lanzó un trabajador en la reunión.

“Si nosotros no nos movemos, no se va a mover (Gabriela) la diputada Estévez, ni el intendente (Martín Gill), ni la sociedad”, dijo Oscar “Cacho” Mengarelli (foto), ante la propuesta de una compañera de pedirle “que vengan a los que dijeron que iban a tocar el bombo con nosotros”. Mengarelli recordó “los 90”, comparó y propuso además “salir a los barrios a repartir volantes, donde seguro estarán los dirigentes que ya hacen campaña, y no se podrán hacer los boludos”.

17 MILLONES DE PESOS

“Es una regla de tres simple: el PBI (Producto Bruto Interno) de una ciudad, por ejemplo, se vuelca en un mismo circuito económico de la ciudad. Ese PBI está en unos 17 millones de pesos mensuales (más de 200 al año), entre mano de obra, proveedores y demás. El trabajador no es un ahorrista, sino que vuelca día a día su salario en la ciudad, lo que involucra a Villa María y Villa Nueva. Se va en alimentos, zapatillas, combustible, servicios, educación…”, explicó Fernando Mercado, titular de ATE Villa María.