El extitular de Salusso Bienes Raíces, y responsable de más de una decena de loteos y proyectos inmobiliarios, responsabilizó a Sergio Lozita y su escribanía por comercializar cientos de terrenos sin su autorización
José Salusso quiere que sus palabras se lean porque asegura que luego de años de estar fuera de la ciudad, volvió con el compromiso de legitimar y escriturar a todas aquellas personas que compraron de buena fe tierras en algunos de sus desarrollos.
Son cientos las personas que esperan hace años poder obtener el título de propiedad de loteos en Villa María, Villa Nueva y otros puntos de la provincia donde el empresario inmobiliario, extitular de Salusso Bienes Raíces, ha comercializado.
Tras haber estado un tiempo viviendo en Pinamar por “problemas familiares y de salud”, Salusso quiso aclarar las acusaciones que recibió de “estafa” porque “no me fui escapando de nada”. “El problema es que en los loteos existe una gran confusión. La gente cree que es el propietario el responsable de que no salgan las escrituras, pero eso tiene que pasar por distintas reparticiones. Por ejemplo, cuando desarrollé La Reserva, ni siquiera pasó por DIPAS (Dirección Provincial de Agua y Saneamiento), pero desde 2006 empiezan a haber cambios. Cuando Aguaclara inició el expediente, pasó por DIPAS, Medio Ambiente, Impacto Ambiental y hasta el Ministerio de Agricultura y Vialidad. Eso la gente no lo conoce y eso es lo que genera una gran demora también”, detalló.
De todas formas, aclaró, apuntó y denunció: “En 2012 dejé de trabajar con la escribanía Lozita porque empecé a detectar irregularidades. Hoy esta escribanía me tiene retenidos los boletos de 14 emprendimientos, dificultando que se pueda escriturar”.
Esas irregularidades a las que hace referencia son varias y no son pocos los damnificados. “Sergio Lozita hacía cesiones de boletos sin mi firma, cuando siempre debería firmar yo autorizando la venta. Es incalculable el daño que la escribanía Lozita hizo porque más allá de los daños económicos, acá atrás hay personas, familias, afectadas, que no saben qué va a pasar con su lote”, remarcó.
A su vez, agregó que “ahora saltó a la luz el hecho de que se apropió de un terreno con una casa adentro en Carlos Paz”.
La explicación que dio Salusso para que se pudieran haber gestado tantos negocios a sus espaldas, es que “éramos amigos de la infancia con Sergio Lozita, tenía tanta confianza en él que cuando hacía los boletos le entregaba una copia al que compraba y yo dejaba mi copia y una tercera en la escribanía; hoy esos papeles no me los da, pero la ventaja es que la gente en su casa sí”.
No es menor la advertencia que lanzó para quienes “no hayan comprado de buena fe”: “Voy a denunciar todas las irregularidades porque me tienen trabados 14 emprendimientos. Los que compraron irregularmente van a tener problemas. Por ejemplo, en Aguaclara hay irregularidades serias, tal es así que en esa escribanía faltan 23 boletos originales que desaparecieron. Lamentablemente hay gente buena que confió en el escribano. Voy a tratar de evitar que esto se judicialice y vamos a ver cada caso en particular”.
“Donde haya vendido José Salusso y esté mi firma, no va a haber ningún problema; donde esté la cesión de Acción Urbana, no va a haber ningún problema; ahora, cuando haya vendido alguna persona ajena a la sociedad, como un contador que es Daniel Rosso, otro estafador que tuve en los emprendimientos, o socios sin autorización, a toda esa gente se la va a tratar en el área legal en Córdoba.
De mi parte voy a poner mi voluntad para que la gente escriture y en primer lugar voy a escriturar y priorizar a la gente que vive en la casa. Ahora, de la gente que tenga baldíos y haya comprado de mala fe, me voy a defender. Hay por lo menos 30 en estas condiciones en Aguaclara”, sostuvo.
Salusso adelantó que los próximos meses volverá a fundar la empresa Altomar Desarrollos Urbanos, en Córdoba, con una oficina donde recibirá a todas las personas damnificadas o que esperan su escritura.
“Mi meta es legitimar a los que compraron de buena fe”, insistió, y detalló que ahora está trabajando con otra escribanía, junto a un grupo de tres ingenieros y un equipo de abogados “con quienes voy a lograr legitimar antes de mayo alrededor de seis proyectos; estamos hablando de 500 escrituras en menos de seis meses”.
“Todo lo que hice, lo hice de buena fe; lamentablemente estuve rodeado de mala gente, sufrí traición por gente que era de mi confianza. Hubo un aprovechamiento de mi situación económica, de salud, de quienes creían que yo no volvía más o que me iba a morir”, cerró.